Fabrilo y Granero, toreros valencianos

En el ¨²ltimo cuarto del pasado siglo tuvo Valencia una figura muy popular, querida y admirada, en Julio Aparici Pascual, conocido en el mundo taurino con el apodo de Fabrilo.Nacido en el entonces poblado de Ruzafa el d¨ªa 1 de noviembre de 1867, transcurri¨® su infanc¨ªa en el molino que sus padres pose¨ªan en el entonces apartado lugar de la ciudad, y molinero fue tambi¨¦n su primer oficio.

En la plaza de toros de Valencia hizo su presentaci¨®n como novillero el d¨ªa 3 de octubre de 1885, causando notoria impresi¨®n por su serenidad y temerario valor. Despu¨¦s triunf¨® en Sevilla, y m¨¢s tarde, en Madrid, donde hace su presentaci¨®n el d¨ªa 27 de febrero de 1887, cuando no hab¨ªa cumplido los 20 a?os.

El d¨ªa 30 de mayo de 1889 Fabrilo confirm¨® la altemativa, en Madrid, obteniendo nuevo ¨¦xito. Y as¨ª actu¨® triunfalmente Fabrilo hasta su tr¨¢gica cogida en la plaza de toros de Valencia. Fue la tarde del 27 de mayo de 1897, cuando el toro Leng¨¹eto, de la ganader¨ªa de Jos¨¦ Mar¨ªa C¨¢mara, al banderillear Fabrilo, fue cogido por la res, que le produjo una herida de 15 cent¨ªmetros de extensi¨®n, grav¨ªsima, en la ingle, a consecuencia de la cual falleci¨® dos d¨ªas despu¨¦s.

Otro gran torero que alcanz¨® fama y prestigio fue Manuel Granero Valls, nacido el d¨ªa 4 de abril de 1902 en la ciudad de Valencia.

Tan intensamente como su pasi¨®n taurina sinti¨® Manuel Granero la de la m¨²sica, nacidas ambas en los primeros a?os y desarrolladas por igual en el temperamento sensible del gran torero valenciano, matricul¨¢ndose en las clases del Conservatorio de M¨²sica de Valencia.

Con los estudios de viol¨ªn alternaba Manuel Granero su vocaci¨®n taurina. Una tarde de junio de 1916, Manolito Granero asiste a una nov¨ªllada en la plaza de toros de Valencia. Y salta al ruedo, avanzando decidido hacia la res, que ha Visto al muchacho y se lanza hacia ¨¦l como una flecha. La gente se estremece de angustia ante la inminencia de la tragedia; pero una exclamaci¨®n de asombro sigue a la inaudita proeza. Y el p¨²blico, enardecido, con general aplauso, aclama al peque?o h¨¦roe... Despu¨¦s vuelve a actuar en el ruedo valenciano, pero :no como espont¨¢neo, sino como componente del espect¨¢culo., Era el 3 de septiembre de aquel a?o de 1916. El muchacho entusiasm¨® al p¨²blico, que pidi¨® -y el presidente accedi¨®- las dos orejas y el rabo para el peque?o torero, que continu¨® sus ¨¦xitos taurinos, alcanzando fama y prestigio. Su carrera fue r¨¢pida, tomando la alternativa de manos de Rafael G¨®mez, El Gallo, el 23 de septiembre de 1920, en Sevilla, continuando sus ¨¦xitos en cuantas plazas actuaba hasta la tr¨¢gica tarde del 7 de mayo de 1922 en la plaza de toros madrile?a, en la que el quinto toro -Pocapena-, verag¨¹e?o, grande, mansurr¨®n, incierto y bronco, acab¨® con su vida.