El presupuesto de gastos en 1986 se situara entr¨¦ 6,5 y 6,7 billones de pesetas, seg¨²n Jos¨¦ Borrell
ENVIADO ESPECIAL El presupuesto de gastos del Estado para el a?o pr¨®ximo se situar¨¢ entre 6,5 y 6,7 billones de pesetas, y, pese a la dificultad intr¨ªnseca de limitarlo debido a las fuertes presiones sociales, el cr¨¦dito oficial, las ayudas de regulaci¨®n a la agricultura y a las empresas p¨²blicas ser¨¢n las principales partidas afectadas por los recortes presupuestarios, dentro del objetivo gubernamental adoptado el pasado mi¨¦rcoles en el Consejo de Ministros de limitar el d¨¦ficit p¨²blico total al 4,5% del producto interior bruto (PIB).
"Caiga quien caiga, se alcanzar¨¢ este objetivo", declar¨® Jos¨¦ Borrell, secretario de Estado de Hacienda, a la salida de un curso sobre el control de gasto p¨²blico que se desarrolla en la Universidad Internacional Men¨¦ndez Pelayo.El secretario de Estado a?adi¨® que "el presidente del Gobierno ha puesto toda su autoridad moral para que este presupuesto, el m¨¢s riguroso y solidario de todos, sea como debe ser".
Borrell anticip¨® algunos datos concretos de c¨®mo se desarrollar¨¢ el presupuesto para 1986, y, dentro de su conferencia en la universidad, deline¨® importantes aspectos de lo que ser¨¢ la filosof¨ªa del gasto p¨²blico en el pr¨®ximo presupuesto, que quedar¨¢ completado el pr¨®ximo lunes, al t¨¦rmino de un Consejo de Ministros extraordinario.
El secretario de Estado tambi¨¦n anticip¨® que el Gobierno se encuentra redactando otro presupuesto alternativo, relativo a los ingresos y gastos que supondr¨¢ en el a?o la adhesi¨®n espa?ola a la Comunidad Econ¨®mica Europea.
Seg¨²n Borrell, la filosof¨ªa del pr¨®ximo presupuesto estar¨¢ basada en el rigor y la solidaridad. Por eso el Gobierno, a?adi¨®, "s¨®lo podr¨¢ manipular, reduciendo partidas, en dos de cada 10 pesetas que componen el gasto". Seg¨²n el secretario de Estado, un 50%, de los gastos totales del Estado (incluyendo Seguridad Social y organismos aut¨®nomos) es inamovible y est¨¢ compuesto por lo que ¨¦l denomin¨® la herencia del pasado (33%), b¨¢sicamente pensiones y deuda del Estado, transferencias alas comunidades aut¨®nomas (7%) y gastos del Estado tradicional (10%), tales como Justicia, Defensa, Prisiones, Asuntos Exteriores, etc¨¦tera.
Las partidas de la solidaridad
Otro 30% adicional lo componen las partidas que describi¨® como de solidaridad (9% del total) y producci¨®n de bienes sociales y econ¨®micos, que el Gobierno, seg¨²n declar¨®, no tiene ninguna intenci¨®n de reducir. Se trata de la asistencia al desempleo, promoci¨®n del mismo y promoci¨®n educativa, tales como becas y acci¨®n social. Asimismo, el dinero empleado en hospitales, servicios asistenciales, ense?anza, vivienda y cultura tampoco se ver¨¢n afectados, aunque quiz¨¢ no fue tan expl¨ªcito al hablar de las partidas de bienes econ¨®micos como ferrocarriles, carreteras, aeropuertos, comunicaciones e investigaci¨®n.
El secretario de Estado de Hacienda especific¨® que s¨®lo ser¨¢ un 18% del gasto del Estado, concretamente, el que se ver¨¢ afectado por la pol¨ªtica de disciplina y rigor. Se trata del gasto destinado a la regulaci¨®n econ¨®mica y que est¨¢ compuesto por partidas como el cr¨¦dito oficial y la pol¨ªtica financiera, la promoci¨®n del ahorro y la administraci¨®n financiera, el comercio exterior y el dinero que se destina a la regulaci¨®n del mercado en agricultura, ganader¨ªa y pesca e industria y energ¨ªa.
Sobre los recortes en la regulaci¨®n agr¨ªcola, se?al¨® que ¨¦sta era una partida que ascendi¨® en el presupuesto de 1985 a m¨¢s de 400.000 millones de pesetas, y entendi¨® que exist¨ªa un margen para reducirlo de manera significativa. "El objetivo ser¨¢ adecuar la producci¨®n a los consumos de manera que no existan bienes excedentes", dijo. En industria y energ¨ªa, cuya partida super¨® el pasado a?o los 450.000 millones de pesetas, los repartos est¨¢n m¨¢s distribuidos y ser¨¢n m¨¢s dif¨ªcilmente atacables, pero a¨²n as¨ª, declar¨® Borrell, se podr¨¢ hacer mucho en el terreno de la empresa p¨²blica.
Los intereses de la empresa
Seg¨²n Borrell, el pasado a?o las empresas p¨²blicas destinaron, 450.000 millones de pesetas al mero pago de intereses de su deuda. Para el secretario de Estado de Hacienda, este cap¨ªtulo es reducible, de la misma forma que se obtendr¨¢n fondos adicionales mediante cambios en la titularidad (ventas de empresas) en el sector p¨²blico. En este sentido a?adi¨® que, aunque esta pol¨ªtica es dificil, ser¨¢ posible en algunos sectores como el ocio y la producci¨®n de bienes alimentarios.
Un cap¨ªtulo que permanecer¨¢ inalterable y que ya supone un 2% en el total del gasto del Estado ser¨¢n los fondos destinados a la reconversi¨®n industrial. S¨®lo en 1985, este cap¨ªtulo, junto a la reindustrializaci¨®n, supuso un desembolso de 205.000 millones de pesetas.
Por ¨²ltimo, el secretario de Estado de Hacienda se mostr¨® partidario de modificar el sistema habitual de presentaci¨®n del presupuesto del gasto, que divide los financieros y no financieros.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.