Fracasa la sesi¨®n negociadora entre Espa?a y el Mercado Com¨²n sobre los cap¨ªtulos industrial y agr¨ªcola
Espa?a, la Comisi¨®n Europea y la presidencia irlandesa de la CEE fracasaron ayer en las negociaciones al ver limitados sus puntos de coincidencia al establecimiento de otro "preacuerdo" en el que se establece el principio de per¨ªodos transitorios de siete a?os para la industria y para la agricultura. Este aspecto, que en todo caso habr¨¢n de ratificar todos los Estados miembros no significa, seg¨²n el ministro espa?ol de Asuntos Exteriores que la sesi¨®n de negociaci¨®n haya sido in¨²til. "Hay desbloqueo pol¨ªtico pero queda todo lo dem¨¢s", se?al¨® Fernando Mor¨¢n, quien ahora considera necesaria una gira de los ministros econ¨®micos y de ¨¦l mismo por las capitales europeas para el mes de septiembre, para ablandar las posturas de los diez.
La Comunidad Econ¨®mica Europea hab¨ªa rechazo ayer de plano las propuestas formales que hab¨ªa presentado Espa?a en materia agr¨ªcola y de desmantelamiento de los aranceles industriales. "Estaremos horas, horas y horas defendiendo los criterios esenciales para los intereses espa?oles", se?al¨® Manuel Mar¨ªn, secretario de Estado para las Relaciones con la CEE, en el curso de las cinco horas que dur¨® la sesi¨®n de negociaci¨®n.Mar¨ªn estaba indignado. En efecto, el jefe de la delegaci¨®n espa?ola, Fernando Mor¨¢n, lleg¨® puntual a la cita de las 11.00 de la ma?ana. Tres horas tuvo que esperar en la antesala, antes de comenzar la sesi¨®n de negociaci¨®n acudiendo a bocadillos para su almuerzo. "Intento de desgaste psicol¨®gico", se?al¨® un negociador espa?ol.
Contactos t¨¦cnicos
La sesi¨®n plenaria con los 10 ministros de Asuntos Exteriores fue breve pues estaban alejadas las posiciones. As¨ª, se volvi¨® al sistema triangular e informal de negociaci¨®n para intentar lograr un acuerdo tambi¨¦n informal sobre agricultura e industria. El texto final poco aporta de nuevo en las cosas concretas. Mor¨¢n reconoci¨® que la presidencia irlandesa de la CEE no pudo cambiar de posiciones pues no ten¨ªa mandato de los otros diez para ello. El texto acordado ser¨¢ ahora remitido a los embajadores de los diez y luego al Consejo de Ministro de la CEE. La cita es pues para septiembre aunque habr¨¢ en la segunda quincena del mes de agosto contactos t¨¦cnicos.En este texto la Comunidad insiste en que Espa?a le suministre los datos de su reestructuraci¨®n sider¨²rgica. Espa?a se ha comprometido para hacer un esfuerzo y cumplir esta petici¨®n en septiembre. Espa?a present¨®, como se se?alaba ayer, un documento sobre agricultura y otro sobre industria que poco antes de empezar la sesi¨®n pidi¨® la CEE a los espa?oles que formalmente lo retirasen, considerando que era un paso atr¨¢s respecto al preacuerdo logrado el 20 de junio en Luxemburgo entre Espa?a y la entonces presidencia francesa, preacuerdo que ha dado lugar a interpretaciones divergentes.
En el documento industrial, Espa?a ped¨ªa un desarme arancelario de siete a?os, m¨¢s lento al principio que al final. La CEE ha aceptado los siete a?os pero no hay acuerdo aun sobre lo m¨¢s importante, es decir el ritmo del desarme. Espa?a adem¨¢s consideraba que los productos con elevados aranceles no merec¨ªan un desmantelamiento m¨¢s r¨¢pido que los dem¨¢s. La CEE acus¨® a Espa?a de desdecirse en este terreno preciso del preacuerdo de Luxemburgo. A esto Espa?a replic¨® sacando sobre la mesa los altos aranceles que impone la CEE a la importaci¨®n de algunos productos espa?oles, especialmente las conservas.
Peticiones espa?olas
En materia agr¨ªcola, Espa?a pidi¨® siete a?os para la aproximaci¨®n de precios y ayudas y 10 a?os para un control especial del comercio bilateral y para la cl¨¢usula de salvaguarda.Espa?a tiene un sistema de contingentes a la importaci¨®n de productos continentales en los que es poco competitiva. En cuanto a las frutas y hortalizas, Espa?a acepta el sistema de "verificaci¨®n de la convergencia", siempre que cuatro a?os fuera un m¨¢ximo para la primera fase y no un plazo fijo.
Espa?a pidi¨® adem¨¢s que la CEE definiera cu¨¢les son los productos hortofrut¨ªcolas sensibles para la Comunidad, considerando que los c¨ªtricos no deben entrar en el sistema de fases para la transici¨®n. Espa?a pide adem¨¢s que se supriman las discriminaciones arancelarias a los productos espa?oles que entran en la CEE, frente a pa¨ªses como Israel o Marruecos.
Todas estas propuestas fueron rechazadas por la CEE. "El ajuste de posiciones va a ser dif¨ªcil", declar¨® Mor¨¢n, para el cual "entramos en lo concreto. Pero en el tema agr¨ªcola "no fue posible ir m¨¢s all¨¢ de los principios establecidos en Luxemburgo a causa de las posiciones muy duras por parte de la comunidad, faltando adem¨¢s las propuestas comunitarias en materia de vino y de aceite de oliva".
En cuanto a los temas pendientes en el cap¨ªtulo de asuntos sociales la CEE no quiso entrar en el tema, a pesar, como en los agrios de que el comisario Lorenzo Natali habr¨ªa prometido defender las tesis espa?olas. Los espa?oles se sintieron desenga?ados.
La CEE present¨® a Espa?a una declaraci¨®n sobre el cap¨ªtulo institucional en el que se ofrece a Espa?a un estatuto de pa¨ªs intermedio. Mor¨¢n declar¨® que Espa?a podr¨ªa obtener algo m¨¢s de los 58 diputados del Parlamento Europeo que se le ofrecen, aunque consider¨® m¨¢s dif¨ªcil conseguir m¨¢s de los ocho votos que se le atribuye a Espa?a en el Consejo de Ministros de la CEE (los pa¨ªses grandes disponen de 10 votos y los medios de cinco), pero esta declaraci¨®n comunitaria carec¨ªa de una posici¨®n sobre lo m¨¢s importante: la ponderaci¨®n de los votos para las decisiones por mayor¨ªa en el Consejo. B¨¦lgica quiere un nivel menor que los otros nueve. La CEE ofrece asimismo participar en el Banco Europeo de Inversiones con un capital equivalente a 140.000 millones de pesetas, con un desembolso inicial de un 10%. El ingreso de la peseta en el ECU (unidad de cuenta europea) queda, en principio, relegado a 1990.
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