El ba¨²l de los tab¨²s

Al pronunciar la palabra "pesas" viene a la mente el tipo corpulento que con s¨®lo tensar un dedo hincha todo su cuerpo. ?Ser¨¢ ese el levantador? "No. No hay que confundir la halterofilia con el culturismo", dec¨ªa Jos¨¦ Gordillo, directivo de la escuela de entrenadores. "Los culturistas, que son esos hombres fortachones de las revistas, no aplican la fuerza par a nada. De acuerdo que tambi¨¦n hacen pesas, pero por pura est¨¦tica, puro narcisismo. El levantador no es un narciso."Tantos kilos encima suenan a peligrosos. Y m¨¢s cuando son chavales quienes los levantan. Adem¨¢s dicen que la gente no crece y que los que crecen engordan. Incluso hay quien piensa que esa tensi¨®n instant¨¢nea de tener la barra encima vuelve loca a la gente. "Al contrario", explicaba Gordillo. "Es uno de los deportes m¨¢s racionales que existen. Se trata de medir al gramo el esfuerzo de un individuo, para que se trabaje en relaci¨®n a sus posibilidades f¨ªsicas reales".

"De peligroso tiene poco", seg¨²n Manuel Cerd¨¢. "Seg¨²n las estad¨ªsticas, es de los deportes que menos lesiones tiene". Gordillo aportaba como prueba que en la mayor¨ªa de las cl¨ªnicas se usan las pesas para la recuperaci¨®n de traumatismos. "Respecto a la obesidad", continuaba Cerd¨¢, "es como en cualquier otro deporte. Yo peso 100 kilos. Estoy acostumbrado a quemar determinadas calor¨ªas para mantenerme ah¨ª. Si lo dejo, por m¨¢s que quiera no podr¨ªa quemar tanta calor¨ªa. Resultado, engordar¨ªa a¨²n m¨¢s".