Magia y descaro de Alan Stivell
Con una excelente entrada, el Palacio de los Deportes de Madrid fue escenario de casi cinco horas de buena m¨²sica, que se inauguraron con el entusiasmo de un p¨²blico, jovenc¨ªsimo en su gran mayor¨ªa, que desde la salida a escena del grupo espa?ol Labanda se situ¨® frente al entarimado cantando y bailando.El primer dato sorprendente fue la magn¨ªfica acogida al grupo espa?ol, que con dos discos en el mercado y una larga experiencia en directo, demostr¨® un magn¨ªfico momento sonoro y contar con un p¨²blico fiel, que le aplaudi¨® desde la primera nota. Labanda hacen la m¨¢s c¨¦ltica de las m¨²sicas folk espa?olas, y tanto si tocan un tema propio como un ritmo folkl¨®rico vasco, castellano o gallego, lo hacen con la estructura y la instrumentaci¨®n del moderno foIk electrificado celta.
Labanda, Alan Stivell y Fairport Convention
Fiestas de San Isidro.Palacio de los Deportes, 12 de mayo, 10 noche.
Excelentes instrumentistas y con una arrolladora presencia en escena, cogieron la atenci¨®n del p¨²blico. Fueron unos buenos y dif¨ªciles teloneros, porque pusieron muy elevados los ¨¢nimos, pero tambi¨¦n muy alto el tabl¨®n para el siguiente actuante, que fue el bret¨®n Alan Stivell.
Con un p¨²blico en plena marcha, Alan Stivell plante¨® un recital sobrio, sin concesiones, que tropez¨® en un principio con algunos sectores de j¨®venes que pretend¨ªan seguir bailando sin m¨¢s.
Con una formaci¨®n limitada, Alan Stivell fue desarrollando un programa de una m¨¢gica sabidur¨ªa, de resonancias milenarias en ocasiones y de modernidad en otras, que mezcl¨® las danzas escocesas con la complejidad y sofisticaci¨®n del fragmento de la Sinfon¨ªa celta, del propio Stivell.
?l solo y tres excelentes y j¨®venes m¨²sicos lograron hacer bailar al p¨²blico con el ritmo interno, pocas veces expl¨ªcito, de su m¨²sica, pero tambi¨¦n consiguieron, hacerle escuchar en silencio los momentos m¨¢s l¨ªricos.
Fairport Convention
Fairport Convention son, como Stivell, otro nombre m¨ªtico en el campo del folk-rock mundial. Grupo que se ha deshecho y vuelto a rehacer desde su primera formaci¨®n, en 1967, han pasado por ¨¦l nombres, que luego han seguido su carrera creando otros grupos (Fotheringay, Albion Country Band, Ian Matthew's, Southern Confort, etc¨¦tera), hasta convertirse en leyenda.La formaci¨®n que trajeron re¨²ne a cuatro nombres fundamentales del grupo y del foIk-rock brit¨¢nico: el violinista Dave Swarbrick, que ten¨ªa aspecto de ex hippy juerguista y satisfecho; el guitarrista Simon Nicol, con una pajarita digna de profesor de escuela femenina; el bajista David Pegg, en su papel de padre de familia progre, y el bater¨ªa Dave Mattacks, que parec¨ªa un estudiante de secundaria.
Pues bien, ellos aportaron el descaro de llevar 15 a?os sobre escena, tocando lo que quieren -desde danzas vertiginosas hasta una antol¨®gica versi¨®n del cl¨¢sico John Barleycomb-, como quieren, divirti¨¦ndose y divirtiendo al personal con una maestr¨ªa que no admite pegas.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.