Donde los precios de los productos b¨¢sicos no suben

La subida de precios de los productos b¨¢sicos, congelados durante d¨¦cadas, es defendida por los economistas m¨¢s avanzados y temida por los pol¨ªticos y la poblaci¨®n.

Desde la revista Eko, la publicaci¨®n econ¨®mica de mayor tirada, el economista David Kazakevich defend¨ªa la reducci¨®n de los subsidios estatales a los productos b¨¢sicos, que en 1980 supon¨ªan 25.000 millones de rublos. Un rublo vale unas 220 pesetas.

Sintom¨¢ticamente, Kazakevich se?alaba que los precios del pan en la URSS (16 kopecks por kilo (unas 35 pesetas) son inferiores a los de otros pa¨ªses socialistas. El resultado es que el pan se utiliza para alimentar el ganado, no s¨®lo por los campesinos individuales, sino tambi¨¦n por las granjas cooperativas, que llevan las hogazas crujientes a los cerdos, por ser m¨¢s baratas que los piensos.

Las subidas de los precios podr¨ªan afectar, de llevarse a cabo, a los pisos (alquileres), la energ¨ªa y el agua. Seg¨²n Kazakevich, los alquileres no cubren un tercio de los gastos de mantenimiento de los apartamentos. Rimashvskaia abogaba por el incremento de los alquileres en proporci¨®n a las comodidades y tama?o de la vivienda, pero no han faltado sovi¨¦ticos que abogaran por un reparto igualitario de los metros cuadrados construidos para evitar las diferencias.