Espa?a-URSS, unas especiales relaciones de cultura
Desde el establecimiento de las relaciones diplom¨¢ticas entre Espa?a y la URSS, en 1977, ambos pa¨ªses han estrechado las relaciones culturales en multitud de campos. Seg¨²n asegura el autor de este art¨ªculo, esto se debe, entre otras cosas, a un substrato com¨²n de especiales relaciones culturales entre estas dos grandes potencias art¨ªsticas, que en los ¨²ltimos a?os se han visto considerablemente desarrolladas.
Los v¨ªnculos culturales han sido desde el establecimiento de relaciones diplom¨¢ticas en 1977, una de las orientaciones m¨¢s din¨¢micas y amplias en las relaciones sovi¨¦tico-espa?olas. Hasta la fecha hay firmados entre los dos pa¨ªses cuatro acuerdos intergubernamentales de cooperaci¨®n cultural y cient¨ªfica: los de enero de 1979, noviembre de 1979, mayo-junio de 1983 y marzo de 1985. Este ¨²ltimo comprende un programa para los a?os 1986 y 1987, con actividades muy amplias en los campos de la ciencia y la educaci¨®n, los estudios de idiomas y literatura, los intercambios art¨ªsticos (giras de grupos teatrales y musicales, danza, solistas, folclor, intercambio de exposiciones, etc¨¦tera); colaboraci¨®n mutua en cine, televisi¨®n y radiodifusi¨®n; contactos entre instituciones de archivos y bibliotecas, etc¨¦tera.El feliz desarrollo de, los v¨ªnculos culturales se debe, en opini¨®n de la parte sovi¨¦tica, no s¨®lo a la creaci¨®n de una s¨®lida base jur¨ªdico-contractual de cooperaci¨®n en este terreno, sino a que tambi¨¦n, en gran medida, ese progreso est¨¢ condicionado por las tradicionales relaciones especiales que a lo largo de los siglos se han venido desarrollando entre los dos pa¨ªses en la esfera cultural. La Uni¨®n Sovi¨¦tica y Espa?a son pa¨ªses de rica y variada cultura, a los que a veces se ha calificado como grandes potencias art¨ªsticas.
Intercambio
En 1980-1981, el intercambio de exposiciones de obras maestras del Museo del Prado y del Ermitage se convirti¨® en grandes acontecimientos en la vida cultural -de la URSS y de Espa?a. En la exposici¨®n conmemorativa de Picasso organizada en Madrid y Barcelona figuraron siete cuadros del pintor que posee la URSS. Despu¨¦s hay que dejar constancia de la exposici¨®n en Mosc¨² y Leningrado de una importante muestra del escultor espa?ol Pablo Serrano. Y, por ¨²ltimo, el Ayuntamiento -de Madrid ofreci¨® en el Centro Cultural Conde Duque (enero de 1985) la exposici¨®n dedicada al pintor sovi¨¦tico Glazunov que pertenece a la Real Academia de San Fernando de Madrid.
Otra faceta muy interesante de la vinculaci¨®n art¨ªstica entre. los dos pa¨ªses es la existencia en diferentes museos sovi¨¦ticos de colecciones de pintura espa?ola, sobre todo en Mosc¨² y Kiev, y muy especialmente en el Ermitage, de Leningrado, con la m¨¢s rica y variada de todas. La historia de las colecciones espa?olas en la URSS comenz¨® a finales del siglo XVIII, cuando el Ermitage -en aquella ¨¦poca, pinacoteca privada de la familia imperial Romanov- compr¨® una serie de cuadros de Ribera, Vel¨¢zquez y Murillo. Pero fue en 1814 cu4ndo se hizo la compra m¨¢s importante de pintura espa?ola, con la adquisici¨®n de 84 lienzos en Amsterdam al banquero Coesvelt, compra con la que el Ermitage se convierte en el poseedor de la m¨¢s importante colecci¨®n mundial de pintura espa?ola, exceptuando, l¨®gicamente, a la pen¨ªnsula Ib¨¦rica. Durante los siglos XIX y XX siguieron las adquisiciones, y hoy la colecci¨®n cuenta con joyas de la categor¨ªa de Los ap¨®stoles Pedro y Pablo, de El Greco; varios Vel¨¢zquez, Ribera, Zurbar¨¢n y Murillo; el Retrato, de Antonia de Z¨¢rate, de Goya, y 31 lienzos del per¨ªodo temprano de Picasso.
En la URSS funciona una escuela nacional para el estudio dela pintura espa?ola, y es frecuente la publicaci¨®n de monograf¨ªas y ensayos dedicados a artistas espa?oles. En Leningrado, Mosc¨² y Kiev se organizan conferencias cient¨ªficas dedicadas a los genios de la pintura espa?ola. Tambi¨¦n se ha creado, adjuntas a la Academia de Ciencias de la URSS, una serie de comisiones especiales para el estudio del Renacimiento y de las culturas de la pen¨ªnsula Ib¨¦rica. Por ¨²ltimo, con motivo de la visita de los Reyes de Espa?a a la URSS, el Museo de Leningrado organiz¨® la exposici¨®n Murillo y los pintores andaluces del siglo XVII en la colecci¨®n del Ermitage, edit¨¢ndose cat¨¢logo especial.
La dramaturgia espa?ola
Tambi¨¦n ha sido importante el intercambio de grupos y destacadas personalidades de la m¨²sica y la danza. En los ¨²ltimos a?os, en Espa?a actuaron el Teatro de ¨®pera y Ballet de Leningrado; el Conjunto de Cantos y Danzas del Ej¨¦rcito Sovi¨¦tico; el Ballet del Teatro de ¨®pera y el Ballet de Odessa, con Maya Plisetskaya; la Orquesta Sinf¨®nica de la Filarm¨®nica de Leningrado; el Coro de C¨¢mara de la Filarm¨®nica de Mosc¨², con Elena Obraztsova; la Orquesta Virtuosos de Mosc¨²; el conjunto de danza folcl¨®rica de Moiseev; el Teatro Central de T¨ªteres, y otras agrupaciones de primer rango. Paralelamente, en la URSS actuaron grupos espa?oles, como el Ballet de Antonio, la compa?¨ªa dram¨¢tica de Nuria Espert, la Antolog¨ªa de la Zarzuela, la compa?¨ªa de danza de Mar¨ªa Rosa, Luisillo y su Teatro de Danza Espa?ola, etc¨¦tera. En cada concierto o representaci¨®n de artistas espa?oles, el p¨²blico sovi¨¦tico se sent¨ªa verdaderamente feliz de familiarizarse con las seculares tradiciones del arte espa?ol. Recientemente, en Madrid despert¨® gran, inter¨¦s la exposici¨®n de la Historia del Ballet Ruso, efectuada en colaboraci¨®n con el Banco Exterior de Espa?a.
Tal vez no haya otro pa¨ªs en el mundo -excepto, naturalmente, la propia Espa?a- donde la dramaturgia. espa?ola goce de tanta popularidad como en la Uni¨®n Sovi¨¦tica. Las obras de autores espa?oles se presentan en centenares de teatros profesionales y de aficionados, se retransmiten por televisi¨®n y sirven de base argumental para pel¨ªculas, ¨®peras y ballets. S¨®lo en los a?os ochenta, La casa de Bernarda Alba, de Lorca, fue ofrecida por el Teatro Central para Ni?os (Mosc¨²), el Teatro Dram¨¢tico Ruso del Ej¨¦rcito Sovi¨¦tico (LVOV, Ucrania), el Teatro del Drama Musical de Voroshilovgrad (Ucrania), el Teatro Dram¨¢tico de Liepaja (Letonia), el Teatro Acad¨¦mico de Drama de Frunze (Kirguizia) y el Teatro Juvenil de Tallinn (Estonia). Sastre, Casona, Alberti, Buero Vallejo, son, junto con los cl¨¢sicos, autores igualmente bien conocidos por los sovi¨¦ticos, aunque Garc¨ªa Lorca sea el m¨¢s familiar.
En el arte cinematogr¨¢fico tambi¨¦n podemos hablar de una feliz intercomunicaci¨®n entre los pueblos espa?ol y sovi¨¦tico. Al ser preguntados algunos cineastas espa?oles sobre sus colegas sovi¨¦ticos, Bardem, por ejemplo, menciona el papel que ejerci¨® a la hora de elegir su profesi¨®n el libro La t¨¦nica de,la filmaci¨®n, de Pudovkin; Carlos Saura, por su parte, ha recordado la impresi¨®n que dejaron en ¨¦l las lecciones de sus profesores sobre Eisenstein. En la Uni¨®n Sovi¨¦tica se conoce bien a los cl¨¢sicos del cine espa?ol. Para toda una generaci¨®n de espectadores, pel¨ªculas como Calle Mayor y Muerte de un ciclista, de Bardem; Bienvenido, mister Marshall y El verarugo, de Berlanga, forman toda una ¨¦poca cinematogr¨¢fica. Pel¨ªculas espa?olas han sido premiadas en los festivales cinematogr¨¢ficos de Mosc¨² en m¨¢s de una ocasi¨®n. Una panor¨¢mica bastante integral de la cinematograf¨ªa espa?ola fue ofrecida por las semarlas del cine espa?ol que tuvieron lugar en 1979 y 1981.
Si nos referimos a las letras, el conocimiento mutuo es verdaderamente rico y extenso. El Quijote es un aut¨¦ntico ¨¦xito de ventas en mi pa¨ªs. Entre el Comit¨¦ Estatal de la URSS para Editoriales, Imprenta y Comercio del Libro y el Ministerio de Cultura espa?ol fue firmado un protocolo de c¨®operaci¨®n para los a?os 1983-1987. Un acuerdo an¨¢logo fue firmado entre la Asociaci¨®n de Editores Espa?o.les y la Agencia de la URSS para Derechos de Autor (VAAP).
Una organizaci¨®n p¨²blica
Hay, que dejar constancia de la sociedad URSS-Espa?a -creada el 11 de octubre de 1978-, una organizaci¨®n p¨²blica que agrupa a centenares de miles de ciudadanos sovi¨¦ticos, y cuyo objetivo es desarrollar la amistad y la confianza entre los dos pa¨ªses. La sociedad familiariza a la opini¨®n sovi¨¦tica con la historia, la cultura, la literatura, la econom¨ªa y el desarrollo social de Espa?a, contribuyendo igualmente a que la opini¨®n espa?ola se familiarice con la vida del pueblo y el Estado sovi¨¦ticos. Para ello mantiene relaciones de estrecha colaboraci¨®n con la Asociaci¨®n Espa?a-URSS, con otras organiz¨¢ciones p¨²blicas y culturales de Espa?a y personalidades que se pronuncian por la cooperaci¨®n y la amistad con la Uni¨®n Sovi¨¦tica.
Un dato revelador de la importancia cultural que todo lo espa?ol est¨¢ adquiriendo en la URSS es que el idioma castellano se estudia en 15 universidades e institutos sovi¨¦ticos. Las facultades de Filolog¨ªa de Mosc¨² y Leningrado, Kiev (Ucrania), Kishinev (Moldavia), Voronezh (Rusia) y Dniepropetrovsk (Ucrania) son los principales centros donde trabajan hispanistas. Existen departamentos y c¨¢tedras especializados en otros centros pedag¨®gicos, as¨ª como en la Universidad de Amistad - entre los Pueblos Patricio Lumumba, de Mosc¨². Y desde hace ocho a?os, la televisi¨®n central transmite cada jueves su programa Hable en espa?ol, con una audiencia de casi dos millones de personas en diferentes regiones del pa¨ªs.
En las escuelas sovi¨¦ticas de ense?anza general se imparte el castellano como materia optativa, dentro de los idiomas obligatorios, desde el cuarto grado. Tambi¨¦n existe la ense?anza media especializada de lengua espa?ola, en que el castellano se estudia desde el segundo grado, es decir, desde los ocho a?os. En 1978, la c¨¢tedra de Espa?ol y Portugu¨¦s de la universidad de Mosc¨² se transform¨® en c¨¢tedra de Filolog¨ªa Ibero-Romance, y en ella se estudian el catal¨¢n, el gallego y el euskera.
La Catalan¨ªstica es en la Uni¨®n Sovi¨¦tica una de las ciencias m¨¢s j¨®venes. Sin embargo, ya han aparecido interesantes estudios cient¨ªficos y magn¨ªficas traducciones literarias del catal¨¢n al ruso. En 1982 se gradu¨® en la universidad Lomonosov, de Mosc¨², el primer grupo de j¨®venes que estudiaron la lengua y la literatura catalanas como principal especialidad. Las tesis de fin de carrera de los estudiantes estuvieron dedicadas a la historia y al estado moderno del catal¨¢n y a las obras de dos escritores: Merc¨¦ Rodoreda y Salvador Espriu. Actualmente, la lengua y la literatura catalanas se estudian tambi¨¦n en la universidad de Leningrado.
El lector sovi¨¦tico comenz¨® a tomar conocimiento de la literatura catalana precisamente en base a obras de Espriu. Despu¨¦s de publicarse la traducci¨®n de su Letizia, la revista Inostr¨¢nnaya Literatura insert¨® en 1978 su poes¨ªa en versi¨®n de Serguey Goncharenko. La poes¨ªa de Espriu tambi¨¦n est¨¢ ampliamente representada en el libro Llamas y rosas, antolog¨ªa de poes¨ªa catalana moderna (Editorial Progreso, 1981), que recoge la mejor obra po¨¦tica de Maragall, Guerau de Liost, Josep Carner, Ioan Salvat Papasseit, Ferrater y Pere Giniferrer.
Otros nombres de la narrativa catalana se han editado en la URSS: Merc¨¦ Rodoreda (La plaza del diamante), y cuentistas como Pedrolo, Montserrat Roig, Carmen Riera, Lloreng Villalonga y Pere Calders.
Esta es, a muy grandes rasgos, una somera panor¨¢mica de las relaciones culturales mutuas entre la URSS y Espa?a. Falta mucho por hacer, ciertamente, pero el camino ya recorrido demuestra el inter¨¦s de sus pueblos por conocerse y entenderse, lo que en definitiva es una de las caracter¨ªsticas imprescindibles de una amistad leal.
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