Un 'Por Favor' de aniversario
La revista Por Favor, que surgi¨® en 1974, editar¨¢ un solo n¨²mero, el pr¨®ximo mes de marzo, para conmemorar los 10 a?os de su nacimiento. Cuando, en julio de 1978, el editor Jos¨¦ Manuel Lara anunci¨® el cierre temporal de la revista Por Favor, pocos de sus fieles lectores comprendieron que se trataba de un adi¨®s definitivo. Aduciendo falta de rentabilidad -lo cual era cierto- y neg¨¢ndose a tomar medidas de salvamento -las cuales eran plausibles-, Lara firmaba as¨ª la sentencia de muerte de un semanario que no siempre le hab¨ªa puesto f¨¢ciles las relaciones con sus amigos de la derecha. Lo curioso es que el brazo ejecutor de la decisi¨®n de Lara fue precisamente el hombre que, cuatro a?os atr¨¢s, hab¨ªa hecho posible la irresistible, apasionante e irrepetible experiencia Por Favor.
Ese hombre se llamaba Jos¨¦ Ilario y pertenec¨ªa a esa raza de editores que te iluminan la esperanza todos los d¨ªas... si has sido lo bastante listo como para que no te vac¨ªen previamente el bolsillo. Una de esas personas con m¨¢s ideas que cabellos y que son capaces, de vez en cuando, de convertirlas en realidad por, descabelladas que parezcan. Mont¨® Por Favor por el sistema de llamar por tel¨¦fono a los escritores y dibujantes m¨¢s importantes del momento: a Forges le convenci¨® diciendo que Perich, V¨¢zquez Montalb¨¢n y Juan Mars¨¦ estaban en el proyecto. Con los dem¨¢s hizo lo propio, y as¨ª fue como todos se metieron en la historia, sin saber que Ilario no guardaba ni un as en la manga. El gran ¨¦xito del promotor consisti¨® en a?adir a los mencionados gentes como Antonio ?lvarez Sol¨ªs, N¨²ria Pompeia, Vall¨¦s, Tom, Romeu y muchos otros talentos inclasificables.
Por Favor se convirti¨® en la primera revista de humor pol¨ªtico del pa¨ªs, para muchos el primer semanario pol¨ªtico de verdad. Ejerci¨® la cr¨ªtica sin dejar t¨ªtere con cabeza y ofreci¨® parcelas de expresi¨®n a creadores que hasta entonces hab¨ªan estado vetados en todos los medios de comunicaci¨®n. Sus portadas eran esperadas, comentadas, discutidas. Aport¨® nuevas corrientes de humor y sufri¨® varios cierres bajo todo tipo de ministros de Informaci¨®n.La entrada en la transici¨®n pol¨ªtica coincidi¨® con su propia madurez como revista, y ambas cosas contribuyeron a su declive: era como si Por Favor s¨®lo hubiera sido posible como loca aventura en un pa¨ªs locamente aventurado. Empresarialmente, de Ilario se pas¨® a Mar¨ªa Fernanda Nadal -entonces editora de Garbo y que auspici¨® la, posiblemente, m¨¢s placentera etapa de Por Favor-, y posteriormente a Jos¨¦ Manuel Lara, con quien se firm¨® un contrato que exclu¨ªa la cl¨¢usula de conciencia de la redacci¨®n, una concesi¨®n que a la larga se pagar¨ªa duramente.
El cierre temporal se convirti¨® en un si te he visto no me acuerdo, y, hoy, Por Favor, en ese n¨²mero ¨²nico conmemorativo que pronto saldr¨¢ a la venta, acudir¨¢ a una cita que incumpli¨® sin tener culpa en ello, s¨®lo por no saber, pese a lo mucho que V¨¢zquez Montalb¨¢n lo repet¨ªa, "que la vida no es como nos la esper¨¢bamos, sino como nos la tem¨ªamos", y que "no s¨®lo estamos perdidos, sino que estamos rodeados".
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