Una falla iniciada hace 250 millones de a?os
El epicentro del movimiento s¨ªsmico registrado ayer en M¨¦xico se sit¨²a frente a las costas de Acapulco y se encuentra en la conjunci¨®n de la placa tect¨®nica norteamericana (en el continente) y las subplacas de Cocos (en el oc¨¦ano), y del Caribe (continental-oce¨¢nica).Los ge¨®logos consultados por este diario creen que el terremoto procede de la subducci¨®n (solapamiento o movimiento en direcci¨®n al interior de la tierra, con un ¨¢ngulo de 45 grados) del borde de la subplaca de Cocos bajo la placa norteamericana, que pone en marcha los movimientos tel¨²ricos. Cuando esta placa se introduce en el interior de la placa norteamericana hay una fricci¨®n que acumula tensiones en la roca. El solapamiento puede haberse iniciado hace 250 millones de a?os.
Al producirse una gran acumulaci¨®n de tensiones derivadas del desplazamiento de las placas, al liberarse estas de la presi¨®n lo hacen en forma de vibraciones, es decir, seismos. Cuanto m¨¢s profundo est¨¦ el hipocentro, (epicentro interior), m¨¢s facilidades tiene el terremoto de batir un ¨¢rea m¨¢s grande. Cuanto m¨¢s superficial sea, se proyectar¨¢ sobre un ¨¢rea menos extensa, pero de modo m¨¢s intenso y con mayores efectos catastr¨®ficos.
Los terrenos de la zona continental mexicana tienen hasta 250 millones de a?os de antig¨¹edad. El suelo de la ciudad de M¨¦xico, en especial el de la zona m¨¢s c¨¦ntrica, se asienta sobre gruesas capas de lodo. Este basamento ha actuado de hecho como amortiguador de los movimientos de tierras que han azotado la ciudad cuando han sido de tipo oscilatorio, de desplazamiento horizontal, y no de tipo trepidatorio, de signo vertical, mucho m¨¢s tr¨¢gicos en v¨ªctimas y en destrucci¨®n de edificios.
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