Antonio recurrir¨¢ contra su despido y niega haber cometido indisciplina
El bailar¨ªn y core¨®grafo Antonio Ruiz, conocido art¨ªsticamente como Antonio, destituido el pasado d¨ªa 9 como director art¨ªstico del Ballet Espa?ol, presentar¨¢ un recurso ante la Magistratura de Trabajo por no estar de acuerdo con las faltas de disciplina que se le atribuyen en la notificaci¨®n del despido enviada por el director general de M¨²sica y Teatro, Jos¨¦ Manuel Garrido, seg¨²n inform¨® ayer el bailar¨ªn en una conferencia de Prensa celebrada en su estudio, despu¨¦s de cinco d¨ªas de silencio, tiempo utilizado para estudiar con su abogado la versi¨®n que dar¨ªan a los medios de comunicaci¨®n.
Antonio reconoci¨® como cierto el hecho de que hubiera roto en dos ocasiones las tablillas firmadas por Mar¨ªa de ?vila, directora del Ballet Nacional, en las que se especificaba el trabajo del d¨ªa, "porque yo soy el director art¨ªstico y nadie mejor que yo sabe cu¨¢l es el trabajo que la compa?¨ªa necesita realizar. Est¨¢bamos ensayando coreograf¨ªas ampliamente conocidas por la compa?¨ªa y, desde luego, por m¨ª, como es El sombrero de tres picos o Fantas¨ªa galaica. Son obras que hemos representado en numeros¨ªsima ocasiones y es absurdo que alguien venga a decir c¨®mo tenemos que organizar el trabajo".Respecto a que ese alguien fuera la directora general del Ballet Nacional, Antonio respondi¨® que en ning¨²n momento ¨¦l tuvo una comunicaci¨®n oficial y escrita sobre la llegada y competencias de Mar¨ªa de ?vila ("mientras que s¨ª se han apresurado a formalizar el tema del despido" coment¨® ir¨®nicamente).
En un tono entre ir¨®nico, dolido y despectivo, Antonio narr¨® las primeras injerencias de Mar¨ªa de Avila en su trabajo ("sorprendente porque ella sabe muy poco de Espa?ol, aunque s¨ª conoce algo m¨¢s el Cl¨¢sico"). "Cuando me enter¨¦ de su nombramiento, a trav¨¦s de los peri¨®dicos, me apresur¨¦ a felicitarle. Prefer¨ª esperar a ver que pasaba, hasta la extinci¨®n de mi contrato el 31 de julio, en lugar de marcharme como hizo inmediatamente V¨ªctor Ullate. Puede que ¨¦l tuviera raz¨®n".
"Al principio, las relaciones con Mar¨ªa de ?vila eran cordiales. Ella sabe muy poquito de danza espa?ola y se limitaba m¨¢s al ballet cl¨¢sico. Yo segu¨ªa siendo el director art¨ªstico del ballet espa?ol y ella, que desconoc¨ªa incluso el repertorio, ven¨ªa por los ensayos y tomaba apuntes en los que no s¨¦ qu¨¦ escribir¨ªa".
"A partir del despido de catorce bailarines de la compa?¨ªa", prosigue Antonio, "decisi¨®n ante la que yo no pude hacer nada. A m¨ª no me consult¨® nada y, por tratarse de la compa?¨ªa que yo dirig¨ªa, creo que algo podr¨ªa haberme dicho. Pero ella tiene el poder y yo ten¨ªa que acatar ese tipo de decisiones". Sin embargo, el nivel de intromisiones inadmisibles, se produjo cuando, siempre seg¨²n Antonio, Mar¨ªa lleg¨® en dos ocasiones con ¨®rdenes de ensayos. "Era intolerable porque yo era el director. Y considero que no ha habido falta de disciplina porque ella no puede anular las ¨®rdenes del director art¨ªstico".
Sobre este ¨²ltimo argumento, el abogado Ram¨®n Ari?o basar¨¢ su reclamaci¨®n ante los tribunales. "No les importa tener que pagar una indemnizaci¨®n por cara que sea, porque no juegan con dinero de ellos, sino con todo el de los espa?oles".
Antonio asegura estar convencido de que se le dar¨¢ la raz¨®n y a?ade que ¨¦l nunca hubiera dimitido del ballet ni piensa ir a trabajar fuera de Espa?a. "Soy un artista cuyo trabajo es sobradamente conocido en todo el mundo. Tengo ofertas para hacer coreograf¨ªas en Estados Unidos, pa¨ªs en el que van a hacer una serie televisiva de catorce cap¨ªtulos en los que van a contar mi vida. Yo intervendr¨¦ en los cuatro ¨²ltimos episodios".
Antonio Ruiz se lamenta de las relaciones que con ¨¦l han mantenido los responsables del Ministerio de Cultura y, concretamente la direcci¨®n general de M¨²sica y Teatro. "Me entrevist¨¦ por primera vez con Garrido hace poco m¨¢s de una semana. Vi que, como a todos ellos lleva barba y gafas, habr¨ªa que aconsejarle una m¨¢quina de afeitar y unas lentillas", brome¨®, "y lo ¨²nico que se le ocurri¨® decirme fue que en el nuevo estatuto del organismo aut¨®nomo desaparec¨ªa la figura del director art¨ªstico y que solamente habr¨ªa dos subdirecciones".
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