ERT concede un plazo de 27 d¨ªas para que los acreedores lleguen a un acuerdo conjunto sobre el plan de viabilidad
Un nuevo aplazamiento, en este caso de 27 d¨ªas, hasta una fecha tope que se situar¨¢ en el d¨ªa 19 de diciembre, para recibir el 97% de las adhesiones de los acreedores bancarios de Uni¨®n Explosivos R¨ªo Tinto (ERT) al tercer plan de viabilidad, realizado por la propia compa?¨ªa, fue acordado ayer por el consejo de administraci¨®n de esta sociedad, cuya reuni¨®n concluy¨® pasadas las ocho de la noche. Se aleja as¨ª la presentaci¨®n de suspensi¨®n de pagos que estos d¨ªas hab¨ªan pronosticado algunos sectores.
La resoluci¨®n del consejo de administraci¨®n de ERT incluye dos novedades importantes. Por una parte, la aceptaci¨®n de la propuesta del steering committe en el sentido de que ser¨¢ suficiente la conformidad de los tenedores del 97% de la deuda financiera de esta compa?¨ªa, lo que impedir¨¢ que una minor¨ªa contin¨²e bloqueando el acuerdo final. La mayor¨ªa de los bancos acreedores asumir¨ªa en ese caso los compromisos de ese 3% disconforme. Adem¨¢s, el consejo de ERT ha establecido una fecha l¨ªmite, que en este caso parece ser definitiva.En los momentos actuales, y seg¨²n fuentes pr¨®ximas a la compa?¨ªa, los representantes del 95%, aproximadamente, de la deuda bancaria de ERT se han mostrado conformes con el plan de reestructuraci¨®n financiera.Jos¨¦ Mar¨ªa Escondrillas, presidente de ERT, declar¨® ayer tras la reuni¨®n: "He cumplido mi compromiso, ya que la empresa tendr¨¢ viabilidad tanto si se llega a un acuerdo amistoso con los acreedores como si es necesario recurrir a la no deseable salida de otras f¨®rmulas legales alternativas". Por su parte, el consejo de administraci¨®n decidi¨® constituirse en sesi¨®n. permanente hasta el final del plazo concedido, para poder tomar r¨¢pidamente cualquier decisi¨®n una vez que los acreedores hayan tomado su decisi¨®n definitiva.
Un porcentaje m¨ªnimo de las entidades acreedoras, que en conjunto aglutinan alrededor de un 5% de la deuda, no ha dado su conformidad expresa al ¨²ltimo proyecto de reestructuraci¨®n financiera de este holding, realizado por sus actuales gestores y conocido como Plan Escondrillas 3. Estas entidades, incluidas dentro del llamado sindicato alem¨¢n, mantienen unas, posiciones acreedoras m¨ªnimamente representativas en cuanto al volumen de los fondos prestados, y al parecer pretenden ser incluidas dentro del paquete de acreedores con tratamiento diferenciado, que encabeza la banca Worms, seg¨²n testimonios recogidos en medios financieros nacionales. Entre estos bancos figuran Bayerischern, Hypobank International, Deutsche Bank (alemanes), Al Saudi Bank y Cr¨¦dit Suisse.
Las reticencias de este peque?o grupo de bancos ven¨ªan fundamentalmente dadas por el hecho de que no aceptaban el sistema propuesto de liquidaci¨®n de activos, indiscriminado, para la aminoraci¨®n de deudas de la empresa, mientras que a continuaci¨®n expresaban su disconformidad con el concepto preferente de las ayudas dinerarias que aportaba la Administraci¨®n, y que se elevaban exactamente a 4.000 millones de pesetas. Por ¨²ltimo, se pon¨ªa de manifiesto -y en esto coincid¨ªan pr¨¢cticamente todas las entidades acreedoras- el cuestionamiento del concepto de "cr¨¦dito participativo" que se pretend¨ªa imponer en el citado2 plan a una parte sustancial de las deudas de esta sociedad, como f¨®rmula alternativa para la superaci¨®n de la actual crisis financiera, ya que no existe ninguna figura precedente en la jurisprudencia espa?ola.
La posibilidad de suspender pagos
Por su parte, los responsables de la compa?¨ªa, ante la peligrosa situaci¨®n que est¨¢n alcanzando sus fondos propios, paulatinamente mermados por el incremento de las cargas financieras, han advertido seriamente a sus acreedores bancarios de la posibilidad de proceder a una suspensi¨®n de pagos. Esta soluci¨®n, que fue cuidadosamente eludida por la banca acreedora al estallar la crisis de tesorer¨ªa de ERT hace ahora 14 meses, es uno de los factores que inquietan a los responsables de los riesgos industriales bancarios.Una medida de este tipo conllevar¨ªa en primer t¨¦rmino parar la generaci¨®n de intereses por las deudas acumuladas, y, previsiblemente, podr¨ªa terminar desembocando en un proceso de quiebra, con la consiguiente licitaci¨®n de los activos del grupo, proceso que posiblemente vena su fin dentro de muchos a?os. En definitiva, que los acreedores financieros de ERT ver¨ªan satisfechas, y s¨®lo parcialmente, sus demandas, en un plazo de tiempo bastante dilatado, y tras unos largos y costosos procesos judiciales.
En los ¨²ltimos meses, sobre todo desde que los acreedores cabeza de fila pudieron constatar que la Administraci¨®n no iba a aportar m¨¢s fondos que los inicialmente previstos, se lleg¨® a la conclusi¨®n de convencer a los peor dispuestos de la necesidad de firmar el acuerdo, para evitar "males mayores". En este sentido, tanto desde medios bancarios como desde instancias pr¨®ximas a la propia compa?¨ªa se ha venido poniendo de manifiesto el esfuerzo, desplegado por los acreedores que detentan un mayor volumen de deuda, para lograr un acuerdo antes de tener que asumir posturas m¨¢s trascendentales, como podr¨ªa ser la suspensi¨®n de pagos.
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