Procesados un inspector de Catalana de Gas y dos industriales por la explosi¨®n en Barcelona

El titular del Juzgado de Instrucci¨®n n¨²mero 6 de Barcelona, C¨¦sar Plana, ha dictado auto de procesamiento contra los representantes legales de las compa?¨ªas Gas Instalaciones y Proyectos, SA (GIPSA), y Gasland y contra un inspector de la compa?¨ªa Catalana de Gas y Electricidad por un supuesto delito de imprudencia temeraria cometido en las instalaciones de gas de la calle de Crist¨®bal de Moura, n¨²mero 237, y Ro¨ªs de Corella, 2, en el barrio del Bes¨®s de Barcelona, seg¨²n consta en el auto facilitado a la agencia Europa Press por el abogado Miquel Baqu¨¦, defensor de la familia de uno de los dos fallecidos en la explosi¨®n que se registr¨® en ese lugar el pasado mes de marzo. Otras ocho personas resultaron heridas en el suceso.

Los procesados son Juan Monge Oliva, representante legal de GIPSA, una de las empresas subcontratadas por Catalana de Gas para efectuar las instalaciones de gas; Torcuato Jim¨¦nez L¨®pez, representante legal de Gasland y presidente de Amdigas, empresas tambi¨¦n instaladoras; y Jos¨¦ Canales Velasco, inspector de la compa?¨ªa Catalana de Gas y Electricidad, que fue quien revis¨® la instalaci¨®n de dicha red.A las 0.55 horas del s¨¢bado 3 de marzo, una gran explosi¨®n ocasion¨® el derrumbamiento de las cuatro viviendas unifamiliares situadas en la confluencia de las calles de Crist¨®bal de Moura, de Ro¨ªs de Corella y de Mesina. Dos personas resultaron muertas: Pascual. Pastor, de 70 a?os, domiciliado en el 237 de Crist¨®bal de Moura, y Esteban Molina, de 26, que se encontraba de visita en la vivienda n¨²mero 239 de la misma calle. Otros ocho vecinos sufrieron heridas, as¨ª como un bombero. Por otra parte, el magistrado C¨¦sar Plana fij¨® la responsabilidad civil en 150 millones de pesetas y declar¨® responsables civiles subsidiarios a Catalana de Gas, GIPSA, Gasland y Amdigas.

Imprudencia temeraria

El juez considera que los citados procesados incurrieron en un delito de imprudencia temeraria, ya que en el curso de la instalaci¨®n, seg¨²n el auto, '"los instaladores olvidaron toda norma precautoria y los m¨¢s elementales deberes de cautela", y a?ade que hubo "ausencia de previsi¨®n y falta de adopci¨®n de medidas adecuadas para evitar un resultado da?oso". Sin embargo, el juez ha decretado la libertad provisional sin fianza para los tres procesados, al considerar que se trata de un delito de imprudencia temeraria y que no es necesaria su estancia en prisi¨®n.En el mismo auto se indica que ha quedado suficientemente probado que la explosi¨®n "tuvo lugar por una fuga de gas producida concretamente en la vivienda n¨²mero 2 de la calle de Ro¨ªs de Corella, cuyo contador marcaba al ser instalado 19 metros c¨²bicos, marcando 44 metros c¨²bicos despu¨¦s de la explosi¨®n, y asimismo que tal vivienda no estaba ocupada, al extremo que tanto los instaladores como el inspector de la compa?¨ªa Catalana de Gas se tuvieron que valer por la llave que les facilit¨® una vecina para poder hacer las oportunas conexiones e inspecciones, todo lo cual deb¨ªan efectuar en presencia del usuario o persona autorizada a fin de recibir instrucciones".

El juez C¨¦sar Planas y el perito Jos¨¦ Villalba -el mismo que particip¨® en el sumario de la explosi¨®n de la calle del Capit¨¢n Arenas, en 1972- comparecieron ante la Prensa el pasado 7 de marzo para dar cuenta de un comunicado oficial sobre las investigaciones realizadas (v¨¦ase EL PAIS del 8 de marzo). En aquel informe ya se denunciaba "un elevad¨ªsimo consumo de gas natural en el contador de la casa n¨²mero 2 de la calle de Ro¨ªs de Corella, en el cual, partiendo de la base de que durante las ocho horas transcurridas desde la conexi¨®n hasta la del siniestro no hab¨ªa nadie en la vivienda, s¨®lo puede, ese consumo, interpretarse como una fuga de gas".