Los ginec¨®logos antiabortistas trasladados hab¨ªan pedido el cambio, seg¨²n su jefe

Los tres ginec¨®logos que fueron trasladados de servicio por la direcci¨®n del centro maternoinfantil de la ciudad sanitaria Primero de Octubre, de la Seguridad Social, de Madrid, hab¨ªan solicitado dicho cambio en el transcurso de una reuni¨®n interna del personal del centro para no tener que atender a las pacientes despu¨¦s de un aborto terap¨¦utico, seg¨²n manifest¨® ayer el director del centro, Jos¨¦ Manuel Bris. Una ayudante t¨¦cnica sanitaria que estuvo presente en la reuni¨®n confirm¨® ayer a EL PA?S que fueron los propios m¨¦dicos quienes pidieron el traslado de servicio.

Los doctores Bot¨ªn, Muelas y V¨¢zquez, adscritos al departamento de Obstetricia y Ginecolog¨ªa del Primero de Octubre, denunciaron ayer p¨²blicamente su traslado, que les fue comunicado a trav¨¦s de una nota interior firmada por el director de la maternidad. Seg¨²n ellos, se trata de una acci¨®n de represalia por negarse a colaborar en procesos de aborto."Las dos ¨²ltimas mujeres a las que se les ha practicado un aborto en este centro presentaron reclamaciones a la direcci¨®n porque se les atendi¨® muy mal", asegura Bris, y afirma que ambos casos son inmediatamente posteriores a la reuni¨®n antes citada, en la que los tres ginec¨®logos defendieron su postura de que la objeci¨®n de conciencia se extiende a la atenci¨®n anterior y posterior a la realizaci¨®n del aborto.

"En uno de los casos, la paciente denunci¨® que, despu¨¦s de realizado el aborto, no, le pasaban visita y la dejaron abandonada durante horas. Cuando fueron a reclamar, aseguran, el m¨¦dico les dijo que se negaban a atenderlas a causa de su objeci¨®n de conciencia", dice Jos¨¦ Manuel Bris. "En el otro caso, a la mala atenci¨®n hubo que sumar la falta de sensibilidad que supone ingresar a la paciente en una planta de mujeres que ya hab¨ªan dado a luz. Y en general no se han facilitado los ingresos en el centro".

En definitiva, el director del centro asegura que su intenci¨®n al cambiar a estos especialistas de servicio no ha sido represaliar a nadie. Sin embargo, critica la actitud de quienes "no se niegan a atender a las pacientes que acuden por complicaciones despu¨¦s de haberse provocado ellas mismas un aborto, pero que se niegan a hacerlo cuando se trata de un aborto legal".

Reuni¨®n pol¨¦mica

"Cuando llega un perejil (aborto provocado ilegal en el argot del personal sanitario) nadie se niega a atender a la mujer que acude a nosotros, y no hay ninguna raz¨®n para que sea diferente en el caso del aborto provocado legal", afirma la ATS Pilar ?lvarez.Pilar ?lvarez recuerda la reuni¨®n que origin¨® esta pol¨¦mica. "La presidi¨® Jos¨¦ Manuel Bris y asistieron m¨¢s de 10 personas. Se iban a tratar problemas de coordinaci¨®n en los ingresos. El doctor Bot¨ªn dijo que se fuera pensando en las plantas donde deber¨ªan practicarse los abortos terap¨¦uticos. Cuando le dijeron que ser¨ªa en ginecolog¨ªa, asegur¨® que se negaban a atender a las mujeres que fueran a abortar, incluso antes y despu¨¦s del aborto, y que, si las pacientes que abortasen iban a estar en ese servicio, no ten¨ªa inconveniente en que lo trasladaran. El director le dijo que pensara bien lo que estaba diciendo, que era muy grave. En consecuencia, no es coherente afirmar ahora que se trata de una represalia".

Por su parte, Rafael Bot¨ªn, que tambi¨¦n es miembro de la junta directiva del Colegio de M¨¦dicos de Madrid, explic¨® ayer a EL PA?S que se le intentaba obligar no s¨®lo a ver a la paciente en el posoperatorio, sino tambi¨¦n a firmar el informe antes de abandonar el centro hospitalario.

La junta directiva del Colegio de M¨¦dicos de Madrid decidi¨® ayer presentar un recurso en la direcci¨®n provincial del Insalud contra las medidas tomadas sobre los tres m¨¦dicos del Primero de Octubre y expres¨® su total apoyo a los m¨¦dicos trasladados. El presidente del Colegio, Javier Matos, dijo: "La objeci¨®n de conciencia debe entenderse en toda su extensi¨®n".

Marciano S¨¢nchez Bayle, vicepresidente de la Federaci¨®n de Asociaciones para la defensa de la Sanidad P¨²blica (FADSP), ha explicado que los m¨¦dicos no pueden negarse a atender a un enfermo, sea cual fuere, lo mismo que no pueden negarse a atender a un suicida o a un drogadicto.