La distensi¨®n prevalece en la Conferencia de Madrid al abandonar Malta su actitud obstruccionista

Viene de la primera p¨¢ginaLa reuni¨®n de los ministros de Asuntos Exteriores ha adquirido un contenido pol¨ªtico trascendental, que supera en mucho el car¨¢cter protocolario. Este encuentro es para EE UU y la URSS una ocasi¨®n ¨²nica de detener el continuo deterioro de sus relaciones, que alcanzaron la pasada semana niveles peligrosos por el ataque sovi¨¦tico contra el avi¨®n surcoreano.

El presidente norteamericano, Ronald Reagan, quiere tambi¨¦n aprovechar el final de la Conferencia de Madrid para intentar una posici¨®n de condena un¨¢nime de los pa¨ªses de la Alianza Atl¨¢ntica contra la Uni¨®n Sovi¨¦tica en relaci¨®n con el derribo del jumbo surcoreano. Gromiko, que no fue recibido ayer en el aeropuerto de Barajas por su hom¨®logo espa?ol, deber¨¢ aguantar el chaparr¨®n de acusaciones que los ministros occidentales lanzar¨¢n, seguramente, a prop¨®sito de este tema.

Los embajadores del grupo de la Alianza Atl¨¢ntica se reunieron ayer en la sede de la conferencia, y aunque se descarta oficialmente una declaraci¨®n conjunta contra la URSS, es muy probable que unilateralmente cada ministro de Asuntos Exteriores de la OTAN se refiera en t¨¦rminos m¨¢s o menos duros al suceso del avi¨®n. El ministro espa?ol, Fernando Mor¨¢n, puede ser en su intervenci¨®n de esta ma?ana el primero en referirse al grave incidente. La Uni¨®n Sovi¨¦tica ten¨ªa previsto hacer uso de la palabra esta tarde, y el ¨²ltimo de los grandes pa¨ªses en intervenir ser¨¢ Estados Unidos.

La seguridad

De todos los ministros presentes en la capital espa?ola, los que m¨¢s preocupan a los servicios de seguridad son los de Turqu¨ªa y Francia. El primero, porque los diplom¨¢ticos turcos son desde hace a?os, de forma permanente, objetivo del terrorismo armenio; el segundo, por los ataques contra intereses franceses que se han repetido en distintas partes del mundo en los ¨²ltimos meses. El documento final de la CSCE supone un avance sustancial respecto a los acuerdos de Helsinki de 1975. Adem¨¢s de mantener abierto el esp¨ªritu de distensi¨®n surgido en la capital finlandesa, el documento de Madrid fija un calendario preciso de actividades para los pr¨®ximos tres a?os en el que destacan una conferencia sobre desarme en Europa, una reuni¨®n de expertos en derechos humanos y un reuni¨®n sobre contactos humanos en la que se estudiar¨¢n los casos de familias separadas, restricci¨®n de visados y dificultades para los matrimonios mixtos en pa¨ªses del Este de Europa. La base de ese documento, conocido como RM-39 Revisado, ha sido elaborada por los pa¨ªses neutrales y no alineados, pero, para su aprobaci¨®n result¨® decisiva una propuesta presentada en junio por el presidente del Gobierno espa?ol que recog¨ªa y recortaba algunas exigencias tanto del Este como de Occidente.

Iniciativa espa?ola

La habilidad del jefe de la delegaci¨®n espa?ola, Juan Luis Pan de Soraluce, consigui¨® sortear los obst¨¢culos con que se encontr¨® esta propuesta y llegar a la aprobaci¨®n de hecho del documento final el pasado mes de julio. Desde entonces hasta ahora, los delegados han estado exclusivamente dedicados a convencer a Malta para que olvidase sus exigencias sobre la seguridad en el Mediterr¨¢neo.