El Banco de Espa?a ha notificado pliegos de cargo a todos los consejeros del grupo Catalana de 1977 a 1982
La investigaci¨®n oficial del Banco de Espa?a sobre la gesti¨®n de Banca Catalana est¨¢ cubriendo estos d¨ªas su pen¨²ltima fase. El expediente administrativo, concluido en el mes de octubre, se compone de 4.000 folios, lo que en medios financieros se considera voluminoso. A consecuencia del mismo, el instructor ha enviado en los ¨²ltimos diez d¨ªas sendos pliegos de cargos a todos los consejeros del grupo que hab¨ªan formado parte del consejo en los ejercicios comprendidos entre 1977 y 1982. Los cargos se refieren a irregularidades en principio administrativas, con una sola excepci¨®n en la que revisten mayor gravedad. Son ya varios los consejeros que han terminado y remitido su respectivo pliego de descargo. Junto a estas informaciones, recogidas de fuentes seguras . y contrastadas, otras fuentes han a?adido que la investigaci¨®n ha tenido que revisar las actuaciones del grupo retrotray¨¦ndose en algunos aspectos hasta los a?os 1968 y 1969.
Los pliegos de cargo est¨¢n realizados "muy t¨¦cnicamente", seg¨²n medios cercanos a los antiguos consejeros y "no contienen nada moralmente vergonzante", seg¨²n las mismas fuentes. La regla general tiene una excepci¨®n en que las irregularidades aludidas revisten mayor gravedad. Los pliegos han sido enviados a todos los que fueron miembros de los consejos del grupo en los cinco a?os anteriores a la toma de control del mismo por el Fondo de Garant¨ªa de Dep¨®sitos, esto es, de 1977 a 1982, a excepci¨®n, obviamente, del equipo que intent¨® el plan de viabilidad de verano de 1982. Se refieren en general al pago de extratipos, a doble contabilidad llevada (Caja B) y a la no declaraci¨®n del control sobre ciertas acciones del grupo bancario (Banco de Alicante y de Barcelona). T¨¦cnicamente las expresiones empleadas son las de "falta de veracidad" en los balances, "tenencia de acciones sin autorizaci¨®n" y "alteraci¨®n de cuentas de resultados".El plazo de respuesta, o presentaci¨®n de alegaciones de descargo a estos pliegos, es de ocho d¨ªas h¨¢biles desde su recepci¨®n Son varios los antiguos consejeros que ya han contestado, y otros lo har¨¢n en los pr¨®ximos d¨ªas. Entre los argumentos de respuesta figurar¨¢ probablemente la apreciaci¨®n de que las conductas investigadas eran comunes, en determinados momentos, a la mayor¨ªa de las firmas bancarias espa?olas.
El expediente, en junio
La tramitaci¨®n de este expediente administrativo se remonta a principios de este a?o, cuando de acuerdo con la Ley de Procedimiento Administrativo de 17 de julio de 1958, el Banco de Espa?a abri¨® una informaci¨®n reservada, una vez hab¨ªa acumulado datos suficientes sobre las causas y el desarrollo de la crisis de Banca Catalana y su grupo La autoridad monetaria apreci¨® la necesidad de incoar un expediente disciplinario, lo que hizo en junio de 1983.Poco antes el 19 de mayo, el ministro de Econom¨ªa y Hacienda, Miguel Boyer, -seg¨²n relat¨® ante la Comisi¨®n de Econom¨ªa del Congreso el 16 de junio- hab¨ªa solicitado al banco emisor un informe completo sobre la gesti¨®n del grupo. Boyer pidi¨® concretamente, "actuaci¨®n que hemos seguido en otros casos", los antecedentes sobre la evoluci¨®n de Catalana, y dijo ante el Congreso "que estos antecedentes" ser¨ªan "puestos a disposici¨®n de los fiscales, y por otra parte, el banco instruir¨¢ un expediente por las responsabilidades administrativas". El ministro indic¨® en aquella ocasi¨®n que "el Gobierno tiene indicios de irregularidades importantes de todo orden en este grupo bancario".
El expediente administrativo, conclu¨ªdo en octubre, reune 4.000 folios. En algunos de sus pasajes, retrotrae las investigaciones hasta 1968 y 1969, seg¨²n una fuente de la Administraci¨®n, para la que esta revisi¨®n hist¨®rica ha sido la causa fundamental de tan prolijo dossier. El instructor administrativo elabor¨® desde octubre los respectivos pliegos de cargo, que ha enviado recientemente a los antiguos consejeros. A este material se le unir¨¢n los pliegos de descargo que ¨¦stos presenten. La ¨²ltima fase del procedimiento consistir¨¢ en la decisi¨®n de aplicar o no sanciones.
Todo indica que, como ha hecho en la mayor¨ªa de casos de crisis bancarias a la finalizaci¨®n del expediente, el Banco de Espa?a decidir¨¢ tomar medidas administrativas contra varios de los antiguos responsables del grupo. Estas medidas suelen consistir en la exclusi¨®n de los consejeros del Registro de Bancos y Banqueros. Una vez concluido el procedimiento, que a¨²n puede durar cierto tiempo, se remitir¨¢ al Ministerio de Hacienda.
Seg¨²n ha reiterado el titular de Hacienda, Miguel Boyer, en varias ocasiones, el expediente, con sus anexos, ser¨¢ remitido a la fiscal¨ªa, para que el sistema judicial dilucide la existencia o inexistencia de responsabilidades penales. La mera remisi¨®n al fiscal nada prejuzga sobre el fondo de la cuesti¨®n. Por otra parte, la experiencia indica que la actitud de los jueces ha sido, en la mayor¨ªa de crisis bancarias en las que ha mediado acusaci¨®n fiscal, renuente a aceptarla, como ha sucedido recientemente en el caso del Banco de Levante: el sobreseimiento de las actuaciones -salvo en algunos casos m¨¢s escandalosos como el del Banco de Navarra, Banco de los Pirineos o Banco de Descuento- ha sido la t¨®nica general de los jueces espa?oles en esta materia.
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