En 1983, interrumpieron en Londres su embarazo 20.000 espa?olas
En Espa?a se producen anualmente entre 300.000 y 400.000 abortos clandestinos. En el extranjero, el a?o pasado han abortado, s¨®lo en Londres, cerca de 20.000 espa?olas, en ambos casos seg¨²n estimaciones no oficiales elaboradas por distintas fuentes (organizaciones feministas, agencias de viajes, despachos de abogados).El fiscal general del Estado se?al¨® en su memoria del a?o 1974 que en Espa?a se practicaban anualmente 300.000 abortos, cifra que fue considerada exagerada por los sectores conservadores. De esas interrupciones del embarazo, 20.000 corresponden a mujeres casadas, seg¨²n las estimaciones no oficiales.
Por otra parte, se calcula que 50.000 prostitutas recurren a este m¨¦todo una o dos veces al a?o. Son las j¨®venes solteras de entre 14 y 30 a?os las que m¨¢s se someten a pr¨¢cticas abortivas. Londres, Amsterdam, Par¨ªs y Hamburgo constituyen los centros del extranjero m¨¢s visitados por las espa?olas para este tipo de operaciones.
Entre los principales motivos del aborto, tanto en Espa?a como en el extranjero, figuran, por orden de importancia, las dificultades econ¨®micas (aproximadamente un 23% de las que abortan), los problemas familiares (un 17,7%), la violaci¨®n y otros (un 12%), el miedo a malformaciones en el feto (un 8,7%), el n¨²mero de hijos (el 8,4%), indicaciones m¨¦dicas (el 8,1 %), estado civil de solteras o separadas (7%) y malas relaciones conyugales (4,8%).
La aprobaci¨®n, el mes de octubre del a?o pasado, por el Congreso de los Diputados de una ley de reforma del Codigo Penal que recog¨ªa la despenalizaci¨®n parcial de aborto en tres casos no ha supuesto, hasta ahora, un cambio real de la situaci¨®n en Espa?a, puesto que todav¨ªa no ha entrado en vigor, al estar pendiente un recurso previo de inconstitucionalidad, presentado ante el Tribunal Constitucional por el Grupo Parlamentario Popular.
La ley despenaliza el aborto s¨®lo en los supuestos de malformaci¨®n f¨ªsica del feto, de violaci¨®n, o de riesgo para la salud de la madre.
Con motivo de la discusi¨®n de esta ley se desarrollaron fuertes campa?as en el Parlamento y en la calle en favor y en contra del aborto. Especialmente, se opusieron al texto Alianza Popular y las fuerzas m¨¢s corporativistas y de derechas de los profesionales de la sanidad. Los obispos espa?oles, dentro de su oposici¨®n a esta ley, fueron m¨¢s moderados en la cr¨ªtica. Movimientos
Paralelamente, se ha producido un debate social, centrado en dos casos que tuvieron fuertes repercusiones: el juicio en Bilbao contra 11 personas -la Audiencia Provincial pen¨® a dos y el Supremo conden¨® luego a otras cinco y el proceso contra el m¨¦dico valenciano Pedro Enguix (actualmente, a la espera de la vista oral), quien reconoci¨® que practicaba entre dos y tres abortos semanales durante los ¨²ltimos cinco a?os.
El aborto es una pr¨¢ctica admitida en los pa¨ªses m¨¢s desarrollados. En la mayor parte de los pa¨ªses europeos est¨¢ regulada la interrupci¨®n voluntaria del embarazo en diferentes modalidades y plazos. S¨®lo dos pa¨ªses carecen de esta regulaci¨®n: Irlanda y B¨¦lgica pero en ellos existe tolerancia en la pr¨¢ctica.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.