El segundo Mundial 'junior' de baloncesto se inicia hoy en Palma

La preparaci¨®n de la selecci¨®n espa?ola empez¨® hace varias semanas y para la mayor¨ªa de los jugadores el esfuerzo ha sido muy superior al que est¨¢n habituados. Son lo que se puede llamar un grupo de grandes amigos. En el seno de la concentraci¨®n no hay jugadores de varios equipos, sino que todos est¨¢n integrados y sue?an con un ¨²nico objetivo: una medalla. El metal no importa.Tras las semanas de entrenamiento en Palma, la selecci¨®n hizo una serie de bolos por las islas, jugando cinco partidos ante Yugoslavia. El balance fue positivo: tres victorias por dos derrotas. Y las derrotas por tanteos mucho m¨¢s apurados que los triunfos.

No es f¨¢cil llevar a un grupo de gente joven con f¨¦rrea disciplina si, adem¨¢s, los entrenamientos se celebran en unas islas tan concurridas. La playa est¨¢ prohibida los d¨ªas de partido. La piscina del hotel, casi siempre, salvo excepciones. Las juergas son escasas. La bebida, controlada. Muchos de ellos piensan que hubiera sido mejpr que el campeonato se jugara en un lugar m¨¢s tranquilo.

Pero, aun con todo, siempre hay unos d¨ªas que son especiales, son los finales de etapa. Entre los encuentros con Yugoslavia y el viaje a Alemania, esa noche hubo libertad total. Lo mismo la noche final del torneo germano. Son las escasas oportunidades que tienen estos j¨®venes de escasos 19 a?os de ser nonnales. Los entrenamientos de esos d¨ªas tienen sabor especial. La seriedad es la misma, pero siempre se pierde alg¨²n bal¨®n de m¨¢s, pensando en la fiesta que . se avecina. Pinedo, serio como siempre, est¨¢ al quite. Jugador que pierde al hombre que marca, dos vueltas al campo. Equipo que pierde los rebotes en defensa es castigado con ejercicios flisicos continuados. Es la manera de no perder la concentraci¨®n. La responsabilidad de estos jugadores es elevad¨ªsima. Ellos son, en teor¨ªa, por un orden cronol¨®gico, los sucesores de los integrantes de la flamante selecci¨®n profesional. Pero tambi¨¦n es cierto que ¨¦sta no es la mejor selecci¨®n juvenil que hemos tenido. Pocos ser¨¢n los llamados a la fama de los 12 convocados. El caso de Villacampa tendr¨¢ dif¨ªcil similitud entre sus compa?eros. Adem¨¢s, los juveniles, cuyos resultados en el ¨²ltimo europeo han sido seguidos por los alevines con verdadero entusiasmo, les han clavado una puya.

Si el aficionado cuando piensa en baloncesto ya piensa en ¨¦xitos por lo obtenido en las categor¨ªas superiores, el subcampeonato de Europa logrado por los juveniles ha hecho que se aguarde este mundial j¨²nior con inusitada expectaci¨®n. Las transmisiones televisadas de los partidos en un mes como agosto, y a una hora adecuada, como, son las 19.30, har¨¢ que la concurrencia ante los televisores sea elevada. Y los seleccionados dudan de poder resistir la presi¨®n

La medallitis ha llegado al baloncesto. Pero, si los acontecimientos son normales en la fase final, junto a Espa?a estar¨¢n selecciones como Estados Unidos, la URSS, Yugoslavia, Italia, Brasil, Alemania y Canad¨¢ o Argentina. ?Cu¨¢ntos partidos podr¨¢n ganar nuestros representantes? Esa es la inc¨®gnita. Ellos bromean, y cuando se les pregunta si la participaci¨®n en la final es imposible, Hernang¨®mez toma la palabra, respira hondo y con sinceridad responde: "S¨ª, es imposible". Todos sus compa?eros r¨ªen a su alrededor, pero no dejan de so?ar con ese ¨¦xito.

Un equipo Irregular

El hombre encargado de dirigir a los j¨²niors espa?oles es Ignacio Pinedo, entrenador experimentado que ha cuidado en las ¨²ltimas temporadas del desaparecido Inmobanco. Pinedo, ligado desde hace muchos a?os a la federaci¨®n, siempre ha tenido alg¨²n cometido al frente de las selecciones inferiores. El ¨¦xito no es ajeno a este entrenador, muy fr¨ªo para algunos, del que no se aprenden grandes cosas para otros, pero con el que se asegura el no hacer el rid¨ªculo.

Pinedo ha convocado para este mundial dos bases. Un n¨²mero que parece corto para el esfuerzo a realizar, pero que estar¨¢n ayudados por un alero-base. Los encargados de subir y mover el bal¨®n son: Antonio Ll¨®rente, 19 a?os y 1,83, que ha pertenecido en la ¨²ltima t9niporada al Inmobanco, y Jos¨¦ Angel Arcega, 19 a?os y 1,85, jugador del Zaragoza. Ambos son Aermanos de los jugadores del mismo apellido que son ya importantes del baloncesto de Primera Divisi¨®n. Son jugadores que se complementan, puesto que mientras Llorente parece siempre pasado de revoluciones, por su juego vivo y fuerte, la entrada de Arcega en cancha ayuda a serenar los ¨¢nimos en momentos en que priva m¨¢s la cabeza.

Cinco son los aleros: Jos¨¦ Antonio Montero, 18 a?os, 1,94, del Joventut; Jordi Villac¨¢mpa, 19 a?os, 1,94, tambi¨¦n del Joventut; ?scar Pe?a, 19 a?os, 1,94, del Madrid; Carlos Montes, 17 a?os, 1,95, del Inmobanco, y Juan Ram¨®n Marrero, 19 a?os, 1,90, del Fortuna. Son la parte m¨¢s importante del conjunto. Si Espa?a, quiere jugar al contraataque con rapidez y con acierto en la culminaci¨®n, van a ser elementos indispensables.

En las acciones de Villacampa se centran gran parte de las aspiraciones hispanas. Sin discusi¨®n ser¨¢ quien m¨¢s minutos est¨¦ en cancha y, por motivos evidentes, quien m¨¢s puntos consiga. Otro hombre importante es Montero, que deber¨¢ ayudar a los bases y adem¨¢s acertar en su tiro. Ambos son jugadores llamados al ¨¦xito en un futuro breve. Especialmente Villacampa, de quien Pinedo dice: "No es que merezca ser la figura de esta selecci¨®n, es que ya deber¨ªa estar en la absoluta".

El problema llega al hablar de los pivots. No son, excesivamente altos. Los cinco encargados de partirse la cara con sus correspondientes parejas ser¨¢n: Rafael Vecina, 19 a?os, 2,04, del Barcelona; Guillermo Hernang¨®mez, 19 a?os, 2,01, del Madrid; Imanol Rementer¨ªa, 19 a?os, 2,00, del Madrid; Pedro Rodr¨ªguez, 19 a?os, 2,02, del Madrid, y Evaristo Bl¨¢zquez, 18 a?os, 2,00, del Barcelona. Si para cualquier persona normal la proporci¨®n edad-estatura parece elevada, pensando en el mundial es probable que la selecci¨®n espa?ola sea la m¨¢s baja de la fase final. Sovi¨¦ticos y norteamericanos acudir¨¢n al campeonato con hombres de 2,10 y pr¨¢cticamente todos sus convocados estar¨¢n alrededor de los dos metros o por encima.

La constituci¨®n de los seleccionados hispanos es delgada y pesan pocos kilos. Esto obligar¨¢ a un mayor esfuerzo en la lucha por los rebotes y tambi¨¦n llevar¨¢ a cometer un mayor n¨²mero de faltas personales. El cinco inicial de Espa?a ser¨¢: Llorente, Montero, Villacampa, Vecina y Hernang¨¢mez.