Los cinco cancilleres centroamericanos se re¨²nen ma?ana para buscar soluciones a sus conflictos

El esquema de negociaciones en Centroam¨¦rica propuesto por el Grupo de Contadora tendr¨¢ ma?ana en Panam¨¢ su primera prueba de fuego. Por primera vez desde que los sandinistas subieron al poder, los cinco cancilleres de la regi¨®n (Costa Rica, Nicaragua Honduras, El Salvador y Guatemala) tratar¨¢n de resolver sus conflictos en una mesa de negociaciones, asistidos por sus colegas de M¨¦xico, Colombia, Venezuela y Panam¨¢ en calidad de testigos.

Lo que parec¨ªa imposible hace tan s¨®lo dos semanas se ha materializado, en buena medida, por la decisi¨®n del presidente colombiano, Belisario Betancur, que ante el peligro de una guerra regional, presagiada por la entrada en Nicaragua de grandes contingentes de antisandinistas armados y entrenados en Honduras, decidi¨®, en una arriesgada operaci¨®n personal, desbloquear la iniciativa de Contadora.El viaje posterior que los cancilleres realizaron a los cinco pa¨ªses centroamericanos ha servido al menos para materializar esta primera conferencia regional de' ministros de Exteriores. En Bogot¨¢ se da como segura la asistencia de los cinco, salvo un imprevisible cambio de ¨²ltima hora. Nadie quiere aparecer como culpable de que fracase la conferencia, y esto contribuir¨¢ a que acudan. al menos al llamamiento del grupo de Contadora.

Aproximar a los enfrentados

La impresi¨®n obtenida en medios diplom¨¢ticos de la regi¨®n es que en el curso de los ¨²ltimos d¨ªas se han llevado a cabo m¨²ltiples gestiones telef¨®nicas para aproximar incluso las posiciones de los pa¨ªses que estaban m¨¢s enfrentados.En este sentido, parece que Honduras y Nicaragua habr¨ªan aceptado un patrullaje conjunto de su frontera. La diferencia radica ahora en que los hondure?os quieren ampliar la vigilancia con aviones y barcos, a lo que contestan los sandinistas que ellos, por su parte, carecen de aviaci¨®n.

Por parte de Nicaragua y Costa Rica ya ha habido negociaciones bilaterales para resolver el conflicto planteado en el r¨ªo San Juan, aunque todav¨ªa no se hayan materializado en ning¨²n convenio firme.

Una cuesti¨®n espinosa es la guerra civil salvadore?a. En primer lugar, se trata de un conflicto interno que tiene dif¨ªcil cabida en una reuni¨®n de car¨¢cter multilateral. En segundo lugar, es evidente que la guerrilla salvadore?a no va a estar presente en las negociaciones.

Los cuatro de Contadora opinan que tal vez pueda originarse al, margen de la reuni¨®n alg¨²n contacto, aunque sea indirecto, entre el Gobierno salvadore?o y las fuerzas pol¨ªticas de oposici¨®n que se agrupan bajo las siglas FDR (Frente Democr¨¢tico Revolucionario).

Signos de flexibilidad

Dos cosas parecen estar claras de cara a la conferencia: que va a ser una negociaci¨®n gradual, probablemente larga, y que el car¨¢cter multilateral del encuentro se alternar¨¢ con reuniones del di¨¢logo. No se puede esperar, por tanto, que en esta primera reuni¨®n surjan acuerdos definitivos. Ser¨¢ preciso continuar los contactos.El grupo de Contadora considera de enorme importancia la actitud que pueda adoptar Estados Unidos. En los ¨²ltimos d¨ªas parecen advertirse algunos signos de flexibilidad por parte norteamericana, pero nadie se atreve a predecir cu¨¢l va a ser su posici¨®n final. A estos efectos, el viaje del secretario. de Estado norteamericano, George Shultz, a M¨¦xico puede clarificar el futuro de esta negociaci¨®n centroamericana.

Si el di¨¢logo registra avances es indudable que tarde o temprano habr¨¢ que establecer alguna relaci¨®n directa con la Administraci¨®n del presidente norteamericano, Ronald Reagan, y eventualmente con el Gobierno cubano, seg¨²n opini¨®n generalizada entre los propios cancilleres de Contadora.

Lo importante en esta v¨ªspera es que la din¨¢mica del conflicto que prevalec¨ªa en Centroam¨¦rica hasta hace s¨®lo unos d¨ªas parece haber cedido en favor de una din¨¢mica de di¨¢logo. Muchos creen que, aunque no haya grandes acuerdos, ser¨¢ ya dif¨ªcil que las cosas regresen al punto anterior.