El arte, por encima de la edad

Victoria de los ?ngeles volvi¨® a actuar en Madrid, tras m¨¢s de cuatro a?os de ausencia, ante un p¨²blico que colm¨® el Teatro Real (v¨¦ase informaci¨®n en la segunda edici¨®n de EL PAIS de ayer). No se puede juzgar a las figuras que han ocupado los m¨¢ximos lugares de la l¨ªrica mundial, y que una vez cada cinco a?os nos vuelven a deleitar con lo poco o mucho que conservan de aquel arte, con el mismo criterio que a un divo de nuestros d¨ªas. As¨ª tambi¨¦n opin¨® el p¨²blico que recibi¨® a la cantante con, un minuto largo de aplausos que destilaban afecto.La inteligencia de la artista se manifiesta, adem¨¢s de en el canto, en la selecci¨®n de un repertorio que, perfectamente adecuado a sus posibilidades, re¨²ne belleza y variedad. Los Cinco tieder de Mar¨ªa Estuardo de Schumann o las piezas de Chop¨ªn y Mendelssohn alternaron con otros m¨¢s conocidos de Schubert u Obradors como la Senerata y El Vito, respectivamente. A todo lo ancho y largo del programa, Victoria de los Angeles record¨® su grandeza a los que la conocieron hace 25 a?os y ense?¨® a los que no tuvieron aquella suerte c¨®mo se puede hacer arte del canto superando limitaciones vocales. Que, l¨®gicamente, a los 63 a?os tiemble a veces la voz o reclame el aplauso del p¨²blico entre pieza y pieza, a fin de relajarse, tiene poca importancia cuando a¨²n se pueden mostrar interpretaciones de firma. ?ste fue el mismo sentir del p¨²blico que llenaba el Teatro Real y que ovacion¨® a la cantante solicit¨¢ndole insistentemente las consabidas propinas y en una de las cuales, la Seguidilla de Carmen, tuvo matices que claramente demostraron lo que es una gran artista.