Muy escasas referencias a los espa?oles

No ha habido ninguna otra referencia a la fotograf¨ªa espa?ola (expuesta oficialmente s¨®lo en 1978, de la mano de Jorge Rueda). La ¨²nica participaci¨®n, a falta de respaldo institucional, ha sido por libre, y en este sentido, resulta muy meritorio el papel llevado a cabo por la activa galer¨ªa F¨®rum, de Tarragona, promoviendo la obra de numerosos autores espa?oles.

Presente y futuro

En los ¨²ltimos a?os se ha hablado de la crisis de los RIP. Al margen de los aciertos y fallos organizativos, se contesta sobre todo la institucionalizac¨ª¨®n y el car¨¢cter oficialista que ha adquirido el festival. Pero m¨¢s que de crisis se trata, en todo caso, de una redefinici¨®n de sus funciones.Arl¨¦s era, y es a¨²n, el mercadillo en el que fot¨®grafos, coleccionistas, galeristas, conservadores de museos, editores, etc¨¦tera, establec¨ªan sus contactos. Hoy la aparici¨®n de cert¨¢menes estrictamente profesionales en Par¨ªs, en la Photokina de Colonia, etc¨¦tera, est¨¢ desplazando esas actividades hacia otras latitudes.

Adem¨¢s, desde que la direcci¨®n del festival fuera asumida por el profesor Alain Desvergnes, su contenido se est¨¢ academizando; m¨¢s que potenciar la relaci¨®n humana y profesional, como en el origen de los encuentros, cuando todav¨ªa se manten¨ªa un marcado car¨¢cter reivindicativo, se pone ahora el acento en una programaci¨®n saturada de actividades did¨¢cticas y divulgativas.

Aparte de la dimensi¨®n tur¨ªstica y vacacional que Arles conservar¨¢ siempre -por la proximidad de las playas de la Camarga y por su mismo atractivo hist¨®rico-art¨ªstico, remachado con el aura de Van Gogh y Picasso-, seguramente en el futuro los RIP proseguir¨¢n esa tendencia a erigirse, sobre todo, en un foco de debate te¨®rico, menos populista y m¨¢s especializado.