"No habr¨¢ noche de los cuchillos largos

J. C"No habr¨¢ una noche de cuchillos largos si perdernos", dijo ayer Roberto d'Aubuisson. "Nosotros no usamos esos m¨¦todos". Frente al tono agresivo empledo por Duarte en la madrugada, el dirigente ultraderechista se visti¨® de moderaci¨®n.

Su discurso fue un llamamiento constante a la conciliaci¨®n con el Partido Dem¨®crata Cristiano (PDC), ya que, cualquiera que sea el ganador, la diferencia ser¨¢ muy escasa y necesitar¨¢ del otro partido para gobernar. Anticip¨® que no impugnar¨¢ el resultado global de las elecciones aunque pierda.

En medio de una confusa enumeraci¨®n de datos, D'Aubuisson mantuvo una desmayada esperanza de triunfo que m¨¢s parec¨ªa destinada a que sus militantes se hicieran a la idea de la derrota. Incluso a la hora de denunciar irregularidades se mostr¨® m¨¢s parco que sus adversarios.

Julio Rey Prendes, secretario general del PDC, denunci¨® la captura de un alcalde de su partido por el comandante militar de Moraz¨¢n, la detenci¨®n de todos sus interventores en Jucuapa por orden de un juez que m¨ªlita en la Alianza Republicana Nacionalista (ARENA) y las presiones ejercidas en torno a las mismas mesas de votac¨ª¨®n. Los dos contendientes aceptan, sin embargo, que la jornada discurri¨® por cauces de general normalidad.

El incidente m¨¢s importante fue el asalto de la guerrilla a la ciudad de San Miguel, en una operaci¨®n que pretend¨ªa sabotear las elecciones, ya que no fue atacada ninguna instalaci¨®n militar ni se moviliz¨® un n¨²mero de combatientes capaz de apoderarse de la localidad. El objetivo pareci¨® ser el edificio de Gobernaci¨®n, donde estaban almacenadas las papeletas.

El incidente m¨¢s importante fue el asalto de la guerrilla a la ciudad de San Miguel, en una operaci¨®n que pretend¨ªa sabotear las elecciones, ya que no fue atacada ninguna instalaci¨®n militar ni se moviliz¨® un n¨²mero de combatientes capaz de apoderarse de la localidad. El objetivo pareci¨® ser el edificio de Gobernaci¨®n, donde estaban almacenadas las papeletas.

Seg¨²n el comandante local, la guerrilla sufri¨® 15 bajas, por tres del Ej¨¦rcito. Los insurgentes aseguran que los muertos que dicen ser de sus filas son en realidad patrulleros civiles.