El penalti de V¨ªctor inici¨® la explosi¨®n de j¨²bilo

DAGOBERTO ESCORCIAV¨ªctor cogi¨® el bal¨®n con sus manos y lo coloc¨® en el punto de penalti. Su gol clasificaba al Bar?a. Su gol era el que la afici¨®n azulgrana hab¨ªa estado esperando toda la noche. Su gol era en definitiva el que colocaba al Barga por segunda vez en la historia en una final de la Copa de Europa. V¨ªctor levant¨® la vista y decidi¨® lanzar el penalti a la izquierda del portero sueco. All¨ª la meti¨®. Levant¨® los brazos, dio media vuelta y se fue hacia el lateral. All¨ª llegaron todos sus compa?eros y cantaron con ¨¦l, con la afici¨®n, el gol m¨¢s largo.

Con ese gol, V¨ªctor hizo posible que la haza?a de su amigo Pichi Alonso no pasara desapercibida, que Carrasco dejara de llorar y lamentarse por el penalti que hab¨ªa fallado, que el parad¨®n de Urruti al ¨²ltimo penalti de la primera tanda de los suecos y su posterior transformaci¨®n en la porter¨ªa contraria tampoco quedaran en el olvido. Todo el equipo logr¨® lo que un Joan Gaspart calific¨® como "aut¨¦ntico milagro". Pero ellos tres, Pichi Alonso, Urruti y V¨ªctor fueron los destacados de una noche m¨¢gica, como en su d¨ªa lo fueron Zuvir¨ªa y Artola ante el Anderlecht en 1979, como lo fue Neeskens en la final de Basilea de ese mismo a?o, o Simonsen en la segunda Recopa conquistada por los azulgrana, o Julio Alberto cuando marc¨® ante la Juventus, o Archibald con sus goles ante el Oporto y la Juve en Tur¨ªn.

"La suerte nos ha sonre¨ªdo", coment¨® un tranquilo V¨ªctor que a continuaci¨®n explic¨® el lanzamiento del penalti. "Estaba convencido de que lo met¨ªa. No tir¨¦ en la primera tanda porque el entrenador fue preguntando a varios c¨®mo se encontraban, y aunque yo dije que estaba bien, el mister prefiri¨® a otros. Me concentr¨¦ en el disparo y sent¨ª como todos cantaban el gol". V¨ªctor no quiso, aprovechar tampoco la oportunidad para abogar por Pichi Alonso. "No es el momento para hablar de si le han dado o no las suficientes oportunidades, pero lo que s¨ª es cierto es que ¨¦l ha marcado casi siempre que ha jugado".

Urruti ten¨ªa la voz m¨¢s ronca que nunca de tanto gritar, de pelearse con los suecos que se tiraban en el ¨¢rea intentando buscar un penalti, de chillar al l¨ªnier, de "cantar esta victoria que es la antesala de lo m¨¢s grande que podemos conseguir con este club". "El gol anulado a ellos", explic¨® Urruti, "estuvo bien anulado porque el que remata estaba en claro fuera de juego. Hab¨ªa salido del campo y volvi¨® a entrar para rematar. Me fui corriendo hacia el ¨¢rbitro porque observ¨¦ como el juez de l¨ªnea hab¨ªa levantado la bandera". "Hemos hecho un esfuerzo tit¨¢nico", sefial¨® el guardameta que volvi¨® a sentir como todo el estadio le ped¨ªa que parara el ¨²ltimo penalti.