Una escalada pol¨ªtica, econ¨®mica y militar

El ¨²nico enfrentamiento militar hasta la fecha entre fuerzas de EE UU y de Libia se hab¨ªa producido el 19 de agosto de 1981, cuando cazas norteamericanos derribaron dos Sukhoi-22 libios sobre el goffo de Sidra. Las relaciones entre los dos pa¨ªses llevaban ya entonces casi dos a?os de r¨¢pido deterioro. Con anterioridad, el ¨²nico contacto militar entre los dos pa¨ªses habr¨ªa que referirlo a un pasado casi remoto, cuando el almirante norteamericano Stephen Decatur realiz¨® una campa?a contra los piratas berberiscos en 1811 en aguas del Mediterr¨¢neo, frente a las costas de los actuales Argelia, T¨²nez y Libia.

Como consecuencia de los incidentes de comienzos de diciembre de 1979, en los que una multitud hab¨ªa prendido fuego a la embajada norteamericana en Tr¨ªpoli, el 6 de febrero del a?o siguiente se produc¨ªa la virtual suspensi¨®n de las relaciones entre los dos pa¨ªses. El 6 de mayo del mismo a?o, cuando ya la misi¨®n popular libia en Washington hab¨ªa quedado reducida a una presencia simb¨®lica, se hac¨ªa oficial la ruptura de relaciones y el cierre de la legaci¨®n. Las razones que aduc¨ªa EE UU eran el supuesto apoyo de Libia al terrorismo internacional y su "l¨ªnea general de conducta inaceptable" en las relaciones entre Estados.Durante el mandato de Jimmy Carter, Washington hab¨ªa hecho gala de una cierta contenci¨®n al tratar el problema libio. En 1980, Carter haba dado la orden a sus fuerzas aeronavales de que no penetraran m¨¢s de tres millas al sur de la l¨ªnea trazada por el l¨ªder libio coronel Muammar el Gaddafi a la altura del paralelo 32?30' que sit¨²a todo el golfo de Sidra dentro de las te¨®ricas aguas territoriales libias. El r¨¦gimen de Tr¨ªpoli hab¨ªa reivindicado la totalidad de las aguas del golfo hasta una profundidad de m¨¢s de 100 millas en alta mar ya en 1973, y en 1979, en la tercera conferencia organizada por la ONU sobre la ley del Mar, EE UU hab¨ªa anunciado p¨²blicamente que no reconoc¨ªa semejante apropiaci¨®n de aguas territoriales.

La tensi¨®n generada por la ruptura de relaciones y las reivindicaciones mar¨ªtimas del coronel Gaddafi conocieron un r¨¢pido crescendo desde la elecci¨®n del presidente Ronald Reagan para suceder a Carter en 1981. Despu¨¦s de haber calificado a Gaddafi de enemigo p¨²blico n¨²mero uno de los EE UU, Reagan orden¨® a la VI Flota destacada en el Mediterr¨¢neo que demostrara su no reconocimiento de las ambiciones libias realizando maniobras en aguas de Sidra.

El primer incidente grave

El 19 de agosto de 1981 dos Sukhoi-22 libios eran derribados en un enfrentamiento sobre el golfo por dos F-14 norteamericanos, en el curso de unas maniobras aeronavales. Durante las primeras 24 horas de las maniobras, iniciadas el d¨ªa 18, los cazas libios hab¨ªan sobrevolado los buques norteamericanos, pero aparatos de la VI Flota los hab¨ªan interceptado oblig¨¢ndoles a volver a su cielo. El enfrentamiento se produjo, seg¨²n Washington, cuando en esta ¨²ltima ocasi¨®n los aviones libios hicieron fuego sin ¨¦xito contra los aparatos norteamericanos. La versi¨®n libia de lo ocurrido aseguraba que fueron ocho los F-14 atacantes y que los dos Sukhoi hab¨ªan logrado derribar a un aparato enemigo antes de ser alcanzado. EE UU nunca reconoci¨® haber perdido ning¨²n avi¨®n en el combate.

En diciembre de ese mismo a?o Washington prohib¨ªa virtualmente el viaje de ciudadanos norteamericanos a Libia, sancionando a todos los que hubieran visitado ese pa¨ªs sin un pern¨²so especial del Departamento de Estado, y el 10 de marzo de 1982 la guerra fr¨ªa entre los dos pa¨ªses se hac¨ªa econ¨®mica con el anuncio de la prohibici¨®n de importaci¨®n de crudo libio. Dos a?os m¨¢s tarde la medida se completaba con la prohibici¨®n de exportar a Libia cualquier tipo de material o tecnolog¨ªa que pudiera utilizarse en la industria petrol¨ªfera y ya el 17 de diciembre pasado se cortaban las ¨²ltimas relaciones econ¨®micas bilaterales al decretarse en Washington el fin de toda relaci¨®n de culquier tipo con organismos oficiales libios. Al mismo tiempo, Reagan ordenaba que los 1.000 ciudadanos norteamericanos que a¨²n resid¨ªan en el pa¨ªs norteafricar¨ªo, de un m¨¢ximo de 3.000 seis a?os antes, regresaran a EE UU. El 7 de enero de este a?o, sin embargo, el presidente norteamericano todav¨ªa encontraba nuevas medidas de retorsi¨®n al anunciar que todos los bienes del Gobierno libio en bancos privados norteamericanos quedaban congelados. La escalada pol¨ªtica y econ¨®mica no pod¨ªa tener ya entonces otra salida que la militar.

Los atentados de Viena y Roma

El 17 de diciembre de 1985 sendos ataques del terrorismo ¨¢rabe contra los aeropuertos de Viena y Roma hab¨ªan dado la oportunidad a Reagan de acusar -aunque sin pruebas tangibles- al l¨ªder libio de haber sido c¨®mplice de ambas matanzas, al apoyar a los grupos terroristas que las hab¨ªan perpetrado. Entre el 24 y el 31 de enero de este a?o unidades de la VI Flota realizaron maniobras aeronavales en aguas te¨®ricamente libias, a la vez como demostraci¨®n de fuerza y supuesto castigo por la culpabilidad de Gaddafi en los atentados citados. De la misma forma, entre los d¨ªas 11 y 14 de febrero pasado nuevas maniobras norteamericanas se hab¨ªan realizado en la zona, sin que oficialmente ni en una ocasi¨®n ni en otra aviones o barcos norteamericanos penetraran en los l¨ªmites del golfo. Con ocasi¨®n de las maniobras de enero, Gaddafi, hab¨ªa advertido que si barcos o aviones norteamericanos cruzaban la l¨ªnea de la muerte ello equivaldr¨ªa a una declaraci¨®n de guerra. Un primer plazo de esa guerra se abon¨® ayer con el hundimiento de una patrullera libia y el ataque a la base de Sidra.