Familiares de otro preso del PCEr encuentran un micr¨®fono-emisor oculto en su domicilio

La Asociaci¨®n de Familiares y Amigos de Presos Pol¨ªticos (AFAPP), que agrupa a gran n¨²mero de familiares de presos del Partido Comunista de Espa?a Reconstituido (PCEr) y de los Grupos de Resistencia Antifascista Primero de Octubre (GRAPO), denunciar¨¢ al defensor del pueblo, Joaqu¨ªn Ruiz-Gim¨¦nez, la violaci¨®n de los domicilios de varios de sus miembros, despu¨¦s de encontrarse en esta semana otro micr¨®fono-emisor en la vivienda de los padres de Isabel Santamar¨ªa del Pino, actualmente presa en la c¨¢rcel de Yeser¨ªas. Josefina Garc¨ªa, madre de otro preso del PCEr, hab¨ªa denunciado tambi¨¦n (v¨¦ase EL PA?S del 15 de marzo) el hallazgo de un aparato de escucha oculto en su domicilio. Los padres de Isabel Santamar¨ªa creen que la polic¨ªa les detuvo en septiembre de 1980 s¨®lo para aprovechar las 72 horas de retenci¨®n y colocar el micr¨®fono.

Miembros de la AFAPP manifestaron su indignaci¨®n ante la persecuci¨®n policial de que son objeto y manifestaron que "es f¨¢cil explicarse ahora las indiscriminadas detenciones que hemos sufrido, y nos parece intolerable que tengamos la impresi¨®n de vivir en libertad vigilada".Pedro Santamar¨ªa y Candelas del Pino descubrieron el micr¨®fono en su domicilio, en el n¨²mero 34 de la calle del Tercio, pero no se hab¨ªan atrevido a denunciarlo a la opini¨®n p¨²blica. El aparato estaba colocado en el cuarto de estar. Sus an¨®nimos instaladores abrieron un peque?o agujero en la pared, por el que hab¨ªan pasado un segundo micr¨®fono al dormitorio del matrimonio. Al aparato, que funciona conectado a la red el¨¦ctrica, tuvieron que unir un peque?o transformador porque la vivienda de la familia Santamar¨ªa dispone de una instalaci¨®n de 125 voltios. El descubrimiento se efectu¨®, al igual que en el caso de Josefina Garc¨ªa, por medio de un receptor de radio. En numerosas ocasiones hab¨ªan escuchado en un lugar no muy alejado de la vivienda la conversaci¨®n de alguien de la familia, en la frecuencia modulada de una radio.

Detenciones indiscriminadas

Isabel Santamar¨ªa, de veinticinco a?os de edad, ha sido detenida en varias ocasiones y puesta en libertad sin cargos. En la actualidad cumple en la prisi¨®n de Yeser¨ªas condena de cuatro a?os por propaganda ilegal.

Desde la primera detenci¨®n, su familia ha sufrido tambi¨¦n arrestos policiales. Los padres han sido detenidos en cuatro ocasiones y puestos en libertad, siempre sin cargo alguno. Jos¨¦ Santamar¨ªa, hermano de Isabel, ha sido detenido "alrededor de quince veces, ni lo recuerdo", dice. La primera detenci¨®n de los padres de Isabel fue nada m¨¢s conocerse la noticia de la fuga de cinco grapos de la c¨¢rcel de Zamora, en diciembre de 1979. Los familiares y amigos de presos del PCEr y de los GRAPO sufrieron entonces numerosas detenciones.

La AFAPP ha denunciado, de forma reiterada, a la opini¨®n p¨²blica estas indiscriminadas detenciones y ahora, despu¨¦s de descubrirse en esta semana dos micr¨®fonos en viviendas de familiares de presos, piensa denunciar el hecho a las autoridades judiciales y llevar el asunto al defensor del pueblo, Joaqu¨ªn Ruiz-Gim¨¦nez. El abogado Gerardo Mart¨ªn ha sido encargado del caso y piensa presentar una querella criminal contra los responsables de la colocaci¨®n ilegal de los aparatos de escucha.

"Situaci¨®n indignante"

"Esta situaci¨®n es indignante", dice Josefina Garc¨ªa, la otra persona que encontr¨® un micr¨®fono en su domicilio, "y creemos que hay m¨¢s aparatos en las viviendas de otros familiares de presos, aunque todav¨ªa no los han descubierto". Los micr¨®fonos se detectan con facilidad. Son sistemas primitivos que funcionan conectados a la red el¨¦ctrica, lo que permite rastrear la instalaci¨®n. Las conversaciones que recogen pueden o¨ªrse en la frecuencia de modulada de un receptor dom¨¦stico de radio pr¨®ximo.

Las dos familias que han descubierto hasta el momento los sistemas de escucha consideran que estas instalaciones violan el art¨ªculo 17 de la Constituci¨®n que, en sus p¨¢rrafos 1 y 2, garantiza "el derecho al honor, a la intimidad personal y familiar y a la propia imagen" y a?ade: "El domicilio es inviolable. Ninguna investigaci¨®n domiciliaria podr¨¢ realizarse sin mandamiento judicial, salvo en caso de flagrante delito o con consentimiento de su titular".

Candelas del Pino y Pedro Santamar¨ªa creen que en estos casos la polic¨ªa "ha actuado con impunidad; parece que estamos", a?aden, "en una libertad vigilada; cada vez que ocurre algo con los GRAPO o el PCEr nos detienen, por lo general de noche, y no s¨®lo a nosotros, sino a muchas otras personas, y nos dejan en libertad sin cargo alguno a las 72 horas".