La corrosi¨®n en un Mirage F-1 se detect¨® cuando el avi¨®n ten¨ªa s¨®lo 10 horas de vuelo
La corrosi¨®n en la estructura central del reactor de uno de los aviones Mirage F-1 del Ej¨¦rcito del Aire espa?ol fue detectada en la base de Los Llanos (Albacete) en 1982, cuando el aparato no hab¨ªa realizado a¨²n diez horas de vuelo, seg¨²n fuentes cercanas a la citada base. Oficiales que pilotan estos aviones sostienen, sin embargo, que dicho, defecto, que afecta a una parte de los F-1 y cuyo origen se desconoce, no pone en peligro la seguridad de los vuelos. El Mando A¨¦reo de, Combate y la empresa Dassault-Breguet, fabricante de los aparatos, apoyan dicha teor¨ªa.
El avi¨®n citado integraba la ¨²ltima partida de 48 aparatos, comprada en 1978 a la empresa francesa de aviaci¨®n por 64.000 millones de pesetas, y de la que s¨®lo algunos aviones se vieron afectados por las corrosiones. Tras los primeros vuelos, en el curso de las primeras revisiones rutinarias hechas en la maestranza de Los Llanos, sede del Ala 14 del Mando A¨¦reo de Combate, se detect¨® de formal casual el peque?o defecto en la estructura central del reactor, concretamente en la tobera de salida del motor del aparato.Esta circunstancia, desvelada ahora por EL PAIS, y seg¨²n la cual cabe la posibilidad de que el defecto en el reactor del F-1 pueda provenir de f¨¢brica, no concuerda con lo tratado en una reuni¨®n celebrada con este motivo el 17 de diciembre de 1982 entre representantes del Estado Mayor del Ej¨¦rcito del Aire espa?ol y de la empresa francesa Dassault. En el encuentro, los t¨¦cnicos franceses hicieron un informe del problema y de las soluciones aplicadas en situaciones similares con aviones del los ej¨¦rcitos franc¨¦s y marroqu¨ª que igualmente hab¨ªan estado afectados por esta corrosi¨®n. En la reuni¨®n se lleg¨® a la conclusi¨®n de que se trataba de un incidente de causas desconocidas, aunque las medidas de reparaci¨®n hechas por los t¨¦cnicos franceses para detener el principio de corrosi¨®n en los aparatos afectados "han dado entera satisfacci¨®n al Ej¨¦rcito del Aire espa?ol".
Seg¨²n la empresa fabricante, ya en marzo de 1981 se propuso a las autoridades espa?olas modificaciones para los aviones estacionados en bases mar¨ªtimas, a !a vista de que en esa ¨¦poca la marca Dassault-Breguet hab¨ªa descubierto problemas de corrosi¨®n "en aviones extranjeros que hab¨ªan estado largo tiempo estacionados en bases cuyo entorno estaba muy cargado de salinidad". Y tambi¨¦n a la vista de que los problemas de corrosi¨®n afectaban no s¨®lo a la c¨¢mara del reactor del avi¨®n, sino a su recubrimiento exterior, tren delantero y diferentes partes del avi¨®n. "Pero la modificaci¨®n de los aparatos, que consist¨ªa, entre otras cosas, en aplicar una pintura en la c¨¢mara del reactor, no se pudo hacer en f¨¢brica porque los fuselajes de los aviones estaban ya ensamblados en raz¨®n del aviso demasiado tard¨ªo dado por el Ej¨¦rcito espa?ol".
6 aviones de 17
En concreto, seg¨²n los t¨¦cnicos franceses, la corrosi¨®n se produce por la influencia que la humedad de las zonas mar¨ªtimas ejerce sobre la aleaci¨®n de aluminio y titanio de la parte del reactor afectada. Esta explicaci¨®n de la corrosi¨®n como motivada por la alteraci¨®n de la aleaci¨®n, y que considerada normal por expertos aerona¨²ticos -en la jerga- se conoce como la fatiga del avi¨®n, tras un cierto n¨²mero de horas de vuelo-, no se corresponde con el hecho de que fuera detectada en un avi¨®n reci¨¦n entregado, aunque s¨ª es cierto que el resto de los aparatos afectados estaban basados en Canarias o hab¨ªan estado destinados largo tiempo en las islas. De los 17 primeros aviones revisados por los expertos franceses, seis presentaban principio de corrosi¨®n por picaduras de una profundidad entre 0.1 y 0.3 mil¨ªmetros.
La empresa Dassault reconoce, no obstante, que el hecho de que estos problemas de corrosi¨®n no afecten aparentemente m¨¢s que a los F-1 recientes condujo a que se examinase si los materiales de fabricaci¨®n hab¨ªan cambiado, y que los resultados fueron negativos. Indic¨® tambi¨¦n que una parte de la estructura del fuselaje se monta en la factor¨ªa que Construcciones Aeron¨¢uticas, SA (CASA) tiene en la base de San Pablo, en Sevilla.
La empresa Dassault realiz¨® de forma gratuita la revisi¨®n de todos los aparatos vendidos al Ej¨¦rcito espa?ol, estuviesen o no bajo garant¨ªa. En cualquier caso, desde que se conocieron los primeros problemas, en el ¨²ltimo trimestre de 1982, hasta que EL PAIS lo desvel¨® en octubre pasado, coincidiendo con el accidente de un F-1 en Motril, ambas partes guardaron silencio sobre el problema. Alianza Popular aprovech¨® esta circunstancia para preguntar al Gobierno. La respuesta del ministro de Defensa, Narc¨ªs Serra, restaba toda importancia al tema.
Expertos militares y pilotos espa?oles de Mirage F-1 consultados en los ¨²ltimos d¨ªas coincidieron con la opini¨®n de ambas partes en litigio, seg¨²n la cual no existe el menor riesgo ni para el aparato ni para el tripulante. Y negaron con ¨¦nfasis que los cuatro accidentes en los que se perdieron otros tantos Mirage F-1 tuvieran la m¨¢s m¨ªnima relaci¨®n con este problema de la corrosi¨®n.
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