Un mal arbitraje
Ur¨ªzar Azpitarte tiene una buena cualidad para moverse en el mundo del f¨²tbol: sabe hacer amistades entre directivos y periodistas. Pero sobre el campo defraud¨®. Su arbitraje puntilloso y antip¨¢tico dio la impresi¨®n de que ten¨ªa muchas ganas de hacerse ver. Su actitud podr¨ªa estar justificada por el no dejar pasar una para que el partido no se me vaya de las manos. Pero, cuando Archibald cay¨® en el ¨¢rea, su arbitraje qued¨® desautorizado.El Barcelona tuvo otra queja: el gol del empate, en el que protest¨® un fuera de juego posicional de Valdano. Para esos momentos, el equipo azulgrana ten¨ªa de qu¨¦ lamentarse: un penalti robado, un gol en contra discutible y cuatro tarjetas amarillas por ninguna a¨²n del Madrid. Y en partidos de esta intensidad una tarjeta amarilla es como cuatro personales en baloncesto. De hecho, el Barcelona perdi¨® luego un jugador por la segunda tarjeta. Ur¨ªzar, como tantos, manda mucho en lo intrascendente, pero falla en lo serio.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.