El s¨ªndrome cretense
La entrevista de Santa Pon?a entre el presidente del Gobierno espa?ol, Felipe Gonz¨¢lez, y el l¨ªder libio, Muaminar el Gaddafi, parece calcada de la que el controvertido coronel mantuvo el mes pasado en la isla griega de Creta con el presidente franc¨¦s, Fran?ois Mitterrand. Ambas se produjeron por sorpresa y ambas contaron con un mediador: el austriaco Bruno Kireisky, en el primer caso, y el primer ministro griego, Andreas Papandreu, en el segundo. Los dos, socialistas.Gacidafi persegu¨ªa lo mismo en los dos encuentros: ampliar las fronteras de las relaciones exteriores, romper el bloqueo exterior al que le ha sometido su radicalismo y entrar en Occidente de la mano de los socialistas europeos. Parece claro lo que Mitterrand buscaba en la reuni¨®n de Creta: comprometer personalmente al l¨ªder libio en el acuerdo de retirada simult¨¢nea de las tropas de ambos pa¨ªses de Chad, en el que permanec¨ªan desde hac¨ªa m¨¢s de un a?o.
Lo que todav¨ªa no ha sido aclarado es el objetivo de Felipe Gonz¨¢lez en la entrevista de Santa Ponga. Por lo explicado hasta ahora, el presidente del Gobierno espa?ol quer¨ªa simplemente cambiar impresiones con Gacidafi sobre la situaci¨®n en el norte de ?frica.
Lo que puede desprenderse de las declaraciones de un alto funcionario del Gobierno espa?ol, es que lo que se quer¨ªa era sustituir la comprometedora diplomacia tradicional -recibir a Gaddafl en Madrid en una visita oficial anunciada con antelaci¨®n- por la llamada diplomacia r¨¢pida y directa: recibirle misteriosamente, dando una sensaci¨®n de precipitaci¨®n y de urgencia que probablemente cre¨® expectativas falsas.
Aunque la posibilidad de una entrevista entre Felipe Gonz¨¢lez y Muammar el Gaddafi estaba siendo estudiada desde este verano, la reuni¨®n de Creta pudo haber abierto los ojos del presidente del Gobierno espa?ol y, por tanto, el camino de la reuni¨®n de Santa Pon?a.
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