Coordinando los recursos hidr¨¢ulicos se puede solucionar la sequ¨ªa, seg¨²n Enrique Azc¨¢rate
"Coordinando los recursos hidr¨¢ulicos superficiales y los recursos subterr¨¢neos se puede paliar a medio plazo el problema de la sequ¨ªa en Espa?a", ha manifestado Jos¨¦ Enrique Azc¨¢rate, director del Instituto Geol¨®gico y Minero de Espa?a (IGME), quien se queja de la escasa importancia que se ha concedido en el Plan Agua Roja, elaborado por la Administraci¨®n para hacer frente a los efectos de la sequ¨ªa, a los acu¨ªferos subterr¨¢neos.
En su opini¨®n, hay que tener en cuenta que el problema del agua es que es un bien abundante, pero un recurso escaso. Mientras que los aportes clim¨¢ticos son irregulares, el consumo es de car¨¢cter regular y va en aumento. "Por ello se hace necesaria una regulaci¨®n de este bien mediante embalses, tanto superficiales como subterr¨¢neos; estos ¨²ltimos, de car¨¢cter natural. Para lograr la regulaci¨®n hay que actuar de forma coordinada sobre las dos clases de aguas, ya que existe una comunicaci¨®n entre las mismas, y cualquier actuaci¨®n sobre una de las dos afecta a la otra , seg¨²n Azc¨¢rate.Actualmente el citado organismo, que depende del Ministerio de Industria y Energ¨ªa, tiene pr¨¢cticamente finalizados los trabajos de elaboraci¨®n del Plan de Investigaci¨®n de Aguas Subterr¨¢neas en Espa?a (PIAS), que se comenz¨® en 1972. En ¨¦l se contiene una informaci¨®n exhaustiva y un conocimiento general de todas las aguas subterr¨¢neas existentes en el subsuelo espa?ol. Con los datos disponibles se puede afirmar que los acu¨ªferos subterr¨¢neos abarcan un 25% de la superficie del territorio nacional.
"Se puede extraer el doble de la cantidad de agua que se extrae actualmente", seg¨²n el director del IGME. "Ahora se extraen 5.109 hect¨®metros c¨²bicos al a?o, que traducido a litros por segundo, su pone un caudal continuo de 15.720 litros. Se podr¨ªan sacar m¨¢s de 30.000 litros por segundo de forma permanente". Como consecuencia del desarrollo del PIAS, se han elaborado dos nuevos planes de car¨¢cter nacional, el Plan de Ges ti¨®n y Conservaci¨®n (PGC) y el Plan -de Abastecimientos a N¨²cleos Urbanos (PANU).
El PGC tiene por objeto el control, tanto cualitativo como cuantitativo, de los principales acu¨ªfe ros, as¨ª como las recomendaciones pertinentes para una correcta conservaci¨®n y gesti¨®n de los mismos. El PANU, mientras tanto, tiene como objetivo el alumbramiento mediante sondeos, de aguas subterr¨¢neas con destino al abastecimiento p¨²blico.
Reservas importantes
Seg¨²n el director del IGME, existe una falta de conocimiento de estas actividades que est¨¢ causando importantes problemas. Aproximadamente el 20%. de los recursos h¨ªdricos nacionales circulan por el subsuelo, y la capacidad de almacenamiento de agua en el subsuelo es muy supenor a la capacidad de almacenamiento superficial, de donde se deriva la importancia de las aguas subterr¨¢neas. "Adem¨¢s, es precisamente en la mitad sur de la Pen¨ªnsula, ¨¢rea de m¨¢s bajas precipitaciones y donde existe un mayor n¨²mero de problemas, donde el peso espec¨ªfico de las aguas subterr¨¢neas puede alcanzar porcentajes superiores al 20% del total de recursos h¨ªdricos". En la cuenca del Guadalquivir es del 31% en la del Guadiana, del 29%; en la del J¨²car, del 59%; en la cuenca sur, sector oriental, el 75%, y en la cuenca sur, sector occidental, el 31%.En las ¨¢reas territoriales que est¨¢n actualmente en estado de alerta roja los cursos superficiales est¨¢n secos, por tanto, cualquier presa construida en ellos no almacenar¨¢ agua hasta su construcci¨®n y posterior per¨ªodo de lluvias, lo cual supone que las aguas superfiales no son la soluci¨®n r¨¢pida que d emanda la situaci¨®n actual, por lo que la soluci¨®n s¨®lo puede estar en las aguas subterr¨¢neas, como se ha demostrado pcr la experiencia en estos ¨²ltimos a?os, en los que se han realizado numerosos sondeos en poblaciones que tradicionalmente estaban en alerta roja.
Nueva legislaci¨®n de aguas
Desde que se puso en marcha el PANU, en el a?o, 1975, que saca informaci¨®n de los otros dos planes anteriores y los aplica a casos concretos, se han realizado 592 sondeos, de los cuales 227 se realizaron en el a?o 1981, y 164 en el a?o 1982. El n¨²mero de municipios que se ha visto beneficiado con los sondeos asciende a 474, con una poblaci¨®n abastecida de 2.453.763 personas. La inversi¨®n realizada para conseguir los 77.758 metros lineales sondeados ha sido de 1.141 millones de pesetas, y el caudal obtenido ha sido de 9.543 litros por segundo.El gran problema para hacer m¨¢s efectivo este plan radica en la falta de recursos econ¨®micos del Instituto Geol¨®gico y Minero y la congelaci¨®n de plantillas del mismo, por lo que tiene que acudir a subcontratar la casi totalidad de los trabajos. El director del IGME solicita tambi¨¦n, para tener una mayor operatividad, un cambio en el status del organismo y que pase a ser una sociedad estatal.
Hasta ahora en Espa?a no se ha abordado de forma conjunta el problema de las aguas. Al car¨¢cter antiguo y desfasado de la legislaci¨®n espa?ola hay que a?adir que mientras que las aguas superficiales son de propiedad p¨²blica, las subterr¨¢neas son de propiedad privada, lo que impide esta coordinaci¨®n, en opini¨®n del responsable del IGME. Para ello, en la nueva ley de Aguas que en estos momentos prepara el Ministerio de Obras P¨²blicas y Urbanismo se prev¨¦ la propiedad p¨²blica de todas las aguas.
A ello hay que a?adir la lucha entre ministerios y cuerpos por el control de las aguas. En el MOPU, donde tienen una fuerte implantaci¨®n los ingenieros de Caminos, se han ocupado de las aguas superficiales, mientras que el Ministerio de Industria, a trav¨¦s de los ingenieros de minas, es el departamento competente en aguas subterr¨¢neas. ?ste ser¨¢ tambi¨¦n uno de los problemas que habr¨¢ de resolverse en la futura ley, teniendo en cuenta, adem¨¢s, que existe una profesi¨®n m¨¢s moderna, la de los ge¨®logos, que tambi¨¦n reclama sus competencias en el tema.
Por el momento, los t¨¦cnicos del Ministerio de Obras P¨²blicas y Urbanismo est¨¢n tratando de establecer las l¨ªneas generales de esa nueva pol¨ªtica y legislaci¨®n de aguas, sin que todav¨ªa hayan trascendido las soluciones que se van a dar a los graves problemas derivados de la nacionalizaci¨®n de todas las aguas, sobre todo en materia agr¨ªcola.
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