Recuerdos de chicle en Francia
La novelista francesa Fran?oise Sagan narraba ayer sus recuerdos del 6 de junio de 1944, cuando ella contaba poco m¨¢s de ocho a?os de edad: la liberaci¨®n le sorprendi¨® no lejos de Grenoble, donde descubri¨® a los "americanos liberadores, fant¨¢sticos, bronceados, rubios y casta?os", que la inundaron de regalos, es decir, de chewing gum y de mantequilla de cacahuetes. Tambi¨¦n recuerda que entre los chiquillos se organiz¨® "un siniestro intercambio": un casquillo de bala por dos paquetes de chicle, un tubo de leche condensada por un paquete de Lucky...Lo que Sagan cuenta como un recuerdo infantil, intencionado sin duda, otros comentaristas, 40 a?os despu¨¦s, lo interpretan aqu¨ª como la semilla de lo que hoy es un fruto maduro. Aquel d¨ªa, los americanos "iniciaron la exportaci¨®n de una cultura y de una manera de vivir que no eran m¨¢s que las suyas". Nadie lo lamenta, porque la liberaci¨®n goza en Francia de una leyenda casi dorada, de no ser por su dimensi¨®n tr¨¢gica, pero lo que s¨ª se lamenta es que Europa no supiese, quiz¨¢, digerir aquel nuevo man¨¢ y que hoy a¨²n no haya sabido autoliberarse respecto a los dos grandes que en 1944 rompieron para siempre el eje fascista.
Prueba de ello es la cita fallida que representa la celebraci¨®n del desembarco sin la RFA. Y esto, en el mismo mes en que la cumbre de los diez de la CEE, con la RFA como cabecera de cartel, va a reunirse para insuflar la fe comunitaria a 200 millones de ciudadanos.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
?Tienes una suscripci¨®n de empresa? Accede aqu¨ª para contratar m¨¢s cuentas.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.