400 guardias civiles buscan a los tres reclusos que se fugaron de la c¨¢rcel de Ja¨¦n
Veinticuatro horas despu¨¦s de que tres reclusos considerados como muy peligrosos se fugaran a las cinco de la tarde del martes de la c¨¢rcel de Ja¨¦n (ver EL PAIS de ayer), las fuerzas de seguridad del Estado no hab¨ªan procedido a¨²n a su detenci¨®n. Cuatrocientos guardias civiles se encuentran en permanente estado de alerta, al igual que la.s fuerzas de seguridad de Granada, adonde presumiblemente se dirigieron los reclusos.El Gobierno Civil de Ja¨¦n facilit¨® a primera hora de la noche del martes la identidad de los fugitivos. Se trata de Alejandro Moya Mart¨ªnez, de 22 a?os, natural de ?beda (Ja¨¦n), interno en situaci¨®n de preventivo desde enero pasado por diversos atracos. Antonio Fuentes Para¨ªso, de 25 a?os, natural de Madrid, en prisi¨®n preventiva desde agosto de 1984 por la comisi¨®n de otros tantos atracos. Juan Francisco Garc¨ªa Parra, de 24 a?os, natural de ¨²beda, penado con diez a?os de prisi¨®n por atraco a mano armada y tenencia il¨ªcitade armas.
Los tres reclusos, en una acci¨®n fulgurante, iniciaron la fuga minutos antes de las cinco de la tarde del martes, cuando se abren las celdas para la comunicaci¨®n con los familiares. Con una pistola, cuya procedencia no se ha determinado a¨²n, y tres navajas de fabricaci¨®n casera, retuvieron primero y encerraron despu¨¦s en una celda a cuatro funcionarios de servicio. En pocos segundos tomaron como reh¨¦n al jefe de servicio, Luis Castell¨®n.
Tras conseguir las llaves de las rejas que separan el patio central de los internos de la puerta de entrada a la prisi¨®n, los reclusos, que aparentaban recibir una visita, sustrajeron un subfusil al guardia de vigilancia. Una vez franqueada la puerta, soltaron el reh¨¦n y a punta de pistola secuestraron un veh¨ªculo que estaba detenido en un sem¨¢foro a diez metros de la prisi¨®n.
Seg¨²n la versi¨®n oficial del Gobierno Civil, el veh¨ªculo, abandonado, se encontr¨® horas despu¨¦s en la carretera de Ja¨¦n a Granada, en el lugar conocido como Puente Nuevo, a cinco kil¨®metros de la capital. Sin embargo, esta versi¨®n no menciona la sustraci¨®n de una metralleta, hecho confirmado por el director de la prisi¨®n y un funcionario.
Por otro lado, ayer se pudo saber que durante 1984 pasaron al menos una noche en la c¨¢rcel de Ja¨¦n 4.000 reclusos, de tr¨¢nsito entre los centros penitenciarios del norte y el el Ptierto de Santa Mar¨ªa, fundamentalmente. No era esta, en cambio, la situaci¨®n de los fugados. La espectacular fuga ha puesto de manifiesto de nuevo una vieja aspiraci¨®n aun no materializada: el traslado de la c¨¢rcel, hoy situada en el mismo centro de la capital.
El director del centro, Fernando Sanz, insisti¨® ayer en la urgente necesidad de que se inicien las obras del nuevo centro penitenciario, cuyo proyecto ya fue aprobado en 1984 por la Direcci¨®n General de Instituciones Penitenciarias. El mismo estar¨¢, seg¨²n ese proyecto, a nueve kil¨®metros de la capital y contar¨¢ con los m¨¢s sofisticados equipos de seguridad, tanto interior como exterior.
El centro costar¨¢ unos 2.000 millones de pesetas, con una capacidad para 350 reclusos. 120 m¨¢s de los que ahora se encuentran hacinados.
Para Fernando Sanz, el principal problema de la prisi¨®n es, adem¨¢s de su ubicaci¨®n, el de su hacinamiento. "Al aumentar la poblaci¨®n reclusa", dice, "aumentan las tensiones. Yo he protestado insistentemente ante la direcci¨®n general por el progresivo hacinamiento de este centro. Sin embargo, me convencen cuando me muestran que muchas prisiones de segundo grado est¨¢n en obras".
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