La conferencia nacional del PCE consum¨® la crisis m¨¢s grave en la historia de la organizaci¨®n comunista

Santiago Carrillo, ex secretario general del PCE, pasar¨¢, por primera vez en sus 49 a?os como miembro del partido, a ser militante de base, una vez que el comit¨¦ central comunista decidi¨® sustituirle como portavoz parlamentario, y excluirle de los comit¨¦s ejecutivo y central si en el plazo de 15 d¨ªas no rectifica sus posiciones, que implican "crear otro partido dentro del PCE". Carrillo dijo ayer a EL PA?S que ni rectificar¨¢ ni aceptar¨¢ su autoexclusi¨®n de los comit¨¦s ejecutivo y central. La conferencia nacional del PCE ratific¨® ayer, en su sesi¨®n de clausura y sin ning¨²n voto en contra, las medidas propuestas contra Carrillo y 18 de sus seguidores, consum¨¢ndose as¨ª la que probablemente sea la m¨¢s grave de las crisis internas sufridas por el PCE en toda su historia.

Aunque s¨®lo ahora comenzar¨¢n a evaluarse los da?os del cisma, el secretario general, Gerardo Iglesias, concluy¨® ayer la conferencia nacional con un llamamiento de esperanza para un partido en el que "se ha acabado el monolitismo". "Este partido remonta el vuelo", dijo."Es evidente que no nos arrepentimos y que seguimos dentro del partido", respondi¨® ayer Carrillo, tras haber conocido la resoluci¨®n de la conferencia nacional que le destitu¨ªa como portavoz comunista en el Congreso de los Diputados y, si no rectifica en el plazo de dos semanas, tambi¨¦n como miembro de los comit¨¦s ejecutivo y central. "Como no nos autoexcluimos, lo van a tener muy duro", agreg¨®, refiri¨¦ndose a la direcci¨®n nacional. Puntualiz¨® que acepta la destituci¨®n como portavoz parlamentario -"aunque es un disparate y un error que afecta a las instituciones parlamentarias, porque yo no me creo un diputado m¨¢s"-, pero no aceptar¨¢ "la autoexclusi¨®n del comit¨¦ central". "Si no me convocan a las reuniones, recurrir¨¦", dijo.

Seg¨²n Carrillo, "Gerardo Iglesias est¨¢ haciendo los oficios de verdugo. Pero para lo que ellos quieren, que es hacer otro partido, Gerardo no sirve, necesitan otra cabeza; Gerardo no es la cabeza de esto, sino Sartorius, aunque ahora surge tambi¨¦n Anguita. La lucha por el poder entre ellos va a empezar pronto, una vez que consideren que estamos autoexcluidos". Para el ex secretario general, la palabra autoexclusi¨®n -que, seg¨²n ¨¦l, no existe en el diccionar¨ªo- significa, en realidad, una expulsi¨®n: la resoluci¨®n de la conferencia nacional "reviste una gran gravedad, pues se trata de la expulsi¨®n, de una tacada, de 18 miembros de la direcci¨®n del partido".

Las palabras de Carrillo indican con claridad que es pr¨¢cticamente imposible que ¨¦l y sus seguidores rectifiquen sus posiciones m¨¢s recientes, que incluyen la formaci¨®n de una Plataforma de Unidad Comunista, enfrentada a la propuesta gerardista de llegar a una convergencia electoral con otras formaciones y movimientos de izquierda. Por ello, las mayores probabilidades apuntan a que los 18 miembros del comit¨¦ central que apoyaron el s¨¢bado a Carrillo en su conferencia de prensa "escisionista" -seg¨²n valoraci¨®n de los dirigentes del PCE- perder¨¢n sus cargos por haberse "autoexcluido", siempre seg¨²n la terminolog¨ªa utilizada en la sede central comunista.

Entre quienes, caso de no proceder a una rectificaci¨®n "expl¨ªcita e individual", ser¨¢n sancionados se encuentran el propio hijo de Carrillo -Santiago-, dirigentes de CC OO -Juli¨¢n Ariza-, los m¨¢ximos l¨ªderes de los comit¨¦s regionales de Madrid y VaLlencia -Adolfo Pi?edo, Juan Villalba-, as¨ª como los principales dirigentes de Galicia -Julio P¨¦rez de la Fuente-, del Pa¨ªs Vasco -Ignacio Latierro, Tom¨¢s Tueros- y de algunas provincias, como Valladolid.

Tambi¨¦n perder¨¢n su puesto en el comit¨¦ central el teniente de alcalde del Ayuntamiento de Madrid, Adolfo Pastor, y el portavoz comunista en la Asamblea auton¨®mica madrile?a, Lorenzo Hern¨¢ndez, los dos ¨²nicos cargos p¨²blicos comunistas en las instituciones de la capital.

Carrillo y Pi?edo perder¨¢n, adem¨¢s, su condici¨®n de miembros del comit¨¦ ejecutivo, y no se descarta que el ex secretario general se vea tambi¨¦n despose¨ªdo de algunos privilegios, como el autom¨®vil del partido, a lo que podr¨ªa responder dejando de entregar al PCE gran parte de su sueldo como diputado.

En otro orden de cosas, ayer comenzaron a llegar a las redacciones de varios medios informativos telegramas de solidaridad con las posiciones carrillistas y de rechazo a la pol¨ªtica de convergencia de izquierda. El texto de los telegramas era pr¨¢cticamente id¨¦ntico, pese a la diversidad de procedencias de los mismos.

Por su parte, Gerardo Iglesias neg¨® ayer que las medidas adoptadas por la conferencia nacional a propuesta del comit¨¦ central sean una expulsi¨®n, aunque admiti¨® que, si no se produce una rectificaci¨®n en el plazo previsto, "el comit¨¦ central tomar¨¢. nota de que se han colocado fuera de los ¨®rganos de direcci¨®n. No se puede ser dirigente de un partido estando en otro partido". El secretario general endureci¨® ayer, notablemente el tono para referirse a su antecesor: "A Santiago le interesa mucho hablar de expulsiones; se hace la v¨ªctima para buscar solidaridad. Su comportamiento raya en lo inc¨ªvico".

Iglesias dijo en su discurso final que "hay que romper definitivamente con un estilo de trabajo; hoy hay que proponer, m¨¢s que agitar". "Se acab¨® el partido monol¨ªtico, se acab¨® el jefe como ¨²nico exponente de tina opini¨®n; esto empieza a ser otro partido, en el que hay que estar pendiente, para opinar algo, de le, que ha dicho el secretariado o el secretario general", agreg¨® Gerardo Iglesias.