Santi tiene la lesi¨®n m¨¢s grave que se recuerda
Santi, jugador del Sevilla, est¨¢ en una cl¨ªnica a escasos metros del campo de Sarri¨¤, donde un choque con Thomas Nkono, durante el transcurso del aburrido Espa?ol-Sevilla del pasado domingo, te produjo lo que el doctor sevillista Antonio Leal ha calificado como "la lesi¨®n m¨¢s grave que he visto en mi vida". La afirmaci¨®n no parece exagerada, ya que la operaci¨®n realizada por el doctor Villarubias, la misma noche del domingo, consisti¨® en arreglar una rotura de ligamento cruzado interno, rotura de ligamento lateral interno, rotura completa de c¨¢psula posterior, rotura de ligamento lateral externo, rotura de menisco externo, desinserci¨®n completa de menisco interno y fractura de meseta tibial externa. Todo ello en la pierna izquierda, "mi favorita", Santiago Llorente, al que todo el mundo llama Santi, tiene veintis¨¦is a?os y lleva dos temporadas en el Sevilla.
Antes hab¨ªa jugado en el M¨¢laga, precisamente el club en el que milita Hierro 1, que, tambi¨¦n en partido jugado el pasado domingo ante el Valladolid sufri¨® una grav¨ªsima lesi¨®n: fractura de tibia y peron¨¦ de la pierna derecha. "Me llam¨® ayer", comenta Santi mientras intenta encontrar una postura para acomodarse sobre la cama, "y estuvimos hablando de la mala suerte que hemos tenido. Fue una forma de consolarnos y darnos ¨¢nimos. Cuando ¨¦l lleg¨® al M¨¢laga, yo ya estaba en el Sevilla". Santi ha explicado, durante las ¨²ltimas 48 horas, m¨¢s de mil veces la lesi¨®n. Su narraci¨®n acaba siempre con una coletilla cari?osa, pero poco cre¨ªble: "No creo que hubiera mala intenci¨®n en la salida de Nkono". Santi considera que "lesiones como la de Hierro I y la m¨ªa demuestran que el f¨²tbol espa?ol se ha convertido en un f¨²tbol peligroso".El jugador sevillista, que, incluso en una situaci¨®n tan desagradable como ¨¦sta,, se comporta con una amabilidad y cortes¨ªa exquisitas, comenta: "Me lanzaron un bal¨®n en profundidad por la derecha, entr¨¦ en el ¨¢rea, sali¨® Nkono con los pies por delante, recuerdo que llegu¨¦ a tocar el bal¨®n y ca¨ª. La salida fue, desde luego, muy aparatosa". Le cuesta hablar. Le duele todo. Se pasa el d¨ªa "intentando encontrar la postura ideal sobre la cama, pero no logro encontrarla". Y es l¨®gico. Su pierna derecha est¨¢ envuelta en yeso, con un agujero sobre la rodilla por el que penetra una sonda. Est¨¢n prohibidas las visitas y el tel¨¦fono no cesa de sonar. "Es terrible, me paso el d¨ªa descolgando el aparato, pero mi estado no me permite atender a todo el mundo y eso me duele, me sabe mal, porque la gente llama para darme ¨¢nimos y eso siempre debe agradecerse". Ahora el que pregunta por ¨¦l es Salguero, el defensa del Madrid: "Ya estoy mejor", le dice con una leve sonrisa en los labios; "no veas lo que ha sido, macho. Rodilla, laterales cruzados, incluso me parece que hay algo de tibia. Terrible, macho".
Son los peores momentos de una larga lesi¨®n. "Son momentos dif¨ªciles, porque la jugada se me repite continuamente en la mente. Veo el bal¨®n, veo posibilidades de marcar, sale Nkono, toco el esf¨¦rico. Es una pel¨ªcula que se repite continuamente. Y al final del sue?o siempre pienso que se hubiera podido evitar el choque. Incluso me han comentado que el ¨¢rbitro pit¨® fuera de juego, pero ninjuno de los dos o¨ªmos el silbato". El ha vivido la grave lesi¨®n de su compa?ero Montero. "Estuve anim¨¢ndole continuamente, porque no quer¨ªa que se viniera abajo. S¨¦ que voy a derramar muchas l¨¢grimas, s¨¦ que la recuperaci¨®n es muy sacrificada, yo he visto sufrir mucho a Montero, he visto c¨®mo sus ojos derramaban l¨¢grimas mientras hac¨ªa los ejercicios para doblar la rodilla. Ser¨¢ muy duro, pero tengo que conseguirlo. Cuando te llama la gente e intenta animarte es cuando te das cuenta de lo que te falta".
Santi sue?a con recuperarse antes de esos cinco o seis meses que dicen puede tardar en jugar. "Hace cuatro a?os, en el M¨¢laga, sufr¨ª rotura de ligamentos del tobillo izquierdo. Consegu¨ª volver ajugar en cuatro meses, mucho antes de lo que me pronosticaron". El habilidoso delantero sevillista cree que la culpa de la violencia del f¨²tbol espa?ol es de todos: "Ahora, ya no ense?an a los chavales a dominar el bal¨®n, no les adiestran en la t¨¦cnica como hac¨ªamos nosotros; ahora los infantiles y juveniles basan toda su preparaci¨®n en la fuerza y la rapidez. El f¨²tbol que se practica ahora es m¨¢s duro y m¨¢s r¨¢pido y, por tanto, m¨¢s dif¨ªcil de controlar. Los entrenadores s¨®lo piensan en sujetar, inutilizar, marcar a los jugadores habilidosos del contrario, a los que le pueden complicar las cosas, por su f¨²tbol Por eso ahora destaca gente que no sabe jugar, pero que sabe marcar. Es m¨¢s f¨¢cil destruir que construir. A todo ello contribuye tam bi¨¦n el p¨²blico, que antes se senta ba en los estadios queriendo asis tir a un bello espect¨¢culo. Ahora la gente ¨²nicamente piensa en que gane su equipo y, a menudo, incluso disculpa los m¨¦todos, aunque cuando se produce una grave lesi¨®n como la m¨ªa lo sientan".
Santi no reconoce que la violencia sea premeditada: "S¨¦ que los t¨¦cnicos exigen f¨¦rreos marcajes, s¨¦ que hay jugadores que intentan sustituir la fuerza por la t¨¦cnica, s¨¦ que lo importante para todos es ganar, pero me resisto a pensar que existan jugadores que saltan al c¨¦sped a lesionar al contrario".
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