Nicol¨¢s Redondo pide al presidente del Gobierno que intente fijar con patronal y sindicatos los l¨ªmites para la negociaci¨®n colectiva
La Uni¨®n General de Trabajadores (UGT) ha dirigido una carta al presidente del Gobierno, Felipe Gonz¨¢lez, en la que le pide que "convoque a los miembros de las organizaciones sindicales y empresariales representativas para mantener una reuni¨®n conjunta donde se analicen los problemas de concertar determinadas medidas imprescindibles para superar la crisis". La iniciativa de UGT se encuadra dentro de su deseo de allanar en lo posible cuantos obst¨¢culos sean necesarios con tal de conseguir el pacto social y de fijar los l¨ªmites donde ha de desenvolverse la pr¨®xima negociaci¨®n colectiva. Su mensaje va especialmente destinado a CC OO, que es quien mayores resistencias plantea a la hora de iniciar las conversaciones.
En una carta, firmada por Nicol¨¢s Redondo y fechada el pasado viernes, UGT pide al presidente del Gobierno, Felipe Gonz¨¢lez, la convocatoria de una reuni¨®n conjunta con sindicatos y patronal de cara a la concertaci¨®n social. En la citada carta la comisi¨®n ejecutiva de la central socialista recuerda que "el pr¨®ximo inicio del proceso de negociaci¨®n colectiva y la divulgaci¨®n de las previsiones que maneja el Gobierno en materia econ¨®mica, hacen necesaria una reuni¨®n como la que proponemos y explica, de alg¨²n modo, la urgencia de la negociaci¨®n".La carta es, a la vez, un mensaje dirigido a CC OO, para ofrecerle la posibilidad de unirse al carro de la negociaci¨®n. CC OO hab¨ªa venido defendiendo que deb¨ªa producirse un encuentro tripartito -Gobierno, patronal y sindicatos- que sirviera para delimitar el campo de las conversaciones entre los agentes sociales. De producirse esta reuni¨®n y al margen de sus resultados, las intenciones del Gobierno en cuanto a su deseo de concertaci¨®n quedar¨ªan disipadas, y supondr¨ªan, en definitiva, el respaldo de los contactos entre las organizaciones empresariales y sindicales, lo cual dar¨ªa satisfacci¨®n a CC OO en su principal reivindicaci¨®n.
Para UGT, la negociaci¨®n es cada vez m¨¢s necesaria. Su secretario general, Nicol¨¢s Redondo, mostraba ayer su estupor por la postura de CC OO, que defend¨ªa a¨²n que el Gobierno no ten¨ªa intenci¨®n de negociar y subrayaba la incoherencia de convocar movilizaciones conjuntas con el PCE cuando a¨²n no se hab¨ªan reiniciado los contactos. Redondo expuso los cambios que se hab¨ªan producido a nivel presupuestario y que, a su juicio, supon¨ªan un giro fundamental en la pol¨ªtica del Gobierno. Y, tanto ¨¦l como Jos¨¦ Luis Corcuera, secretario de acci¨®n sindical de la central socialista, insistieron en que, antes de iniciarse, esta negociaci¨®n ofrec¨ªa ya mayores contrapartidas que las que ofreci¨® en su d¨ªa el Acuerdo Nacional sobre Empleo (ANE).
Diferencias positivas
El cuadro comparativo presentado ayer por UGT ofrece un saldo netamente positivo hacia estas negociaciones. En empleo, hay un compromiso en firme de creaci¨®n de puestos de trabajo, mientras que el ANE s¨®lo hablaba de mantener la poblaci¨®n asalariada. En pensiones, se perd¨ªan con el ANE dos puntos, frente a un aumento del poder adquisitivo planteado en esta negociaci¨®n. Los fondos del desempleo han tenido ya un mayor incremento. Y en lo que se refiere a salarios, el punto m¨¢s conflictivo de los actuales acuerdos, el ANE parti¨® de la p¨¦rdida de dos puntos del poder adquisitivo, mientras que el Gobierno plantea ahora una p¨¦rdida de 1,5 puntos.A este respecto, adem¨¢s, UGT plantea que "en cualquier caso, no puede darse como definitivo el planteamiento del Gobierno, porque las subidas salariales han de ser producto de la negociaci¨®n". La central socialista -y en este sentido Nicol¨¢s Redondo insisti¨® en varias ocasiones- ya hab¨ªa aceptado la moderaci¨®n salarial y el concepto de poder adquisitivo global contra poder adquisitivo individual. UGT guarda, por otra parte, una baza de cara a la negociaci¨®n que contar¨ªa con el respaldo de sus bases: las subidas escalonadas o por tramos. Lo que significar¨ªa mayores aumentos para los salarios m¨¢s bajos.
No ser¨ªa estrictamente un aumento inversamente proporcional, pero se le parecer¨ªa mucho. Esta idea, que no supone realmente ning¨²n sobrecoste laboral, responder¨ªa al concepto de solidaridad y contar¨ªa con la aquiescencia de trabajadores de base y no tendr¨ªa que encontrar excesivas resistencias por parte empresarial.
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