Las bajas, a un nivel m¨¢s aceptable

Depende fundamentalmente de las dosis personales de optimismo y pesimismo el considerar los escasos resultados positivos que se dieron ayer en las bolsas como una reacci¨®n t¨¦cnica ante las cont¨ªnuas bajas de los d¨ªas pasados. Pero lo que no se puede negar es que al menos se ha logrado contener estas bajas y situarlas en unos niveles m¨¢s aceptables. Esto es v¨¢lido para la Bolsa de Madrid, ya que en el mercado catal¨¢n si se registr¨® la esperada reacci¨®n, que estuvo basada en las alzas de los valores de construcci¨®n, qu¨ªmicas y electricidad, y que finalmente llevaron al ¨ªndice de este mercado a ganar 73 cent¨¦simas, cifra que ofrece un marcado contraste con las p¨¦rdidas de 44 cent¨¦simas en Madrid y de 101 en Valencia. En Bilbao no se pudieron confeccionar los ¨ªndices a tiempo, ya que el ordenador a¨²n no puede funcionar por falta de fluido el¨¦ctrico, y las sesiones se est¨¢n celebrando a la luz de las velas. A pesar de estos inconvenientes, el mercado bilba¨ªno se incorpor¨® el mi¨¦rcoles a la actividad.Dentro de las distintas evoluciones de los mercados, se dieron dos coincidencias en todos ellos: lleg¨® algo de dinero a los valores el¨¦ctricos, y las instituciones bancarias, a pesar de haber logrado reducir el ritmo de las bajas, continuaron encontr¨¢ndose con la misma cantidad de t¨ªtulos puestos a la venta por unos inversores que parecen haber perdido una buena parte de la confianza que, tradicionalmente, ten¨ªan puesta en estos valores.

Unos 4.000 t¨ªtulos m¨¢s que el d¨ªa anterior registraba el saldo por caja de los siete principales bancos del pa¨ªs en la Bolsa de Madrid, una vez descontados los 913 que ten¨ªa el Popular como resto comprador. Banesto volv¨ªa a ser el que ostentaba el saldo m¨¢s abultado, seguido por el Santander, y ambos, junto con el Vizcaya, fueron los tres que protagonizaron las p¨¦rdidas del grupo al retirar solamente el 35% de sus saldos.

Comparando la evoluci¨®n de las cotizaciones de este sector con la del d¨ªa anterior, se puede observar una sensible mejor¨ªa, al tiempo que ha aumentado la cantidad de t¨ªtulos que estas entidades han tomado cada d¨ªa. Ahora queda por ver si los inversores ceder¨¢n algo en su postura vendedora una vez que los bancos vuelven a prestar su apoyo al mercado.

Hubo abundancia de buenas intenciones en el sector el¨¦ctrico, que no pasaron mucho de ah¨ª debido a la aparici¨®n de papel en cuanto los precios sub¨ªan. Este fue el caso de Hidrola en el mercado madrile?o, que tras ganar un entero de salida, hubo de ir cediendo posiciones ante la falta de compradores a esos niveles. Se trataba de vender y la ley del mercado hizo el resto. En cuanto a constructoras y qu¨ªmicas, lo ¨²nico que consiguieron, con la excepci¨®n de Barcelona, fue retener las bajas y lograr que los principales valores, aquellos que m¨¢s ponderaci¨®n tienen en el ¨ªndice, repitieran. No sucedi¨® lo mismo con los valores del sector sider¨²rgico, que continuaron bajando casi en bloque.

La desconfianza sigue siendo lo m¨¢s destacado en los mercados de valores, sin que la esperada llegada de este mes haya tra¨ªdo nada que permita deshecharlo. El comp¨¢s de espera ante las medidas econ¨®micas se alarga, y la situaci¨®n se va deteriorando progresivamente. El futuro sigue siendo o es, una inc¨®gnita para los mercados de valores.