Espa?a fabricar¨¢ misiles antia¨¦reos el a?o pr¨®ximo
Las exportaciones de armamento superar¨¢n este a?o los 100.000 millones de pesetas
Alcanzar una defensa nacional m¨¢s aut¨®noma e independiente es uno de los objetivos perseguidos por el ministro de Defensa, Narc¨ªs Serra, quien desea acabar con las compras directas de material b¨¦lico extranjero, sustituy¨¦ndolas por programas de colaboraci¨®n o cofabricaci¨®n, con el fin de elevar el nivel tecnol¨®gico del sector. Mediante este plan, se pretende que gran parte de los suministros de armas a los ¨¦j¨¦rcitos sean de procedencia nacional y, de otro lado, se persigue aumentar las exportaciones y, por tanto, favorecer a las industrias espa?olas. Para ello, el Gobierno ha emprendido un ambicioso plan de potenciaci¨®n de la industria nacional de la defensa, a la que ir¨¢n a parar una buena parte de los 2,1 billones de pesetas que se invertir¨¢n en el per¨ªodo 1983-1990 en la modernizaci¨®n de las Fuerzas Armadas.Hasta el momento, los productos de mayor ¨¦xito en el sector han sido armas ligeras y cortas (fusiles y pistolas), bombas, para aviaci¨®n, cartucher¨ªa, armamento medio (ca?ones sin retroceso y morteros), barcos ligeros (patrulleros y corbetas), veh¨ªculos medios y peque?os aviones de transporte (como el C-212 Aviocar). Sin embargo, varias empresas p¨²blicas y privadas, casi siempre en colaboraci¨®n con firmas extranjeras, se disponen en la actualidad a dar el salto cualitativo que har¨¢ posible la competencia directa de Espa?a con otros pa¨ªses avanzados en sistemas de armas de elevada tecnolog¨ªa, como misiles, carros de combate, aviones de entrenamiento, cohetes, submarinos y buques de gran tonelaje.
Empresas p¨²blicas y privadas
Las empresas espa?olas dedicadas a la fabricaci¨®n de armas est¨¢n divididas en cuatro grupos. El primero lo integran cuatro f¨¢bricas de explosivos y productos qu¨ªmicos, dependientes de la Direcci¨®n General de Armamento y Material (DGAM) del Ministerio de Defensa. El segundo, y m¨¢s importante, est¨¢ compuesto por las empresas integradas en la Divisi¨®n de Defensa del Instituto Nacional de Industria (INI), entre las que destacan las empresas nacionales Santa B¨¢rbara y Baz¨¢n, Construcciones Aeron¨¢uticas, S.A. (CASA) y CETME. El tercero corresponde a otras empresas del INI relacionadas con la defensa, como las empresas nacionales de Autocamiones (ENASA), de ¨®ptica (ENOSA) y de Experiencias Industriales (EISA). El ¨²ltimo grupo es el correspondiente al sector privado, que ocupa a 23.000 personas y que incluye numerosas firmas dedicadas a fabricar armas cortas, como Astra, Llama o Star, y algunas que, como CECSA, est¨¢n situadas en la vanguardia tecnol¨®gica del sector.
Durante el pasado a?o, s¨®lo entre Baz¨¢n, CASA y Santa B¨¢rbara, las empresas m¨¢s importantes del sector, lograron unas ventas de 109.767 millones de pesetas, de los que 54.105 correspondieron a exportaciones. Para el actual ejercicio, se espera un -volumen de ventas de 140.000 millones de pesetas, de los que 82.700 corresponder¨¢n a exportaciones.
Baz¨¢n.- Dedicada a la construcci¨®n naval, emplea a 14.622 personas. En 1982 factur¨® productos por valor de 56.761 millones de pesetas, de los que 19.372 correspondieron a exportaciones. Los principales proyectos actuales de la firma se refieren a la construcci¨®n del portaaeronaves Pr¨ªncipe de Asturias y de cuatro fragatas y corbetas para el futuro Grupo de Combate de la Armada, as¨ª como a la fabricaci¨®n de cuatro submarinos (dos de ellos finalizados) de patente francesa y diversas unidades ligeras para la exportaci¨®n. La firma participa en el desarrollo del sistema antimisiles Meroka.
CASA.- Emplea a 9.622 personas, y el pasado a?o su volumen de ventas ascendi¨® a 34.199 millones de pesetas, de los que 22.559 correspondieron a exportaciones. La actual cartera de pedidos supera los 55.000 millones. Su principal producto actual es el C-212 Aviocar, peque?o avi¨®n de transporte del que ya se han vendido 250 unidades en los cinco continentes. Tambi¨¦n fabrica el avi¨®n de entrenamiento C-101, del que se han vendido 76 unidades. Ambos aparatos ser¨¢n mejorados tecnol¨®gicamente en breve. Igualmente, fabrica los helic¨®pteros BO-105 de origen alem¨¢n. En colaboraci¨®n con Indonesia, pronto iniciar¨¢ la fabricaci¨®n del CN-235, avi¨®n medio de transporte comercial.
Santa B¨¢rbara.- Su plantilla es de 4.078 personas. En 1982 factur¨® productos por valor de 14.165 millones de pesetas, de los que 6.476 correspondieron a exportaciones. Sus principales productos son los carros de combate AMX-30, de origen franc¨¦s, los ca?ones sin retroceso contracarro, material de artiller¨ªa, los fusiles de asalto y las ametralladoras. Recientemente, inici¨® la producci¨®n en serie del lanzacohetes Teruel.
Otras empresas con importantes vol¨²menes de negocios son ENASA, fabricante del blindado medio sobre ruedas (BMR); Esperanza y C¨ªa., cuyos principales productos son los morteros; Talbot, que ha desarrollado un prototipo de cazacarros equipado con misiles y denominado Cazador; CECSA, que fabricar¨¢ los simuladores del cazabombardero F-18A; y Explosivos Alaveses (Expal), especializada en fabricar bombas para la aviaci¨®n.
En el plano administrativo, la reestructuraci¨®n de la Divisi¨®n de Defensa del INI, la revitalizaci¨®n de la Comisi¨®n Asesora de Armamento y Material (CADAM), la reorganizaci¨®n de la DGAM y la potenciaci¨®n de la Subsecretar¨ªa de Defensa, en manos de un civil, son algunas pruebas del inter¨¦s de Narc¨ªs Serra en potenciar todo lo relativo a la industria de la defensa, ajustar los programas industriales a las necesidades de los ej¨¦rcitos y controlar, en detrimento de los m¨¢s altos mandos militares, las compras de armamento en el exterior.
A la caza del cliente
Los clientes para el sector armament¨ªstico espa?ol en el mercado exterior son, sobre todo, los pa¨ªses latinoamericanos y los de Oriente Pr¨®ximo. El principal cliente en 1982 fue Egipto, pa¨ªs 1982 para el que fueron autorizadas ventas de armamento por valor de 65.410 millones de pesetas, en los que se incluyen dos corbetas y seis patrulleros, y veh¨ªculos BMR. Tambi¨¦n se exportaron armas a pa¨ªses con reg¨ªmenes dictatoriales, como Chile (sobre todo armas ligeras y aviones por valor de 12.848 millones), Argentina (productos navales valorados en 258 millones) y Uruguay (20 millones); con sistemas pol¨ªticos racistas, como Sur¨¢frica (fundamentalmente armas cortas valoradas en 293 millones); o con problemas pol¨ªticos con Espa?a, como Marruecos (3.695 millones). Incluso entre los clientes figura Libia, que adquiri¨® armas cortas de la empresa Astra por valor de 33 millones de pesetas.
Las armas vendidas a esos pa¨ªses no siempre tienen como destino final a los iniciales compradores. De hecho, en la lista de exportaciones no figura Irak, pa¨ªs que en su conflicto con Ir¨¢n est¨¢ empleando abundante armamento fabricado en Espa?a. CASA, por ejemplo, vendi¨® a Irak 24 helic¨®pteros BO-105, alguno de los cuales fue entregado el pasado a?o, si bien es posible que en este caso, como sucede con otras armas, hayan sido vendidas previamente a un pa¨ªs intermediario.
Todas las exportaciones de material b¨¦lico espa?ol necesitan la autorizaci¨®n de la Junta Interministerial Reguladora del Comercio Exterior de Armas y Explosivos, formada por representantes de diversos ministerios. No obstante, resulta dif¨ªcil, si no imposible, comprobar los destinos finales de las armas, por lo que el caso de Irak se ha repetido en numerosas ocasiones, seg¨²n reconocen personas directamente relacionadas con el comercio internacional de armamento.
La f¨¢cil penetraci¨®n espa?ola en los citados mercados favorece que algunas potencias armament¨ªsticas, fundamentalmente francesas y alemanas, est¨¦n interesadas en desarrollar con Espa?a programas de cofabricaci¨®n o coproducci¨®n, ya que las exportaciones posteriores pueden realizarse m¨¢s f¨¢cilmente a trav¨¦s de Espa?a.
El inter¨¦s de diversos pa¨ªses en el sector del armamento espa?ol puede comprobarse por los continuos contactos internacionales que mantienen altos cargos militares y autoridades del Ministerio de Defensa con representantes de otros pa¨ªses. S¨®lo en las ¨²ltimas semanas, Serra ha visitado Francia, el jefe del Estado Mayor de la Armada viaj¨® a Uruguay y Argentina y el jefe del Estado Mayor del Ej¨¦rcito visit¨® Sur¨¢frica. Igualmente, visitaron Espa?a autoridades relacionadas con la industria de armamento de Holanda, Grecia, Alemania Federal y Arabia Saud¨ª.
Por otra parte, la nueva pol¨ªtica espa?ola de huir de las compras directas ha originado que, cuando se plantea la adquisici¨®n en el exterior de sistemas de armas m¨¢s avanzados, como aviones de combate o misiles, se inicien paralelamente programas de colaboraci¨®n y de compensaci¨®n con las multinacionales vendedoras. Es el caso ya conocido del programa FACA (Futuro Avi¨®n de Combate y Ataque) y pr¨®ximamente ser¨¢ el del suministro de misiles contracarro y antia¨¦reos de baja cota para el Ej¨¦rcito de Tierra.
En el programa de los misiles contracarro se invertir¨¢n 30.000 millones de pesetas, y en el de los antia¨¦reos 35.000. Las compensaciones globales ascender¨¢n a 22.000 millones, e incluir¨¢n la fabricaci¨®n, al parecer por parte de Santa B¨¢rbara, de los misiles que se adquieran. Posteriormente, se realizar¨¢ una operaci¨®n similar en el programa de adquisici¨®n de un nuevo carro de combate, ¨¢rea en la que compiten el AMX-32 franc¨¦s y el Leopard 2 alem¨¢n.
En este contexto, cuyo principal objetivo es la adquisici¨®n de nuevas tecnolog¨ªas, se enmarcan los acuerdos de colaboraci¨®n militar que Serra tiene previsto suscribir con las principales potencias europeas y la participaci¨®n espa?ola en todas las comisiones de la OTAN creadas para el intercambio de informaci¨®n tecnol¨®gica entre los pa¨ªses miembros de la Alianza.
Frente a estas expectativas, Espa?a, un pa¨ªs con excesivas filtraciones y con m¨ªnimos servicios de contrainteligencia, deber¨¢ satisfacer una exigencia de los pa¨ªses suministradores de tecnolog¨ªa: proteger la informaci¨®n que se le ceda.
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