"En esta crisis han ganado la funcionalidad y la operatividad del Gobierno"
El periodista de la cadena SER Jes¨²s Quintero, El Loco de la Colina, mantuvo con el vicepresidente del Gobierno, Alfonso Guerra, una entrevista retransmitida los d¨ªas 3 y 4 de julio, de la que reproducimos algunos p¨¢rrafos. Entre sus declaraciones destacan su opini¨®n sobre la Alianza Atl¨¢ntica -"No tengo ni a favor ni en contra de la OTAN nada. Lo que tengo son argumentos a favor de que Espa?a est¨¦ en la OTAN y argumentos en contra de que Espa?a est¨¦ en la OTAN"- y sobre el presidente Gonz¨¢lez, de quien dice: "Tiene una enorme capacidad para tomar un concepto y darle 10.000 vueltas".
Pregunta. Usted es uno de los pocos pol¨ªticos que se aventuran a decir cosas, claro que cuando se domina el lenguaje uno no dice lo que no quiere.Respuesta. Evidente. Ya le he dicho que uno es due?o de lo que calla y prisionero de lo que cuenta. Yo nunca he cre¨ªdo en el off the record. Nunca se respeta. Se respeta unos d¨ªas, unos meses, despu¨¦s se dice. Prefiero que aquello que yo no quiera decir, callarlo.
P. Usted por amor, ?dejar¨ªa la pol¨ªtica?
R. La pol¨ªtica la dejar¨ªa por cualquier cosa ... pero, el amor es un concepto absolutamente serio, que hace que muchas personas voluntariamente se cieguen.
P. ?Puede haber ministros que dejen la pol¨ªtica por amor?
R. Estoy convencido.
P. Me gustar¨ªa saber los argumentos que tiene en contra y a favor de la OTAN.
R. Bueno, no tengo ni a favor ni en contra de la OTAN, nada. Lo que tengo son argumentos a favor de que Espa?a est¨¦ en la OTAN y argumentos en contra de que Espa?a est¨¦ en la OTAN ... La redacci¨®n que el programa electoral incluye sobre la OTAN, es una redacci¨®n m¨ªa, que implica dos compromisos: primero, congelaci¨®n inmediata de la integraci¨®n en la estructura militar; y segundo, convocatoria de un refer¨¦ndum popular para la decisi¨®n sobre la adhesi¨®n o no de Espa?a en la estructura pol¨ªtica. Me siento absolutamente responsable de la redacci¨®n, porque yo era el responsable de la campa?a electoral. El primero, se cumpli¨® inmediatamente el 7 de diciembre de 1982; el segundo, se va a cumplir en esta legislatura Se cumplir¨¢ el programa a rajatabla. Ahora, que decida la poblaci¨®n. El pueblo tiene el derecho y la mayor¨ªa cultural y humana como para decidir.
P. Pero, ?qui¨¦n tiene los medios de comunicaci¨®n?
R. Pues, me da la impresi¨®n que los tienen las empresas privadas, y el Estado tiene Radio Nacional, Radiocadena y Televisi¨®n Espa?ola, y no est¨¢n en manos del Gobierno, sino del Estado.
P. ?Ha pensado en alg¨²n momento en dejar de ser vicepresidente y arreglar su partido por dentro? Parece que ¨²ltimamente hay problemas ...
R. No. No creo que el partido necesite ser arreglado, aunque desde luego hay problemas. Pero no son problemas superiores a los que ha habido en otras ¨¦pocas, ni mucho menos ... en la historia del partido, probablemente no ha habido una unanimidad tan clara alrededor de un l¨ªder y de un proyecto pol¨ªtico como el de ahora.
P. ?Qu¨¦ es lo que tiene Felipe Gonz¨¢lez?
R. Tiene una enorme capacidad para tomar un concepto y darle 10.000 vueltas. Y cuando le da 10.000 vueltas, va segregando una cantidad de riqueza en torno a ¨¦l que van recogiendo otros y que se convierte en doctrina que los dem¨¢s empiezan a elaborar.
"No m¨¢s votos, no menos, diputados
P. Van a ganar, pero ... con menos diputados, ?no?R. Todav¨ªa no me gustar¨ªa hacer una previsi¨®n, porque corno tuve el enorme acierto de decir doscientos dos y fueron doscientos dos ... ahora, arriesgo mucho ?verdad? Pero le voy a decir una previsi¨®n: "no m¨¢s votos, no menos diputados".
P. En toda esa crisis, que ha desembocado, o en el cese, ?qui¨¦n ha ganado?
R. La funcionalidad. La operatividad del Gobierno. Despu¨¦s de casi tres a?os de un equipo, l¨®gicamente hay algunos cansancios.
P. ?Hay la oposici¨®n que necesita el partido socialista?
R. Ahora que estamos en el Gobierno, a veces hacemos de oposici¨®n, qued¨¢ndonos en una situaci¨®n de repliegue, de r¨ªo respuesta a algunas de las cosas que dicen, porque, a veces tememos que una cierta inestabilidad de la propia oposici¨®n, nos llevara a unos resultados no convenientes para el conjunto de Espa?a.
P. ?No hay demasiada estrategia en la pol¨ªtica, demasiados pasillos, demasiados rumores ... ?
R. S¨ª. La pol¨ªtica tiene mal cartel. En primer lugar es tradicional que en el mundo se diga: los pol¨ªticos son todos iguales, son intercambiables, todos nos llevan al mismo sitio. En Espa?a, adem¨¢s, los cuarenta a?os de dictadura, de trapicheo continuo, eso, lo ha exagerado m¨¢s y, curiosamente, organiz¨® una especie de homenaje permanente de tal manera que un pol¨ªtico lanzaba una rosa al otro, y el otro, le devolv¨ªa una rosa al primero. Eso es lo que ahora hace que a veces, cuando yo digo una cosa normal, sencilla, y es lo que la gente est¨¢ pensando, hay media docena de pol¨ªticos que se ponen fren¨¦ticos. Entonces, la pol¨ªtica, tiene mal cartel. La idea de que los pol¨ªticos m¨¢s o menos son politiqueros. Son gente de pasillos, hacen todo fuera del lugar donde debe, es muy dif¨ªcil arrancarlos, y yo no s¨¦ por qu¨¦, la gente tiene la idea de que hablar en el pasillo es deshonesto, que hay que hablar en un despacho. ?Por qu¨¦ no se debe hablar en un pasillo? A m¨ª me parece normal. Claro est¨¢ que otros muchos pol¨ªticos, justifican la mala fama de la actividad pol¨ªtica que a m¨ª me parece tan digna como cualquiera, aunque yo no sea de vocaci¨®n estrictamente pol¨ªtica y la hacen indigna los que son indignos de la pol¨ªtica.
P. ?Esperaba encontrar lo que ha encontrado, al ser vicepresidente del Gobierno?
R. Es m¨¢s trabajoso de lo que esperaba y sobre todo, quiz¨¢s, la mayor sorpresa, es que es mucho m¨¢s ingrato de lo que esperaba. Y el sentimiento nuevo, quiz¨¢s, respecto de mis previsiones, es el sentimiento de impotencia, de cosas que uno sabe que hay que hacer, que debe hacer, y que no puede hacer.
P. ?C¨®mo le gustar¨ªa que fuese la Espa?a donde van a vivir sus hijos?
R. Tolerante, pr¨®spera, pac¨ªfica y culta.
"Vamos a eliminar a ETA"
P. ?Qu¨¦ piensa de la ofensiva de ETA?R. En esa organizaci¨®n terrorista, ha pasado por etapas en las que ha tenido mucha dificultad para actuar. Yo creo que en este momento, tiene tambi¨¦n dificultad. Y ha optado por mostrar que es capaz de maniobrar y lo est¨¢ haciendo de la manera en las que arriesgan menos porque tienen poco personal y se convierte, adem¨¢s de la manera m¨¢s criminal: la peor de todas, porqu¨¦ est¨¢ dejando coches-bomba a la salida de un campo de f¨²tbol, en el garaje de unos grandes almacenes y ha realizado un acto criminal que, pl¨¢sticamente, gr¨¢ficamente, ha reflejado con toda nitidez la monstruosidad de sus acciones: asesinar a un hombre joven acompa?ado por un ni?o de tres a?os. Pero se puede decir, y no debemos dejarnos enga?ar por los ¨²ltimos atentados, que ETA est¨¢ en una situaci¨®n de debilidad respecto de lo que era antes, a pesar de todos estos atentados y de los que pueda realizar, justamente, para demostrar que no est¨¢ acabada. No est¨¢ acabada sin duda, pero est¨¢ muy tocada y vamos a continuar apretando los tornillos porque esa banda terrorista que no quiere la democracia en Espa?a, que no quiere la convivencia, que asesina, que mata dejando a ni?os aterrados, con una fijaci¨®n para toda la vida, la vamos a eliminar. Y no es que la vamos a eliminar nosotros los socialistas y el Gobierno, o quien sea, es cosa de los espa?oles, es cosa de la sociedad espa?ola. Entre todos, sin duda, vamos a terminar con ETA, la vamos a eliminar porque son excrecencias de la sociedad, que no se lo merece una sociedad, un pueblo que ha pasado por mucho y que ahora tiene esta banda de iluminados criminales que no se merece este pueblo, y estoy convencido de que en un plazo que no se puede nunca fijar, como organizaci¨®n, con esta plebe, vamos a terminar.
P. ?Est¨¢n ellos forzando la negociaci¨®n? ?Han apurado ustedes ya todas las v¨ªas?
R. Da la impresi¨®n que matar impunemente a gente por la espalda no es precisamente buscar el di¨¢logo y la negociaci¨®n. La negociaci¨®n depende del aparato que tiene el Estado para defenderse de los criminales. Depende de una manera muy clara de la eliminaci¨®n de la actividad de esos terroristas, que puede ser encarcel¨¢ndolos, o puede ser con un resultado de enfrentamientos que siempre es una muerte, una desgracia, pero que, en esos enfrentamientos pueden caer personas y, desde luego, nosotros estamos plenamente decididos a poner toda nuestra contribuci¨®n a terminar con esa banda.
P. ?Es ahora la paz la ¨²nica revoluci¨®n posible?
R. No. Hay muchas revoluciones. Y se est¨¢n logrando. En Espa?a, hemos hecho una revoluci¨®n silenciosa, extraordinaria. Espa?a, es el pa¨ªs m¨¢s avanzado en tolerancia en las costumbres de toda Europa. Nadie nos puede dar lecciones. Hay una revoluci¨®n en Espa?a muy vertiginosamente empezada, que es la tecnol¨®gica, que va a cambiar probablemente los h¨¢bitos de los espa?oles. Hay una revoluci¨®n que va a pasos agigantados, que es la demanda cultural. Hay oferta cultural, sin duda, pero la demanda, es tremenda. Queda mucho por hacer, sin la menor duda. Pero hay apetencia. Y hay una revoluci¨®n magn¨ªfica que es la vuelta a la naturaleza. Las gente, est¨¢ ya midiendo cuando una acci¨®n es progreso.
P. ?Qu¨¦ me puede decir del centralismo?
R. En Espa?a, hab¨ªa un Estado centralista. Y, para colmo, autoritario, y se transformo en un Estado democr¨¢tico y ahora auton¨®mico y, dig¨¢moslo de una vez sin complejos. ?No hay un Estado federal en el mundo, que tenga las competencias que las comunidades aut¨®nomas tienen en Espa?a?. Ni uno. Ni en econom¨ªa, ni en capacidad pol¨ªtica, administrativa y econ¨®mica. Pero, ?cu¨¢l centralismo? Eso es papanatismo.
P. ?Son ruinosos los presupuestos de las diecisiete comunidades?
R. Depende como se empleen. Tienen una cantidad de recursos equivalente a lo que en esas competencias gastaba el Estado. Si los emplean bien no tienen por qu¨¦ costar ni una peseta. Al rev¨¦s, deb¨ªan de ser m¨¢s baratos, est¨¢n m¨¢s cerca, m¨¢s pr¨®ximos al ciudadano. Si los emplean mal, ser¨¢n m¨¢s caros. Hay ejemplos para todo.
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