La supervivencia de la Comunidad est¨¢ ligada a la adhesi¨®n de Espa?a, seg¨²n Manuel Mar¨ªn
El secretario de Estado para las Relaciones con la CEE, Manuel Mar¨ªn, no se ha desanimado por el resultado de la ansiada cumbre europea de Stuttgart, que, en contra de las previsiones divulgadas por el Gobierno espa?ol, no ha aportado una fecha concreta para la conclusi¨®n de las negociaciones de adhesi¨®n hispano-comunitarias. Mar¨ªn cree que la importancia de Stuttgart est¨¢ en haber ligado la propia supervivencia de la CEE con las negociaciones para la entrada de Espa?a y Portugal y se niega rotundamente a catalogar en t¨¦rminos de buenos y malos a los 10 protagonistas de este serial por cap¨ªtulos que son las negociaciones para entrada de Espa?a en la CEE.
Con la sesi¨®n negociadora celebrada esta semana en Luxemburgo, Espa?a se ha despedido pr¨¢cticamente del per¨ªodo semestral de presidencia alemana occidental de la Comunidad, en el que estaban puestas grandes esperanzas. Muchos de los temas de negociaci¨®n, compartimentados en una estructura de 17 cap¨ªtulos, que medios diplom¨¢ticos consideran parcialmente superada, han ido cerr¨¢ndose paulatinamente. Sin embargo, Espa?a llega a la presidencia griega, que comienza el pr¨®ximo 1 de julio, con los temas m¨¢s conflictivos -la pesca, la agricultura y la siderurgia- en cartera.Con todo, Mar¨ªn cree que "el tiempo comienza a jugar a nuestro favor, ya que despu¨¦s de Stuttgart la negociaci¨®n de adhesi¨®n de Espa?a y Portugal est¨¢ ligada a la propia supervivencia de la CEE". La conexi¨®n, recogida impl¨ªcitamente en el documento final de la cumbre, pasa por el tema de los recursos propios de la Comunidad.
El dilema actual de la CEE se centra en incrementar o no incrementar sus recursos financieros y en c¨®mo hacerlo. Ocho de los 10 Estados miembros han abogado ya por el incremento. La Rep¨²blica Federal de Alemania, reticente, ha acabado por aceptarlo. El Reino Unido es, por ahora, el ¨²nico pa¨ªs que no se ha comprometido, porque los brit¨¢nicos, que consiguieron escamotear toda menci¨®n al incremento de los recursos en el documento final de Stuttgart, consideran posible congelarlo, controlando los gastos agr¨ªcolas.
En medios de la Secretar¨ªa de Estado para las Relaciones con la CEE se opina que el aumento de los recursos comunitarios resulta inevitable porque, por primera vez en su historia, la CEE tiene n¨²meros rojos. Dado que, seg¨²n el documento de Stutgart, los respectivos parlamentos nacionales deben ratificar simult¨¢neamente el incremento de recursos, si llegan a ¨¦l, y la adhesi¨®n de Espa?a y Portugal, las previsiones resultan optimistas, aunque no tengan fecha.
Para Manuel Mar¨ªn, "lo fundamental en Stuttgart era establecer un procedimiento, lo que se ha producido. Lo menos importante era la fecha. Desgraciadamente, se crearon expectativas en la opini¨®n p¨²blica espa?ola de forma precipitada. He sido siempre partidario de no fijar nunca de antemano fechas en este tipo de negociaciones, ya que la experiencia demuestra que la mayor¨ªa de las veces no se cumplen. Soy firme partidario de negociar por objetivos y no por fechas, y para ese tipo de negociaci¨®n el procedimiento es clave".
"La relaci¨®n entre la adhesi¨®n y la reforma financiera nos gustar¨¢ m¨¢s o menos a los espa?oles", dice Mar¨ªn, "pero la CEE ha sido clara en Stuttgart: habr¨¢ adhesi¨®n si hay acuerdo en el tema de los recursos propios, es decir, si la CEE encuentra m¨¢s dinero para llevar a cabo sus pol¨ªticas comunitaria". Si para la cumbre de Atenas, el pr¨®ximo 6 de diciembre, no ha habido una decisi¨®n sobre el aumento, el tema ya ser¨¢ m¨¢s preocupante, admite Mar¨ªn, quien se niega a hacer futurismo en ese sentido.
'Buenos' y 'malos'
El secretario de Estado cree que el riesgo m¨¢s peligroso para Espa?a en Stuttgart era que los diez hubieran unido en un solo bloque de discusi¨®n interna los cuatro problemas claves de la Comunidad -financiaci¨®n, pol¨ªtica agr¨ªcola com¨²n en relaci¨®n a los productos mediterr¨¢neos, la contribuci¨®n brit¨¢nica o cheque Thathcher y la reforma institucional-, dejando para despu¨¦s a Espa?a y Portugal. La conjura de ese peligro es valorada muy positivamente en La Trinidad, la mansi¨®n madrile?a que alberga el cuartel general de la Secretar¨ªa de Estado para las Relaciones con la CEE.
Mar¨ªn no quiere entrar en el juego de buenos y malos frente a la adhesi¨®n de Espa?a. Prefiere hacer hincapi¨¦ en el concepto de negociaci¨®n como tema clave, entendido como una pugna "donde cada contrincante trata de imponer su postura en funci¨®n de sus intereses nacionale". Claro que en torno a las negociaciones de adhesi¨®n cristalizan m¨²ltiples intereses en varios frentes.
"La responsabilidad de los pa¨ªses de la CEE de cara a la adhesi¨®n de Espa?a es compartida. Francia ha sido el principal obst¨¢culo, pero detr¨¢s de ella se han escondido otros pa¨ªses que presentan sus propios inconvenientes", se?ala Mar¨ªn. Par¨ªs, que se opuso a que el comunicado de Stuttgart, diera una fecha para el fin de las negociaciones, quiere valerse de la adhesi¨®n de Espa?a para reequilibrar la pol¨ªtica agr¨ªcola com¨²n en su propio inter¨¦s, seg¨²n dijo el ministro de Asuntos Exteriores espa?ol, Fernando Mor¨¢n. Una mayor protecci¨®n, tal como desea Francia, para los productos mediterr¨¢neos, discriminados respecto a los de agricultura atl¨¢ntica, ser¨ªa beneficiosa para Espa?a una vez dentro de la CEE.
De momento, Mar¨ªn se?ala que el d¨ªa en que el Gobierno franc¨¦s entienda el significado ¨²ltimo de la incorporaci¨®n de Espa?a se dar¨¢ cuenta de los formidables errores que ha cometido en su planteamiento. En mi opini¨®n, el Gobierno franc¨¦s est¨¢ careciendo de perspectiva hist¨®rica y pierde energ¨ªa orient¨¢ndose hacia problemas menores, de los cuales tampoco va a sacar ninguna rentabilidad pol¨ªtica en la escena nacional francesa. Giscarg se opuso a la adhesi¨®n de Espa?a y perdi¨® las elecciones. En las ¨²ltimas elecciones municipales, los socialistas franceses han perdido tambi¨¦n las principales alcald¨ªas del sur de Francia. Se equivocan, pues, en Par¨ªs si creen que sus resistencias a la entrada de Espa?a en la CEE son una operaci¨®n pol¨ªtica que va a rentabilizarse en las pr¨®ximas elecciones".
"El proceso de adhesi¨®n se encuentra en un punto delicado y dif¨ªcil de explicar teniendo en cuenta las complejidades t¨¦cnicas de la negociaci¨®n", se?ala Mar¨ªn, para quien uno de los peligros mayores en lo que va de a?o es que hubiera continuado el silencio de la CEE sobre aspectos esenciales de la negociaci¨®n. De haber continuado la actitud de la CEE durante los ¨²ltimos dos a?os, las negociaciones estar¨ªan ahora paralizada".
Agricultura y pesca
En dos de los grandes temas pendientes, la CEE tiene ya un documento: pesca y agricultura. "La CEE tratar¨¢ de rebajar la capacidad espa?ola en estos dos cap¨ªtulos, donde Espa?a es competidora, contrariamente a lo que ocurre con la industria, donde la CEE trata de aprovecharse de sus ventajas", subraya Mar¨ªn, quien se manifiesta dispuesto a entablar una negociaci¨®n "todo lo dura, prolija y desagradable que sea necesario con objeto de mejorar para Espa?a el punto de partida inicial de la CEE".
El documento agr¨ªcola comunitario estar¨¢ a punto para ser entregado al Consejo de Ministros la semana pr¨®xima, lo que abrira la puerta al inicio de las negociaciones con Espa?a, que parten de posturas muy enfrentadas. El texto inicial ha sufrido pocas modificaciones en el proceso de tr¨¢mite, aunque fuentes bien informadas se?alan que el porcentaje de la producci¨®n agr¨ªcola que se pretende aislar parece ser menor que en un principio. Entre los planes de la parte espa?ola no est¨¢ aceptar unper¨ªodo de integraci¨®n corto para productos como leche y mantequilla, m¨¢s corripetitivos en la CEIE, y un per¨ªodo de integraci¨®n largo para las frutas y las verduras.
El documento agr¨ªcola comunitario, opinan fuentes diplom¨¢ticas, integra, en beneficio de los otros productores agr¨ªcolas mediterr¨¢neos de la Comunidad, las quejas formuladas durante a?os por los agricultores espa?oles, concedi¨¦n doles un peri¨®do transitorio para que se adapten.
Por otra parte, el documento pesquero de la CEE fija una posici¨®n filos¨®fica con respecto a Espa?a, cuyo objeto es, seg¨²n fuentes de La Trinidad, "quebrantar al m¨¢ximo la potencialidad pesquera espa?ola". El documento entregado a Espa?a se?ala que la adhesi¨®n modifica sustancialmente el panorama pesquero de la Comunidad y, en nombre de la estabilidad del sector, se opone al desarrollo de nuevas pesquer¨ªas en aguas comunitarias y, a la reanudaci¨®n de actividades pesqueras ya desaparecidas. As¨ªmismo, condiciona la ayuda a la reestructuracion del sector pesquero espa?ol a la comprobaci¨®n de la compatibilidad de las ayudas espa?olas al mismo con el marco comunitario de pesca.
En el campo de la siderurgia, la entrada en vigor de la reconversi¨®n del sector en Espa?a abre la oportunidad de negociar sobre el tema a partir de julio. La reconversi¨®n sider¨²rgica, que contempla la reducci¨®n de capacidad y puestos de trabajo, no es "un sacrificio subordinado a la entrada de Espa?a a la CEE", se?ala Mar¨ªn. De momento, dice, la CEE no ha expresado, ni oficial ni extraoficialmente, su posici¨®n sobre la siderurgia espa?ola. Aunque la CEE incrementara sus, cuotas de importaci¨®n para el acero espa?ol, ¨¦stas no podr¨ªan llegar a cubrirse por la falta de demanda, Causa de que no se lleguen siquiera a alcanzar las cuotas de exportaci¨®n disponibles actualmente, se?alan medios t¨¦cnicos pr¨®ximos a La Trinidad.
Otro tema pendiente es la integraci¨®n de Espa?a en la Comisi¨®n Europea para la Energ¨ªa At¨®mica (Euratom), que alg¨²n pa¨ªs de la CEE (Holanda) vincula a la firma del Tratado de No Proliferaci¨®n (TNP) por Espa?a. Una comisi¨®n, en la que participa,n el Ministerio de Defensa, Exterior y la Secretar¨ªa de Estado para las Relaciones con la CEE, prepara un informe sobre el tema.
En la libre circulaci¨®n de los trabajadores -otro -de los asuntos pendientes-, se cree dificil que la CEE aplique a Espa?a un r¨¦gimen distinto del vigente para Grecia, que prev¨¦ un per¨ªodo transitorio de siete a?os para el acceso a los inercados de mano de obra comunitarios. En el tema de patentes, otro punto en litigio, la diferencia de procedimientos judiciales en las disputas entre inventor y plagiario y los mecanismos para proteger las patentes en vigor en Espa?a plantean problemas. Una parte de la industria, espa?ola se ha amparado en una legislaci¨®n muy generosa que le permit¨ªa. operar a partir de ligeras variantes, no sustanciales, de productos patentados internacionalmente.
Un calendario apretado
Manuel Mar¨ªn conf¨ªa en poder finalizar la negociaci¨®n pesquera con la CEE a mediados de oto?o para iniciar inmediatamente despu¨¦s la negociaci¨®n agr¨ªcola. El objetivo es presentar toda la negociaci¨®n abierta a comienzos de 1984, cuando Francia pase a la presidencia de la CEE. La reuni¨®n extraordinaria del Gabinete espa?ol dedicada a la CEE puede celebrarse, tal vez, antes de la pr¨®xima sesi¨®n negociadora hispano-comunitaria, que se realizar¨¢ el 15 de julio a nivel de suplentes.
La CEE de ahora no es ya la que convirti¨® a Europa en la primera potencia comercial del mundo, se?ala Mar¨ªn. Pese a todo, la entrada de Espa?a sigue pareciendo un objetivo necesario a la Administraci¨®n espa?ola.
"La ventaja fundamental de estar sentados en Bruselas", dice Mar¨ªn, "es contar con los mismos derechos que los dem¨¢s pa¨ªses comunitarios. El drarria actual espa?ol es que la interdependencia con la CEE es muy elevada y padecemos continuamente decisiones econ¨®micas que se -toman en Bruselas y en las que no participamos. Las medidas de la CEE, m¨¢s tarde o m¨¢s temprano, repercuten en el aparato productivo,espa?ol. Si Espa?a estuviera ya en la CEE, la pol¨ªtica agr¨ªcola y pesquera no ser¨ªan las mismas y la proyecci¨®n internacional ser¨ªa distinta, porque se incorporar¨ªan cap¨ªtulos como Africa, Latinoam¨¦rica y el Mediterr¨¢neo, que ahora solo son objeto de consideraci¨®n ret¨®rica en la CEE, cuya mentalidad es casi exclusivamente anglosajona y han, se¨¢tica".
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