Sobre H¨¦ctor Sayago

Habiendo le¨ªdo la informaci¨®n relacionada con el periodista H¨¦ctor Sayago, me dirijo a usted para ratificar totalmente lo manifestado por Andr¨¦s Castillo sobre este sujeto. Al igual que el exiliado argentino Andr¨¦s Castillo, permanec¨ª secuestrada en el campo de concentraci¨®n clandestino que la Marina argentina instal¨® en la Escuela de Mec¨¢nica de la Armada (ESMA), en Buenos Aires, donde miles de argentinos sufrieron terrribles tormentos, y cuyo destino se desconoce. Mi detenci¨®n-desaparici¨®n dur¨® desde octubre de 1977 hasta mediados de 1979. En este per¨ªodo tuve conocimiento de las visitas guiadas que realiz¨® H¨¦ctor Sayago -alias Bebito- al campo de concentraci¨®n, acompa?ado del segundo jefe del campo, el feroz torturador capit¨¢n de corbeta Jorge Eduardo Acosta. Igualmente, por comentarios vertidos por los mismos oficiales represores, tom¨¦ conocimiento de que Sayago ayud¨® y asesor¨® al teniente de nav¨ªo Antonio Pern¨ªas -de cuya actividad como torturador llevo las marcas en mi cuerpo- en la publicaci¨®n del libro Argentina y Europa, un mismo terrorismo, hecha en Espa?a. Como as¨ª tambi¨¦n prest¨® colaboraci¨®n en las actividades clandestinas que desarroll¨® el Centro Piloto Par¨ªs, en la capital de Francia, en el cual tuvieron destacada actuaci¨®n el citado Pern¨ªas y el torturador capit¨¢n Perren.Asimismo, quiero denunciar la injusta privaci¨®n de libertad de la que fue objeto Castillo, compatriota y compa?ero m¨ªo de cautiverio, retenido durante m¨¢s de cuatro horas en RTVE sin motivo, s¨®lo con el objeto de dar tiempo al colaborador y confidente de la Marina, Sayago, a que lo demandara por injurias. Fue luego detenido hasta el d¨ªa siguiente, a ra¨ªz de esta demanda, cuando es bien sabido que la querella por injurias no trae como consecuencia inmediata la detenci¨®n del demandado./