Rumasa contabilizaba al a?o 1.000 millones de pesetas en concepto de donativos de dif¨ªcil comprobaci¨®n
Unos 1.000 millones de pesetas anuales aparecen en la contabilidad real de Rumasa como donativos entregados mediante talones al portador, adem¨¢s de los pagos correspondientes a los 1.500 millones de pesetas en letras de cambio proporcionadas sin aparente deuda a personalidades del Opus Dei, a trav¨¦s del Instituto de Educaci¨®n e Investigaci¨®n, seg¨²n fuentes administrativas. Las ¨²ltimas investigaciones apuntan a que dicha partida global, cuyos destinatarios son de dif¨ªcil comprobaci¨®n, se situ¨® en 1982 cerca de los 1.200 millones de pesetas. Por otra parte, hoy se anunciar¨¢ la aceptaci¨®n de toda o parte de la querella del Ministerio Fiscal contra Ruiz-Mateos y otros eventuales implicados.
De acuerdo con la misma versi¨®n, que no ha podido ser con trastada con los anteriores administradores del grupo de Ruiz Mateos, la mencionada partida comprende una larga serie de talones al. portador, extendidos sin concepto de contapartida ni identificaci¨®n de destinatario.Seg¨²n una de las muy pocas personas informadas sobre el asunto, en la cuenta de donaciones por tal¨®n "no est¨¢n todas las que son ni son todas las que est¨¢n". Otro alto cargo que ha examinado la contabilidad de 1982 coincidi¨® en la misma impresi¨®n, al indicar que existen indicios sobre la posibilidad de que en la misma cuenta de donativos hayan sido inclu¨ªdos pagos de minutas o incluso gastos personales autorizados o realizados por Jos¨¦ Mar¨ªa Ruiz-Mateos.
La indicada cuenta, a juzgar por la informaci¨®n de las fuentes administrativas consultadas, es independiente de otros peque?os donativos nominales, as¨ª como de la entrega de letras de cambio por valor de 1.500 millones de pesetas a personalidades del Opus Dei, entre ellas el ex ministro franquista Gregorio L¨®pez Bravo, en calidad de promotores del Instituto de Educaci¨®n e Investigaci¨®n, SA, hasta ahora sin actividad conocida (v¨¦ase EL PAIS del s¨¢bado 9 y domingo 10 de abril). En virtud de esta operaci¨®n, el Instituto hab¨ªa recibido ya 870 millones, 600 por el vencimiento de los dos primeros efectos y el resto por intereses varios de su dep¨®sito (270 millones), que era la cantidad dispuesta hace varias semanas, cuando L¨®pez Bravo intent¨® sin ¨¦xito retirar otros 100 millones.
Fraude e irregularidades
Adem¨¢s de realizarse mediante efectos en lugar de con talones, la primera operaci¨®n descubierta - publicada por este peri¨®dico antes de que se atribuyera el hallazgo de comprobantes a la entrada de la Polic¨ªa en los archivos de Rumasa - tuvo una naturaleza distinta. El origen de las letras, la Constructora Hispano , Alemana, no deb¨ªa nada que se sepa as¨ª pagado a Rumasa ni al endosante, el propio Ruiz-Mateos. Respondi¨®, seg¨²n dijo despu¨¦s el citado ex ministro, a una operaci¨®n de colecta de "pr¨¦stamos de cuant¨ªa importante" para el Instituto (en ¨²ltimo extremo, sus futuros estudiantes e invest¨ªgadores), realizada entre "varias personalidades del mundo financiero".Precisamente por la carencia de deuda previa ( Rumasa ostenta s¨®lo un 40% de la propiedad directa en Hispano Alemana), medios jur¨ªdicos consultados entonces dijeron que la donaci¨®n al Instituto, como figuraba en los apuntes contables del grupo, puede fundamentar presuntos delitos de estafa.
No ocurre lo mismo con las donaciones directas de Rumasa ahora descubiertas y de destino todav¨ªa indeterminado. Mientras en algunas empresas expropiadas Rumasa o los hermanos Ruiz-Mateos no ten¨ªan toda la propiedad (al parecer, entre participaciones directas e indirectas s6lo quedaban fuera del 100% una treintena), el holding era propiedad de Jos¨¦ Mar¨ªa Ruiz-Mateos en un 50%, y el resto pertenec¨ªa a sus cinco hermanos, quienes es obvio que han de estar de acuerdo con ¨¦l en su destino. Sin embargo, las normas fiscales y contables vigentes, que consideran deducibles las donaciones de la base del impuesto sobre beneficios, obligan a justificar su objeto y excluyen desde las liberalidades a las remuneraciones al capital propio (Rumasa dec¨ªa reinvertir siempre sus beneficios), las que cubran servicios, e incluso los donativos de promoci¨®n a sociedades vinculadas.
Como concepto jur¨ªdico general, aplicable tanto a la nueva cuenta como a otras presuntas irregularidades detectadas en el grupo, medios jur¨ªdicos han recordado que el fraude o la estafa siempre implican la existencia de enga?o y perjuicio. La irregularidad, en cambio, no tiene por qu¨¦ suponer nunca una falsedad de la realidad, sino un plasmarla de forma distinta a las normas habituales, legales o de comercio.
Presiones
El Juzgado, dispuesto a dar toda clase de garant¨ªas a Ruiz-Mateos
Admitida la querella, el gran paso ser¨ªa la decisi¨®n del juez sobre si procesa o no a Jos¨¦ Mar¨ªa Ruiz-Mateos y dem¨¢s posibles implicados. Sobre esto, las respuestas fueron m¨¢s ambiguas e inconcretas. "Es imprescindible tener tiempo suficiente para estudiar el caso, cuyo propio volumen impide hablar de plazos, cantidades, medios materiales y personas. Por eso es imposible hablar de semanas, meses o a?os. Los grandes procesos requieren muchas actuaciones y pr¨¢ctica de pruebas. Y, en principio, ¨¦ste es un asunto m¨¢s complejo, pero no diferente en su naturaleza a los otros confiados a este juzgado. El juez, que tom¨® posesi¨®n aqu¨ª el mismo jueves en que se present¨® la querella, tiene la mesa llena de papeles. Y tendr¨¢ que ver toda la documentaci¨®n que considere con trascendencia jur¨ªdico-penal antes de pronunciarse sobre el procesamiento y sus condiciones".La ¨²Itima pregunta admitida. por las fuentes vers¨® sobre la existencia o no de presiones directas o indirectas en un caso que envuelve tantos intereses. "Rotundamente no", contestaron. "Ni nadie ha presionado ni se admitir¨ªa que lo hiciera. En el momento que recibiera alguna presi¨®n, el juez no la tolerar¨ªa, e incluso no se descarta que en tan absurda hip¨®tesis reaccionara tambi¨¦n jur¨ªdicamente en contra de quienes lo intentaran. Ni ha habido presiones -se insiste- se espera que las habr¨¢, y, por lo mismo, rechazamos cualquier sospecha de que los tribunales no est¨¦n dispuestos en su investigaci¨®n y posibilidades de llegar al fondo de la cuesti¨®n en lo que es su competencia exclusiva".
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