La sequ¨ªa radicaliza las posturas entre las comunidades castellano-extreme?a y murciano-valenciana
La sequ¨ªa, que ya amenaza con sumir a nuestro pa¨ªs en una plaga continuada de siete a?os de aridez, ha hecho que el siempre controvertido tema del trasvase de agua de la cuenca del Tajo a la del Segura siga una escalada de enfrentamientos y violencias verbales y p¨²blicas que hasta ahora han quedado en presiones, discusiones y peticiones sobre las alfombras de los centros oficiales. Poco tiempo durar¨¢ el combate dentro del marco del cuadril¨¢tero marcado por las cuerdas de la Administraci¨®n. La chispa prender¨¢ en la reseca estopa de las comunidades aut¨®nomas implicadas, salvo que las rogativas implorando milagros acu¨ªferos y diluvios celestiales contradigan las previsiones de los sat¨¦lites Meteosat.
Tanta gravedad reviste el tema, adem¨¢s, si consideramos que no s¨®lo se est¨¢n enfrentando distintas comunidades aut¨®nomas por su motivo, sino que los propios miembros del PSOE -que rigen en dichas autonom¨ªas- mantienen opiniones total y radicalmente opuestas, hasta el punto de que a instancias de uno de los m¨¢s cualificados miembros del actual Gobierno se ha encargado un informe especial sobre la realidad de los trasvases en Espa?a, con el firme prop¨®sito de que el Estado no haga dejaci¨®n de sus derechos y deberes en orden a planificar los recursos hidrol¨®gicos nacionales, que jam¨¢s pueden ser competencia exclusiva de cada comunidad aut¨®noma.El r¨ªo Tajo circunvala hoy a Toledo, abraz¨¢ndolo con los tent¨¢culos de la extrema poluci¨®n, suciedades y detritos, abarc¨¢ndolo con aguas de pura cloaca, negras y muertas. El r¨ªo Segura, que parte a Murcia en dos, lleva tambi¨¦n s¨®lo un hilo de aguas que, con las altas temperaturas reinantes, hacen casi intransitable su bello paseo de ambas m¨¢rgenes de la corriente fluvial, tal es el olor nauseabundo, podrido y pestilente que se esparce por buena parte de la ciudad.
En apariencia, el mal afecta de igual manera negativa a ambas ciudades, pero la realidad de los hechos es bastante diferente.
Las aguas del Tajo, desde su recogida casi nada m¨¢s nacer en la cuna de los embalses de Entrepe?as-Buend¨ªa y Saced¨®n hasta rebasado en muchos kil¨®metros Toledo, es, por virtud de los vertidos de aguas residuales de Madrid y otros n¨²cleos de poblaci¨®n, una mera cloaca al aire libre y en ocasiones, como el pasado d¨ªa 10, un foco de mortandad pisc¨ªcola.
Una cloaca
Esas aguas del Tajo son en parte trasvasadas -mediante el acueducto Tajo-Segura- hasta el embalse de Talave, en Murcia, e irrigan zonas de la huerta murciana y de la alicantina, as¨ª como tambi¨¦n suministran su caudal a las poblaciones murcianas mediante su conexi¨®n a la red de las comunidades del Taiblilla. Y as¨ª, mientras en numeros¨ªsimos pueblos de la cuenca del Tajo hay alertas rojas, azules y verdes (es decir, que no hay agua ni para beber y sus pueblos tienen que ver racionado el suministro o ser atendidos por camiones-aljibe), en la cuenca del Segura no hay ni una s¨®la poblaci¨®n sin agua potable y corriente. ?sos son los datos oficiales.
Se acaba de escribir en Murcia (v¨¦ase el diario La Verdad del pasado d¨ªa 12) que los agricultores castellano-manchegos no se oponen al trasvase, sino tan s¨®lo algunos pol¨ªticos. Esta aseveraci¨®n es de risa. En plena ¨¦gida del general Franco se presentaron m¨¢s de 58.000 escritos sobre el trasvase. El trasvase se hizo pese a la oposici¨®n y el sentir popular.
Ser¨ªa eterno que intentara hacer un peque?o balance del trasvase Tajo-Segura, pero s¨ª totalmente necesario dejar constancia de un hecho reconocido por los propios ministros de Obras P¨²blicas de la ¨¦poca franquista que lo ejecutaron (Silva Mu?oz y Fern¨¢ndez de la Mora); el trasvase jam¨¢s se plante¨® como lo que ha resultado ser en la pr¨¢ctica: una apropiaci¨®n, hay quien la califica de indebida, de las aguas del Tajo para trasladarlas a la cuenca del Segura.
Pese a que se sab¨ªa de antemano que el trasvase iba a ejecutarse, tuvieron que cumplirse una serie de tr¨¢mites legales para poder llevarlo a cabo, entre ellos varios dict¨¢menes: informe del Consejo Econ¨®mico Nacional, informe del Consejo de Obras P¨²blicas, informe de la Direcci¨®n General de lo Contencioso del Estado, etc¨¦tera.
Pues bien, en todos ellos -seg¨²n consta en el expediente, clave 5.158-2, un duplicado del cual obra en mi poder- se dice que no ser¨ªa posible trasvasar un s¨®lo metro c¨²bico de agua de la cuenca del Tajo a otra cualquiera sin que previamente esa misma cantidad de agua sea repuesta (mediante distintas obras de regulaci¨®n, depuraci¨®n de residuales, etc¨¦tera) a esa misma cuenca. Nunca -ni en el franquismo- el acueducto Tajo-Segura fue una cesi¨®n de aguas Por ello, su t¨ªtulo oficial fue el de "aprovechamiento conjunto de las cuencas del Tajo y del Segura".
Y no s¨®lo ello, sino que para todas las provincias de la cuenca del Tajo (de Castilla, La Mancha y Extremadura) se especificaron numerosas obras de compensaci¨®n (nuevos regad¨ªos, carreteras, abastecimientos de agua, depuraci¨®n de residuales, nuevos embalses, etc¨¦tera). Su relaci¨®n llenar¨ªa muchos folios, pero el dato cierto es que de todas esas obras no se ha ejecutado ni un 20%.
Dentro de esta larga serie de compensaciones ocupaban primer¨ªsimo lugar aquellas obras tendentes a devolver al Tajo las aguas que se le iban a expropiar, a succionar, en su cabecera. Seg¨²n fuentes de m¨¢xima solvencia, ejecutar hoy esas obras equivaldr¨ªa a una inversi¨®n no inferior a los 80.000 millones de pesetas.
Aumentan los riesgos de una 'guerra del agua'
Otro tema de la m¨¢xima importancia es la cuenta de la lechera -tambi¨¦n escrita en documentos oficiales- sobre las posibles cosechas que iban a obtenerse en la cuenca del Segura: s¨®lo en c¨ªtricos se escribi¨® (v¨¦ase el Informe del Consejo de Econom¨ªa Nacional, folio 18) que "no es, por tanto, una visi¨®n pesimista considerar que (se lograr¨ªa) un aumento de 600.000 toneladas m¨¢s de agrios en la zona del Segura". Aunque, a rengl¨®n seguido, el propio consejo advierte que ello puede constituir un serio peligro, y apunta que debe incrementarse el regad¨ªo para plantas de alimentaci¨®n animal (forrajeras, etc¨¦tera). Mas da la casualidad de que ya el Banco Mundial -en un informe sobre la agricultura espa?ola del a?o 1965- se?ala precisamente que son las cuencas del Tajo y del Duero las m¨¢s id¨®neas para ese tipo de agricultura."Va a llegar un momento", afirma S¨¢nchez Candela, senador del PSOE por Toledo, "en que vamos a tener que financiar excedentes hortofrut¨ªculas, mientras que tendremos que importar plantas forrajeras, piensos, etc¨¦tera".
Para Juan Jos¨¦ Parrilla, tambi¨¦n del PSOE, consejero de Ordenaci¨®n Territorial del Gobierno aut¨®nomo murciano, el tema del trasvase no se puede poner en ning¨²n caso a discusi¨®n. "Nuestro planteamiento es no entrar en el tema de fondo del trasvase, sino en la grave situaci¨®n concreta de carencia de agua del momento actual. Nuestra situaci¨®n es tr¨¢gica. El trasvase ha permitido redotar a tierras que cada vez ten¨ªan menos riego, crear otros, abastecer n¨²cleos urbanos y desarrollar n¨²cleos tur¨ªsticos. No podemos renunciar a ello. Creemos que hay agua para todos. No tenemos la culpa los murcianos de que la Administraci¨®n no haya ejecutado las obras del pretrasvase. Aqu¨ª se despertaron unas expectativas (acaso, en verdad, desmesuradas) y somos igualmente conscientes de que se han dado casos muy negativos en el trasvase. Tenemos que entendernos, porque la situaci¨®n puede llegar a ser nefasta; queremos que el agua se explote con racionalidad. No somos insolidarios y creemos que en verdad la situaci¨®n es grave en el Tajo, sobre todo hasta pasado Toledo, debido principalmente a la falta de depuraci¨®n de las aguas de Madrid y a la falta de ejecuci¨®n de otras obras. Pero nosotros no podemos ya renunciar a unas necesidades y expectativas creadas durante a?os ni poner en serio peligro la riqueza creada y existente".
Por su parte, Josefa Calleja, tambi¨¦n del PSOE y que ha sido hasta estos d¨ªas la consejera de Agricultura del Gobierno murciano, declaraba el pasado 19 de mayo: "Cre¨ªamos que el Gobierno no nos iba a dar una gota de agua (hace meses, el MOPU se vio obligado a suspender el trasvase, dada la situaci¨®n de penuria en la cuenca del Tajo), por lo que bien recibidos sean esos 25 millones de metros c¨²bicos que el Gobierno aprob¨® trasvasarnos en este pasado Consejo de Ministros". Y apostilla: "S¨ª, ya s¨¦ que no es suficiente; pero, con la ley del trasvase en la mano, no nos corresponde legalmente nada". Ni una gota de agua, puesto que s¨®lo se pueden trasvasar -por esa ley- excedentes.
El senador toledano S¨¢nchez Candela dec¨ªa: "Esos 25 millones de metros c¨²bicos que el MOPU ha dado a Murcia gratuitamente son necesarios en la cuenca del Tajo, y ya ver¨¢ c¨®mo pronto le regala otros 25 millones. Nuestras reservas son de 498 millones de metros c¨²bicos, de agua, pero cualquier ingeniero sabe que un 20% del contenido de un embalse no es aprovechable, y la demanda de la cuenca del Tajo es de 605 millones. Por otro lado, est¨¢ regulado que los embalses de cabecera del Tajo desembalsen, cuando menos, 25 metros c¨²bicos por segundo para mantener un r¨ªo sucio y pestilente, pero al menos no una cloaca. Y sabemos que s¨®lo desembalsan cinco metros c¨²bicos por segundo.
Hacia una nueva ley
Senadores del PSOE de Castilla-La Mancha y Extremadura han elaborado ya un borrador de ley para cambiar la actual ley del trasvase. Los murcianos -incluidos los del PSOE- se oponen con u?as y dientes a esa pretensi¨®n. Lo primero que desean cambiar los castellano-manchegos y extreme?os es el t¨ªtulo mismo de la ley, "porque no se trata de un aprovechamiento conjunto de ambas cuencas, como est¨¢ demostrado hasta la saciedad, sino de una apropiaci¨®n de nuestros bienes". Por eso, la nueva ley que preparan se denomina ley de Transferencia de Recursos Hidr¨¢ulicos de la Cuenca del Tajo a la Cuenca del Segura. Los murcianos no pasan por ello, y menos a¨²n porque en la nueva ley se diga que en caso alguno es una cesi¨®n a perpetuidad, ni tampoco porque los de la meseta pretendan que cada cinco a?os se revisen los caudales, y a¨²n menos que se dictamine que cada a?o habr¨¢ que examinar las previsiones meteorol¨®gicas. En realidad, no est¨¢n conformes ni con el pre¨¢mbulo de la ley, ni con sus 22 art¨ªculos, ni con su disposici¨®n transitoria...
Los mesetarios (dicho sea sin af¨¢n peyorativo alguno) explican as¨ª las razones de por qu¨¦ quieren esa nueva ley, y responden con la Constituci¨®n en la mano cuando les indico que el agua es una cornpetencia que se reserva el Estado.
"El proceso de configuraci¨®n del territorio nacional en comunidades aut¨®nomas, recientemente completado como culminaci¨®n del mandato constitucional de construcci¨®n del nuevo Estado de las autonom¨ªas, y, de otro lado, las nuevas concepciones sobre usos y aprovechamientos del agua en un contexto amplio de ordenaci¨®n territorial y planificaci¨®n regional de los recursos naturales propios de cada comunidad aut¨®noma, determinan que una legislaci¨®n tan espec¨ªfica como era la que regulaba la explotaci¨®n del acueducto Tajo-Segura se adecue a estas nuevas circunstancias, cuyo ¨²ltimo punto de referencia :normativa es la propia Constituci¨®n y los estatutos de autonom¨ªa de las distintas regiones afectadas. Es en este marco legal en el que debe obligatoriamente inscribirse la explotaci¨®n de la mencionada obra".
"La propia Constituci¨®n establece, en su art¨ªculo 148, la posibilidad de que las comunidades aut¨®nomas asuman competencias en materia de explotaci¨®n de aprovechamientos hidr¨¢ulicos de inter¨¦s regional, sin otra limitaci¨®n, en cuanto a reserva del car¨¢cter exclusivo de las competencias del Estado, que la contenida en el art¨ªculo 149 en materia de legislaci¨®n, ordenaci¨®n y concesi¨®n de recursos y aprovechamientos hidr¨¢ulicos cuando las aguas discurran por m¨¢s de una comunidad aut¨®noma, reserva destinada, evidentemente, a la soluci¨®n de posibles conflictos jurisdiccionales entre comunidades aut¨®nomas (CC AA) cuyos territorios, total o parcialmente, comparten una misma cuenca hidrogr¨¢fica, pero obviamente nunca, y en ning¨²n caso, aplicable a posibles conflictos entre CCAA que no comparten el mismo soporte territorial de los recursos o aprovechamientos hidr¨¢ulicos en cuesti¨®n."
Taifas de agua
Por otro lado, consta que existe una muy grave preocupaci¨®n en las m¨¢s altas instancias del Gobierno PSOE sobre la planificaci¨®n del agua a nivel nacional, y la decidida voluntad de que el agua, un bien m¨¢s escaso y necesario -y m¨¢s en un pa¨ªs de tan claros desequilibrios hidr¨¢ulicos, como es el caso espa?ol-, no puede dejarse al ¨²nico arbitrio de cada comunidad aut¨®noma, y que el Estado tiene el deber y el derecho de decir la ¨²ltima palabra en tema de tanta trascendencia, para impedir una anarqu¨ªa en la regulaci¨®n y explotaci¨®n de este bien.
No obstante, el proyecto de ley castellano-manchego-extreme?o ya prev¨¦ que habr¨¢ de ser el Consejo de Ministros el que aprobase los planes quinquenales o cualquier modificaci¨®n a realizar, pero sin renunciar en principio, y por principio, a regular y ordenar Ias condiciones en las que deber¨ªa producirse la cesi¨®n voluntaria de las aguas de su cuenca".
Si la sequ¨ªa persiste, puede que corra algo m¨¢s que agua y r¨ªos de tinta.
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