Un hombre de 30 a?os fallece por sobredosis
Luciano Segovia, de 30 a?os de edad, muri¨® por sobredosis de droga el pasado domingo en el domicilio de sus padres, en el barrio madrile?o de Vallecas. Fue encontrado por su madre con una aguja hipod¨¦rmica clavada en un brazo. El fallecido era camarero, en paro laboral desde hace 12 a?os, adicto a la hero¨ªna desde los tres ¨²ltimos, y ten¨ªa un hijo. Fue detenido por robo en numerosas ocasiones.
La vida de Luciano Segovia, seg¨²n sus familiares, fue "normal en una familia obrera" durante unos cuantos a?os. Ten¨ªa cuatro hermanos, uno mayor que ¨¦l, y tres menores. Excepto la hermana peque?a, de 14 a?os, estudiante, los dem¨¢s est¨¢n casados y trabajan en la actualidad. Su padre trabajaba en una empresa de juegos recreativos.Luciano era camarero, pero s¨®lo trabaj¨® unos pocos a?os, hasta los 18. En los a?os de b¨²squeda de nuevo empleo tuvo novia, "una joven estupenda", y con ella un hijo que vive con la madre. La pareja se rompi¨® cuando Luciano "se cogi¨® a la droga dura", explica su cu?ada. Llevaba nueve a?os mantenido por sus padres y familiares. "No ten¨ªamos dinero Para costearle la droga". Luciano fue repetidamente detenido por robo.
"Iba a peor. En vez de meterlos en la c¨¢rcel de Carabanchel, pod¨ªan tratar de curar a estos j¨®venes", apunta su cu?ada.
Centro de desintoxicaci¨®n
Luciano se neg¨® a los intentos de su familia por internarlo en un centro de desintoxicaci¨®n. A mediados del pasado mes de abril, seg¨²n relatan sus familiares, una patrulla policial encontr¨® a Luciano ca¨ªdo en la avenida de San Diego y lo traslad¨® al equipo quir¨²rgico de Vallecas donde le administraron un calmante y suero. "?l se debi¨® dar cuenta de que estaba muy malTen¨ªa los brazos llenos de bultos infectados. Unos d¨ªas despu¨¦s, el 23, dijo que quer¨ªa ir a un hospital".
No quiso, sin embargo, que lo acompa?aran sus padres. Al regreso, cont¨® que hab¨ªa estado con dos amigos de la familia en un hospital. Aqu¨ª -cont¨® Luciano- le dijeron que no deb¨ªa pincharse m¨¢s porque morir¨ªa, que tomara unos antib¨ª¨®ticos y que no pod¨ªan ingregarle porque carec¨ªa de cartilla de la Seguridad Social, pero nada de esto era cierto. Fue una disculpa para tranquilizar a su madre.
Con los antibi¨®ticos trat¨® de combatir la fiebre. Desde aquel, d¨ªa "lo pas¨® muy maI", recuerda su madre. A partir del ¨²ltimo jueves sali¨® a la calle varias veces "a comprar tabaco". El s¨¢bado repiti¨®. Regres¨® sobre lasi dos de la madrugada del domingo; cen¨® y se acost¨®. Poco despu¨¦s, su madre not¨® que Luciano no apagaba la luz de su cuarto y abri¨® la puerta. Le encontr¨® muerto.
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