La publicidad en TVE
Un proyecto de ley orientado a regular determinada publicidad televisiva no podr¨¢ desarrollarse con la suficiente antelaci¨®n para evitar que la inminente campa?a navide?a ocasione estragos frenol¨®gicos en los sujetos receptores. Pero es m¨¢s que deseable un r¨¢pido y efectivo control de la publicidad enga?osa, a semejanza del proyecto de directriz de las Comunidades Europeas, y proscribir de una vez un mundo visual poblado, de elementos para el progreso de la neurosis.El veh¨ªculo que emprende el vuelo, el ingenio que realiza su funci¨®n al instante, la bebida servida por una hur¨ª y el comprimido capaz de transformar una expresi¨®n atormentada en la de un representante de "Viva la gente" son algunos pocos ejemplos para la investigaci¨®n de motivos inconscientes.
La transici¨®n posb¨¦lica de una econom¨ªa de guerra a una econom¨ªa de consumo aument¨® el inter¨¦s de los anunciantes por las motivaciones de sus auditorios, afirm¨¢ndose en los ¨²ltimos a?os en el medio televisivo en tanto indiscutible catalizador. La publicidad supone m¨¢s del 3% del Producto Interior Bruto en algunos de los pa¨ªses superindustrializados y absorbe gran parte de los gastos de promoci¨®n de la mayor¨ªa de las empresas. De ah¨ª surge precisamente la necesidad imperiosa de unas reglas de juego v¨¢lidas para evitar la publicidad desleal; las alegaciones inexactas y denigratorias; la publicidad irracional, coactiva y discriminadora; la que abusa de la confianza y credulidad del consumidor; la encubierta, comparativa y enga?osa.
Esta vasta,y compleja tarea que tienen por delante los legisladores incluye tambi¨¦n la publicidad orientada al ni?o, poderoso instrumento de presi¨®n familiar y v¨ªctima de factores ocultos en la motivaci¨®n de los mensajes. (...)
La premisa mayor en la que parece se apoyar¨¢ el texto del proyecto que tiene en estudio el Gobierno establece el principio de que no podr¨¢ anunciarse ning¨²n producto, del que no puedan demostrarse las cualidades que se pregonan. Un serio intento de racionalizar un mundo que constituye en s¨ª mismo un poder de alcance ilimitado.
21 de noviembre
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.