Angels Llach Ribas
La jefa de la Polic¨ªa Municipal de Molins de Rei dej¨® atr¨¢s sus responsabilidades de profesora de mecanograf¨ªa y taquigraf¨ªa
Angels Llach Ribas, de 33 a?os, casada y con un hijo, es desde el pasado 20 de septiembre la sargento jefe de la Polic¨ªa Municipal de Molins de Rei, localidad de 19.000 habitantes situada en el coraz¨®n d¨¦ la comarca del Baix Llobregat, conocida con el sobrenombre de cintur¨®n rojo de Barcelona. A pesar de que existen otras mujeres con la graduaci¨®n de sargento, Angels es la primera mujer en Espa?a que asume la m¨¢xima responsabilidad de las tareas de seguridad ciudadana.
Este hecho viene a sumarse para dar la raz¨®n a los que dicen que en Molins de Rei "son las mujeres las que mandan", desde que en 1979 resultara elegida alcaldesa la comunista Antonia Castellana. Otra mujer se encuentra al frente del gabinete de la alcald¨ªa y tambi¨¦n son mujeres quienes est¨¢n al frente de la secretar¨ªa y de la emisora de radio municipal. No es de extra?ar, por tanto, que este Ayuntamiento haya sido el pionero en crear un centro de planificaci¨®n familiar, el Casal de la Dona, y en manifestarse oficialmente en favor del aborto libre y gratuito.Sin embargo, Angels Llach, casada con un bombero de la Generalitat, dice que no es "en absoluto feminista". "Estoy contra el machismo y por la igualdad de sexos, pero mi marido es mucho m¨¢s feminista que yo". Estar al mando de la plantilla de la Polic¨ªa Municipal "es un trabajo como otro cualquiera". "Lo ¨²nico importante es hacer un trabajo y hacerlo bien". Hace cuatro a?os que ingres¨® como agente en el cuerpo y realiz¨® los cursos de cabo y sargento en la escuela de la Guardia Urbana de Barcelona.
Anteriormente se dedicaba a la decoraci¨®n y a impartir clases de taquigraf¨ªa y mecanograf¨ªa en una academia. Tambi¨¦n trabaj¨® en una librer¨ªa de Barcelona especializada en libros antiguos. El motivo por el que se decidi¨® a ingresar en la Polic¨ªa Municipal fue, seg¨²n explica, "la curiosidad y el pensar que si en Inglaterra las mujeres pod¨ªan hacer el trabajo de los bobbies, por qu¨¦ no iba a poder ser igual aqu¨ª".
Instalada tras la mesa de su despacho viste normalmente de paisano, porque "me es m¨¢s pr¨¢ctico y c¨®modo, aunque me pongoefuniforme cuando hace falta", dice.
Desde que tom¨® posesi¨®n de su cargo ha tenido tiempo de darse cuenta de que "es m¨¢s dif¨ªcil mandar que obedecer", a?ade. Entre los que fueron sus antiguos compa?eros y ahora subordinados "no ha habido ning¨²n problema de funcionamiento desde que me hice cargo de la jefatura. Solamente la l¨®gica sorpresa, pero me han aceptado con much¨ªsimo respeto".
A pesar de la seguridad y energ¨ªa que Angels, Llach irradia cuando imparte instrucciones a. sus agentes, se muestra intranquila y t¨ªmida al ser entrevistada por los medios de comunicaci¨®n: "Nunca me ha gustado salir en los papeles, aunque no tengo que esconderme de nada", dice. Y a?ade que "preferir¨ªa que las entrevistas se las hubieran hecho a la primera mujer que se dedic¨® a limpiar las calles".
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