Max Gallo: "Los paracaidistas franceses defienden la integridad territorial de Chad"
El general de brigada Jean Poli fue nombrado el jueves comandante en jefe de las tropas francesas en Chad, seg¨²n informaba ayer un comunicado del Ministerio de Defensa franc¨¦s. El general Poli "mandar¨¢, a las ¨®rdenes del jefe de Estados Mayor de los Ej¨¦rcitos, general Jeannou Lacaze" los aproximadamente 2.500 soldados galos movilizados hasta ahora en la operaci¨®n Manta, de ayuda militar al Gobierno de Hiss¨¦ne Habr¨¦. El general jefe del cuerpo expedicionarios franc¨¦s en Chad, que cuenta 54 a?os de edad, es especialista en misiones de instrucci¨®n, operacionales y de estrategia y profundo conocedor de las cuestiones africanas. A lo largo de su carrera el general Poli ha estado en Argelia, Togo, Madagascar, Yibuti y Zaire. En la actualidad era el adjunto al general comandante de la 11? divisi¨®n paracaidista, que forma parte de la fuerza francesa de intervenci¨®n r¨¢pida. En las pr¨®ximas horas se espera la llegada a Yamena de aviones de combate Jaguar y Mirage.
La presencia de m¨¢s de 2.000 paracaidistas franceses en Chad responde, seg¨²n el secretario de Estado y portavoz del Gobierno de Par¨ªs, Max Gallo, a la voluntad de Francia de hacer respetar la integridad territorial de ese pa¨ªs y evitar la internacionalizaci¨®n del conflicto que enfrenta a las Fuerzas Armadas N¨¢cionales Chadianas (FANT) del presidente Hiss¨¦ne Habr¨¦ con las fuerzas del Gobierno de Uni¨®n Nacional de Chad (GUNT) del ex presidente Gukuni Uedei.
Lo primero que Max Gallo consider¨® necesario precisar en la conversaci¨®n manten¨ªda ayer con EL PAIS es que "no hay intervenci¨®n francesa en Chad. Las tropas francesas est¨¢n en Chad en virtud de los acuerdos de 1976 -contra¨ªdos con el Gobierno de Yamena-, pero se trata de instructores qut intentan que el Ej¨¦rcito chadiano se convierta en un Ej¨¦rcito capaz de utilizar material moderno".
Max Gallo insiste en que el objetivo del despliegue de los soldados franceses es recordar que Francia est¨¢ dispuesta a cumplir sus compromisos. El acuerdo de 1976 entre Par¨ªs y Yamena contempla la posibilidad de ayuda militar francesa en caso de amenaza exterior.
Respetar a Gadafi
"El prestigio de Francia est¨¢ basado", asegura Gallo, "en el respeto de los compromisos que ha suscrito, tanto en Chad como en otros pa¨ªses. Hay casos en los que estos compromisos incluyen aspectos de defensa, y el hecho de que enviemos instructores y material o nos pronunciemos por la integridad territorial de Chad prueba que Francia est¨¢ dispuesta a respetar sus compromisos y, por tanto, su prestigio no se ver¨¢ afectado".El Gobierno de Par¨ªs tiene claro que entre los objetivos que seha marcado al intervenir en Chad no se encuentra el de combatir al r¨¦gimen de Muamar el Gadafi. "Para 91 Gobierno franic¨¦s no hay bestias pardas. Hay Gobiernos que son Gobiernos legales de diferentes Estados, y el Gobierno del coronel Gadafi. es el Gobierno de Libia", afirma Gallo.
Este no es aparentemente el criterio del presidente norteamericano, Ronald Reagan, quien parec¨ªa tenerle reservado al Gobierno franc¨¦s un papel de gendarme antilibio, que Mitterrand se niega a aceptar. El portavoz del Gobierno franc¨¦s precisa que "Francia act¨²a y determina sola su pol¨ªtica. Estados Unidos tiene su pol¨ªtica mundial, incluida una pol¨ªtica africana, como es evidente, pero la pol¨ªtica francesa se determina s¨®lo en Par¨ªs".
Max Gallo acepta la opini¨®n expuesta por Reagan de que ?frica pertenece a la esfera de influencia francesa, "siempre que por esfera de influencia se entienda que Francia, por su presencia colonial, tiene lazos con la poblaci¨®n de esta regi¨®n que habla todav¨ªa franc¨¦s y lazos economicos con algunos pa¨ªses".
El Gobierno franc¨¦s se resiste a que Washington le imponga otros objetivos en ?frica distintos a los que Gallo enuncia como sustanciales: "Primero, que los conflictos existentes sean resueltos por la negociaci¨®n; segundo, intentar, en la medida de lo posible, el funcionamiento democr¨¢tico de los Estados, defendiendo los derechos humanos, es decir, rechazando el racismo, por ejemplo, en ciertas partes de Africa, y tercero, huir de la rivalidad Este-Oeste".
En relaci¨®n con el conflicto chadiano, Mitterrand ha actuado desde su llegada al El¨ªseo en la l¨ªnea marcada por la Organizaci¨®n para la Unidad Africana (OUA) de reconocer el poder leg¨ªtimo del vencedor de la, c¨ªclica guerra civil Habr¨¦-Uedei. La actual intervenci¨®n francesa no parece relacionada con un respaldo ideol¨®gico a uno de los contendientes hist¨®ricos. Por el contrario, Mitterrand se ha mostrado anteriormente m¨¢s cercano a Gukuni Uedei que al actual presidente.
El portavoz del Gobierno franc¨¦s reconoce que, Udesde un punto de vista general", la presencia de tropas francesas o de otros Estados en territorios que no son de su Estado, "debe ser una excepci¨®n".
Sin embargo, en el caso de Chad, "porque existe un tratado y porque la presencia de tropas francesas puede ser un factor de paz, las tropas francesas deben estar presentes".
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