Los peque?os inversores las prefieren rubias
El cent¨¦n (reinados de Felipe III y Felipe IV) pasa por ser la mayor pieza de oro acu?ada en Espa?a. Su peso de 335 gramos y sus 7,5 cent¨ªmetros de di¨¢metro as¨ª parecen demostrarlo. Pero tambi¨¦n su precio es de los m¨¢s altos: unos 50 millones de pesetas. Claro que siempre hablando en t¨¦rminos te¨®ricos, porque nunca se ha realizado una transacci¨®n de este tipo en el mercado nacional.Estas cifras, de todas formas, se encuentran fuera del alcance de los inversores o coleccionistas peque?os y medianos, que centran todos sus esfuerzos en las monedas del primer centenario, es decir, aquellas emitidas desde 1870. Tambi¨¦n en ellas es donde se han dado revalorizaciones muy significativas, sobre todo porque piezas de un valor concreto, que han pasado en su d¨ªa por las propias manos de los inversores, ven ahora multiplicado su precio. A pesar de ello, las emitidas en la etapa de Franco sufren un fuerte retroceso.
Ordago con la chica
Los cat¨¢logos s¨®lo son una orientaci¨®n, y al final el precio definitivo suele fijarse personalmente. Pero as¨ª y todo, una perra gorda de 1940 vale 3.000 pesetas (SC, sin circular), aunque alguna variante del mismo a?o llega hasta las 7.000. En el peor de los casos, una moneda de este tipo, calidad MBC de 1953, cuesta 75 pesetas. Algo similar sucede con la perra chica de cinco c¨¦ntimos: la emisi¨®n de 1940 alcanza las 3.500 pesetas, con calidad SC.
Los 50 c¨¦ntimos agujereados oscilan entre 3.000 y 25 pesetas, seg¨²n a?o de emisi¨®n, mientras que la moneda de 25 c¨¦ntimos, tambi¨¦n con agujero central, acu?ada en Viena (1937) en plena euforia nacionalsocialista, s¨®lo se cotiza a 500 pesetas.
Mayor sorpresa se produce al comprobar las revalorizaciones de las monedas de peseta -las populares rubias- acu?adas en el per¨ªodo franquista: la que se emiti¨® en 1944 y que tiene en el anverso el n¨²mero 1 se cotiza a 3.000 pesetas, mientras que, ya con el rostro de Franco, la emisi¨®n de 1948 alcanza las 250.000 pesetas. Pero, atenci¨®n a los a?os, ya que aqu¨ª los precios oscilan mucho y es necesario observar con una lupa las estrellitas que se encuentran en el reverso y donde figuran las dos ¨²ltimas cifras del a?o de emisi¨®n.
Las monedas de 2,50 pesetas oscilan entre las 50.000 y las 400 pesetas (siempre calidad SC), pero las piezas de cinco pesetas de n¨ªquel pueden llegar a las 750.000 pesetas si se trata de la emisi¨®n de 1952.
Entre los duros de Franco que a¨²n se manejan cotidianamente destaca la emisi¨®n de 1963, que vale 8.000 pesetas (SC), aunque las piezas de otras emisiones y que han circulado algo no cotizan por encima de su valor facial.
Las monedas de 25 pesetas llegan hasta las 10.000 pesetas (calidad SC, de 1961), mientras que las de 50 pesetas pueden situarse hasta en 55.000 pesetas (SC, 1968). Aquellas personas que atesoraron monedas de plata de 100 pesetas pueden comprobar que, en cat¨¢logo, sus precios oscilan entre las 1.100 (1966 y 1968) y las 15.000 pesetas (1969).
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