Felipe Gonz¨¢lez pidi¨® el apoyo de Washington a la democracia espa?ola
El presidente del Gobierno, Felipe Gonz¨¢lez, en sus primeras declaraciones desde que se encuentra en visita oficial en Estados Unidos, ha pedido de forma clara el apoyo del Gobierno de Washington a la democracia espa?ola -no s¨®lo con palabras, sino tambi¨¦n con resultados econ¨®micos-. Y de un modo no menos claro, aunque acaso m¨¢s perifr¨¢stico, la necesidad de una gesti¨®n decidida de la Administraci¨®n Reagan ante sus aliados europeos para lograr la integraci¨®n de nuestro pa¨ªs en el Mercado Com¨²n y la resoluci¨®n de la cuesti¨®n colonial de Gibraltar, para allanar ante la opini¨®n p¨²blica espa?ola el camino de la plena integraci¨®n en la OTAN, tan deseada por el Gohierno de Washington.
En declaraciones a la cadena p¨²blica de televisi¨®n PBS (Public Broadcasting System), el presidente del Gobierno afirm¨® que si dentro de un a?o y medio o dos a?os se pregunta a los espa?oles qu¨¦ participaci¨®n desean en la defensa occidental, su respuesta ser¨¢ distinta si Espa?a pertenece a la CEE y si ha recuperado su soberan¨ªa e integridad territorial. "Nadie va a comprender", dijo refiri¨¦ndose a Gibraltar, "que un almirante espa?ol est¨¦ bajo el mando de un almirante ingl¨¦s en territorio espa?ol. Eso no suceder¨¢ mientras yo sea presidente del Gobierno".Felipe Gonz¨¢lez neg¨® que en este momento su Gobierno tenga como estrategia presionar con la permanencia o no de Espa?a en la OTAN para lograr el ingreso en la CEE, pero lament¨® que esa no hubiera sido la estrategia de Gobiernos anteriores.
Posteriormente, en una entrevista con TVE, Felipe Gonz¨¢lez dijo que preve¨ªa que "en el plazo de un a?o y medio, aproximadamente, o un a?o y ocho o diez meses, podr¨ªa estar en condiciones de celebrar esa consulta (refer¨¦ndum sobre la OTAN) con un debate previo informativo".
El presidente Gonz¨¢lez dedic¨® parte de su intervenci¨®n a intentar convencer de que la solidaridad de su Gobierno con Occidente est¨¢ fuera de toda duda, y puso por ejemplo la permanencia espa?ola en la OTAN, cuando la decisi¨®n pod¨ªa haber sido otra.
Felipe Gonz¨¢lez, en un intento de buscar margen de maniobra para su Gobierno, apuntal¨® la idea del compromiso occidental de Espa?a con la afirmaci¨®n, a la que es muy poco receptiva la Administraci¨®n Reagan, de que en caso de una hipot¨¦tica retirada de la OTAN, la contribuci¨®n espa?ola a la defensa del mundo occidental est¨¢, en cualquier caso, por los acuerdos de amistad, cooperaci¨®n y defensa, t¨¦rmino este que aparece por primera vez en el anunciado de los protocolos hispano-norteamericanos, que fueron firmados el pasado a?o y ratificados en mayo por el Gobierno socialista.
La situaci¨®n centroamericana y la iniciativa de paz del grupo de Contadora fue ampliamente abordada en el di¨¢logo televisado, hasta el punto de que el presidente Gonz¨¢lez pidi¨® a sus dos entrevistadores que se interesaran por otros asuntos, si no, iba a parecer que, ¨¦se es el ¨²nico motivo de su viaje. De nuevo habl¨¦ Felipe Gonz¨¢lez de la necesidad de que Estados Unidos revise su liderazgo, ech¨® en falta un proyecto americano para el a?o 2000 en relaci¨®n con Centroam¨¦rica, se pronunci¨® por la no participaci¨®n militar de pa¨ªses externos a la zona y sugiri¨® la conveniencia de que EE UU apoye las iniciativas de paz, que en este momento se reducen a la del grupo de Contadora.
En las relaciones bilaterales, Gonz¨¢lez se expres¨® con dureza respecto a la actitud norteamericana. Cuando no ¨¦ramos dem¨®cratas, vino a decir, las dificultades para nuestras exportaciones eran menores. "Ser¨¢ este el precio que hay que pagar por la democracia", se pregunt¨®. "Parece", dijo, "que a Estados Unidos le resultaba mejor negociar con Franco".
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