El aumento de las tarifas el¨¦ctricas producir¨¢ un descenso en el consumo equivalente a una central nuclear y media

La racionalizaci¨®n del consumo el¨¦ctrico que se espera conseguir con los principios de interrumpibilidad y estacionalidad, establecidos en el nuevo modelo de tarifas el¨¦ctricas, puede suponer una reducci¨®n de la demanda de Potencia energ¨¦tica comprendida entre los 500 y 600 megavatios, seg¨²n estimaciones de la propia Administraci¨®n. Expertos del sector qu¨ªmico productor de clorososa y derivados clorados, que consume gran cantidad de electricidad, por utilizar procesos electrol¨ªticos, han concluido resultados m¨¢s optimistas afirmando que la reducci¨®n en la demanda de potencia instalada puede ascender a 1.500 megavatios, es decir, el equivalente a una central nuclear y media de las de la segunda generaci¨®n.

El fundamento de estos resultados es consecuencia del an¨¢lisis que han realizado estos expertos en la curva anual de demanda de potencia el¨¦ctrica, en la que se refleja que la demanda extraordinaria de potencia solamente se produce durante una punta de 200 horas al a?o. Para hacer frente a la demanda espec¨ªfica de estas horas punta se precisan varias centrales t¨¦rmicas auxiliares, cuya energ¨ªa producida resulta costos¨ªsima, tanto por el precio del combustible como por la escasa rentabilidad de la inversi¨®n, debido a las pocas horas de funcionamiento.Con la estacionalidad (primas a los industriales que trasladen su consumo a las ¨¦pocas de menos actividad) y la interrumpibilidad (primas a los usuarios que est¨¦n dispuestos a reducir la demanda energ¨¦tica cuando se lo soliciten las compa?¨ªas el¨¦ctricas) se pretende eliminar esta punta de 200 horas anuales de m¨¢xima demanda y cuyo mantenimiento distorsiona el conjunto de los precios por su elevado costo. La posibilidad de eliminar estas puntas es relativamente factible si se tiene en cuenta que suelen tener una duraci¨®n de cuatro a cinco horas diarias como m¨¢ximo y se hallan concentradas en los meses de diciembre, enero y febrero.

El objetivo que se persigue con los descuentos tarifarios por aplicaci¨®n de la interrumpibilidad y la estacionalidad es trasladar la producci¨®n industrial a horas de menor consumo. Al ser la el¨¦ctrica una energ¨ªa no almacenable, no queda otro recurso que el adecuar el consumo de los procesos industriales a la capacidad de producci¨®n energ¨¦tica m¨¢s econ¨®mica, en concreto la hidr¨¢ulica y la nuclear. Sin embargo, no todas las industrias podr¨¢n beneficiarse e los dos principios. As¨ª, los dfabricantes de cloro tienen dificultades para aplicar la estacionalidad porque el producto final es un gas dif¨ªcil de almacenar.

15.000 millones de ahorro

A modo de ejemplo, los expertos se?alan que mediante la estacionalidad se puede sustituir el kilovatio/hora t¨¦rmico, con un coste, s¨®lo de combustible, de 6,50 pesetas, por otro generado con carb¨®n o con la energ¨ªa nuclear de las centrales ya instaladas, a un coste de combustible de cuatro pesetas el kilovatio/hora de carb¨®n y de una peseta el kilovatio/hora nuclear.Asimismo, con la aplicaci¨®n del sistema de interrumpibilidad las compa?¨ªas el¨¦ctricas pueden dejar de invertir en la construcci¨®n de nuevas centrales nucleares, ya que, si en un momento determinado tienen problemas de potencia, pueden resolverlos suministrando menos energ¨ªa, o incluso desconectando de la red a los abonados con los que hayan establecido este tipo de acuerdos, lo que se traduce en importantes reducciones de la inversi¨®n.

Los mismos t¨¦cnicos indican que el ahorro que se puede conseguir haciendo innecesaria la instalaci¨®n 1.000 megavatios se puede cuantificar en 100.000 millones de pesetas, tomando como referencia que el coste de inversi¨®n para producir un kilovatio es de 100.000 pesetas.

Los criterios de interrumpibilidad y estacionalidad y otros similares se vienen empleando en Francia desde hace varios a?os con notorio ¨¦xito. Ello ha permitido situar el precio de la energ¨ªa francesa de la alta tensi¨®n, es decir, la que utiliza la gran industria, un 40% por debajo de la media europea. Si bien el bajo nivel de los precios franceses es debido, en buena medida, al alto porcentaje con que participa la energ¨ªa nuclear en el conjunto de la producci¨®n, que reducir¨¢ la dependencia energ¨¦tica del petr¨®leo, en 1990, a un 30%, frente al 75% existente en 1973. Esta es el aspecto de la tesis que defiende Unesa, la patronal del sector el¨¦ctrico espa?ol.

La racionalizaci¨®n del consumo el¨¦ctrico que pretende introducir la nueva pol¨ªtica tarifaria choca con la actual evoluci¨®n del mercado, estimulada en buena parte por el incesante crecimiento de la econom¨ªa sumergida. En efecto, los estudios t¨¦cnicos de algunas compa?¨ªas el¨¦ctricas revelan que casi la mitad del crecimiento de la demanda energ¨¦tica, que durante los nueve primeros meses del a?o ha sido del 4%, obedece a un inusitado aumento del consumo dom¨¦stico a causa de la instalaci¨®n de talleres familiares.