Descubierta en Algeciras una amplia red de traficantes de obreros marroqu¨ªes

La Polic¨ªa Municipal de Algeciras (C¨¢diz), en colaboraci¨®n con la Guardia Civil, ha descubierto una red de traficantes de obreros marroqu¨ªes, cuyos cabecillas se sospecha tengan su centro de operaciones en la provincia de Valencia. En una actuaci¨®n conjunta, efectuada el pasado domingo, lograron la detenci¨®n de ocho trabajadores marroqu¨ªes, as¨ª como de dos ciudadanos espa?oles y otro de Marruecos. La red de traficantes facilitaba la entrada ilegal, previo pago de unas 45.000 pesetas.

La polic¨ªa espa?ola ten¨ªa conocimiento de la presencia de un barco de pesca, que hab¨ªa partido la semana pasada desde R¨ªo Mart¨ªn, en la costa norte de Marruecos, con once personas de nacionalidad marroqu¨ª a bordo, que pretend¨ªan entrar clandestinamente en nuestro pa¨ªs. Estas personas fueron desembarcadas el pasado domingo en la playa algecire?a de Sangarc¨ªa. Alertadas todas las fuerzas de seguridad ciudadanas, entre ellas, una patrulla de la Brigada de Acci¨®n Inmediata de la Polic¨ªa Municipal algecire?a, ¨¦stos detuvieron al ciudadano marroqu¨ª Hamed Mohamed All¨ªn, residente en El Rinc¨®n de Med¨ªn (Tetu¨¢n), que ten¨ªa en su poder 15.200 dirhams, unas 300.000 pesetas al cambio, que proced¨ªan del pago efectuado por los inmigrantes clandestinos a cambio del servicio prestado.Horas despu¨¦s, los polic¨ªas municipales interceptaron un Renault 4, conducido por su propietario, Salvador Dur¨¢n Aguilera, a quien acompa?aba Ildefonso Sanz-Daza Dom¨ªnguez, en cuyo interior viajaban cinco marroqu¨ªes sin documentaci¨®n. El servicio continu¨® m¨¢s tarde con la localizaci¨®n de otros tres marroqu¨ªes, que tampoco llevaban encima ning¨²n tipo de documentaci¨®n. Todos los detenidos, junto con el material y el dinero intervenido, fueron puestos a disposici¨®n de la Guardia Civil. Tras las declaraciones efectuadas en el interrogatorio por los detenidos, parece ser que tanto Mohamed All¨ªn como Dur¨¢n Aguilera y Sanz-Daza Dom¨ªnguez son los presuntos integrantes de una red de traficantes de obreros marroqu¨ªes, con destino a Espa?a y a algunos puntos de Europa. Esta red de entrada clandestina en nuestro pa¨ªs facilitaba la operaci¨®n mediante el pago por persona de una cantidad que oscilaba entre los 2.500 y 3.000 dirhams (unas 45.000 pesetas). Una vez efectuado el desembarco clandestino, los componentes del cargamento eran trasladados a un lugar de concentraci¨®n en la provincia de M¨¢laga, desde donde eran distribuidos, o abandonados, como ya ha sucedido en anteriores ocasiones, a otros puntos de nuestro pa¨ªs. Seg¨²n todos los indicios, el siguiente eslab¨®n de esta cadena se encuentra en la provincia de Valencia, donde parece ser que se desenvuelven los cabecillas de toda la operaci¨®n.