"Todas las medidas para combatir el paro tienden a aumentarlo" seg¨²n Sauvy

El paro es un mal voluntario de las sociedades modernas, dado que todos los m¨¦todos de soluci¨®n estudiados tropiezan con obst¨¢culos pol¨ªticos", manifiesta en esta entrevista el soci¨®logo franc¨¦s Alfred Sauvy, creador del Instituto Nacional de Estudios Demogr¨¢ficos de Par¨ªs. Intelectual progresista y de planteamientos heterodoxos, Sauvy, quien recientemente dict¨® una conferencia en la facultad de Ciencias Econ¨®micas de Barcelona, opina que "que todas las medidas para combatir el paro tienden a aumentarlo".

"El problema actual del paro y la forma en que se manifiesta es resultante del progreso social", afirma Sauvy. "Los Estados industriales de hoy tienen planteado un grave problema con el desempleo, porque han ido asumiendo la responsabilidad de subvencionar a los ciudadanos parados." El soci¨®logo franc¨¦s, una mentalidad abierta y progresista de 85 a?os, recuerda que en la primera fase del capitalismo, de impronta industrial bajo el imperio del liberalismo econ¨®mico, esta ayuda estatal no exist¨ªa y el paro era un problema social muy grave, pero no un problema de Estado en la misma medida en que lo es ahora. "Es indudable que el proceso social ha tra¨ªdo esta ayuda del Estado, pero tambi¨¦n ha ocasionado una situaci¨®n en la que se dan obst¨¢culos pol¨ªticos insuperables".En opini¨®n de Sauvy -quien despliega una vitalidad considerable y hace gala un sentido juvenil del humor que recuerda al del presidente italiano Sandro Pertini-, "todas las medidas para combatir el paro tienden a aumentarlo. Por ejemplo, la pol¨ªtica econ¨®mica del Gobierno franc¨¦s, pese a sus plan teamientos te¨®ricos y sus intenciones manifiestas, se encuentra en un atolladero".

Ejemplos de esta situaci¨®n son las medidas como el establecimiento de salarios m¨ªnimos, la prohibici¨®n de despedir trabajadores u otras manifestaciones de una r¨ªgida intervenci¨®n estatal que "defienden los intereses objetivos de los trabajadores, pero en mo mentos de crisis econ¨®mica tien den a impedir la creaci¨®n de nue vos puestos de trabajo".

Paro y progreso t¨¦cnico

Seg¨²n Sauvy, "el ¨²nico modo de solucionar el problema del paro a medio plazo, y siempre considerando las cosas desde una perspectiva puramente demogr¨¢fica no pol¨ªtica, ser¨ªa el establecimiento de una planificaci¨®n de cariz autoritario, pero esto es pol¨ªticamente impensable en los estados democr¨¢ticos.En este sentido, no deja de ser curioso que el paro alcance grandes dimensiones en pa¨ªses relativamente poco poblados", lo que en su an¨¢lisis revela la falta de posibilidades pol¨ªticas de solucionar el problema.

Su actitud es favorable al progreso tecnol¨®gico del mundo actual, pero advierte que no constituye una piedra filosofal que pueda resolverlo todo a corto y medio plazo. La argumentaci¨®n del viejo profesor parte de que el progreso t¨¦cnico "a¨²n existe", y compensa en parte los errores y disfunciones de la econom¨ªa, si bien ello es insuficiente para mejorar la situaci¨®n a largo plazo: estamos en las postrimer¨ªas del siglo XX y "en muchos lugares del mundo el fundamennto de la econom¨ªa sigue siendo el mismo que en el siglo XIX o incluso que mucho antes. En el mundo actual, el progreso coexiste con la supervivencia de estructuras econ¨®micas arcaicas".

"La revoluci¨®n de la electr¨®nica es en apariencia altamente prometedora" -concreta el maestro de tantos economistas y dem¨®graf¨®s- "pero creo que el papel de los robots se ha exagerado, por lo menos en el sentido de panacea para todas las actividades eco n¨®micas que le quieren dar algu nos futur¨®logos. El progreso resul tante de la informatizaci¨®n no ser¨¢ -por lo menos a corto plazosuficiente para llevar a la Humani dad a nuevas dimensiones de bienestar econ¨®mico". De todos modos, hay que desterrar tambi¨¦n la "noci¨®n equivocada de que el pro greso t¨¦cnico es un factor generador de paro". Como fundamento de esta afirmaci¨®n alude al ejem plo de Jap¨®n, pa¨ªs densamente poblado donde ha habido un progreso t¨¦cnico impresionante y donde al mismo tiempo el paro dista mucho de alcanzar las proporciones que tiene en Europa Occidental.

El cambio demogr¨¢fico

"Durante, los a?os que faltan para terminar este siglo, y aun m¨¢s en los primeros a?os del siglo XXI, la demografia condicionar¨¢ en gran medida la econom¨ªa y la geopol¨ªt¨ªca mundiales", afirma Sauvy."La poblaci¨®n es un elemento din¨¢mico mucho m¨¢s potente que la econom¨ªa, y los grandes cambios que est¨¢n comenzando a cristalizar impondr¨¢n tambi¨¦n una nueva realidad geropol¨ªtica". Al formular estas hip¨®tesis de futuro, Sauvy puntualiza que "la ciencia demogr¨¢fica debe plantearse a muy largo plazo; el dem¨®grafo no cuenta en meses ni en a?os, sino m¨¢s bien en generaciones".Este cambio demogr¨¢fico mundial para las pr¨®ximas d¨¦cadas vendr¨¢ dado por dos procesos de gran relevancia: la multiplicaci¨®n de los "centros mundiales" y los grandes movimientos de poblaci¨®n de un continente a otro. El dem¨®grafo franc¨¦s piensa que estos procesos ser¨¢n paulatinos, y no tienen por qu¨¦ ser necesariamente violentos. "Ahora mismo ya estamos asistiendo a la creciente importancia demogr¨¢fica y estrat¨¦gica de regiones como Asia del Sur, Centroam¨¦rica y Extremo Oriente. Durante decenios, el epicentro de la econom¨ªa mundial y del poder geopol¨ªtico ha sido la cuenca atl¨¢ntica, pero es muy previsible que en el futuro cobre gran importancia la cuenca pac¨ªfica", no s¨®lo en Norteam¨¦r¨ªca y Jap¨®n, sino tambi¨¦n en la costa pac¨ªfica de Am¨¦rica del Sur y en Australia.

Alfred Sauvy prev¨¦ que los crecientes desequilibrios demogr¨¢ficos que padecen varias zonas del mundo producir¨¢n movimientos migratorios que pueden durar d¨¦cadas y que en algunos casos ya han comenzado. "Por ejemplo, en Africa Occidental ya han comenzado procesos de reasentamiento demogr¨¢fico propiciados por las sequ¨ªas y las secuelas de la crisis econ¨®mica mundial. La ra¨ªz de estos procesos hay que buscarla en los fuertes desequilibrios de poblaci¨®n acumulados en los ¨²ltimos tiempos.

"Africa Negra es en este aspecto un continente preocupante", concluye este intelectual que asume un cierto papel de conciencia cr¨ªtica y creativa de la izquierda francesa. Y ello, porque adem¨¢s del intenso crecimiento demogr¨¢fico existen otros factores que frenan el desarrollo: una agricultura mediocre, niveles de industrializaci¨®n muy escasos y la existencia de burocracias estatales completamente ineficaces. Todo esto frena el desarrollo y puede dar lugar a hambres y otras cat¨¢strofes demogr¨¢ficas. Hist¨®ricamente, la salida a estas crisis de poblaci¨®n han sido las grandes migraciones.

Envejecimiento y guerra

El envejecimiento global de la poblaci¨®n, "y muy especialmente de la de los pa¨ªses ricos, es el fen¨®meno m¨¢s importante del mundo actual desde el punto de vista de la demograf¨ªa". Alfred Sauvy constata que las poblaciones de los pa¨ªses ricos envejecen mientras los pa¨ªses del Tercer y el Cuarto Mundo tienen poblaciones cada vez m¨¢s numerosas y comparativamente m¨¢s j¨®venes. "En Europa Occidental, el envejecimiento de la poblaci¨®n ya existe y se acentuar¨¢", lo que le preocupa porque este fen¨®meno ha sido hist¨®ricamente un factor de decadencia pol¨ªtica y econ¨®mica.Sauvy est¨¢ convencido de que el rejuvenecimiento de la poblaci¨®n es un imperativo para la supervivencia de Europa Occidental. Occidente es hoy en d¨ªa un enfermo que sabe contar perfectamente sus males, pero que no sabe solucionarlos". Las posibilidades esperanzadoras para el futuro -para el a?o 2000, cuando la Tierra estar¨¢ poblada por m¨¢s de 6.000 millones de seres humanos- se cifran en un cambio de pol¨ªtica demogr¨¢fica por parte de las naciones industrializadas, la aceptaci¨®n pac¨ªfica de grandes procesos migratorios, el aumento global de la producci¨®n alimentaria y los esfuerzos de todos los gobiernos por imponer la familia con dos hijos como modelo universal. Hay que llevar las personas donde est¨¢n los recursos econ¨®micos, y no al rev¨¦s".

En cuanto a la posibilidad de una guerra, de un holocausto nuclear que liquide de forma tr¨¢gica y definitiva los problemas demogr¨¢ficos del mundo, Alfred Sauvy parece descartarlo con un optimismo que -como la demografia- no se mide en meses ni en a?os, sino en generaciones: "Lo ¨²nico que podr¨ªa desencadenar una guerra exterminadora es el miedo mutuo que se tienen las actuales superpotencias".