La Junta de Extremadura elabora una plan de reforma que afecta al 80% de la agricultura regional

La Junta de Extremadura ha puesto en marcha una ley y ha elaborado un proyecto que regulan la reforma de los sistemas agrarios de ganader¨ªa extensiva y de cultivos de regad¨ªo. La normativa, que establece las condiciones m¨ªnimas de explotaci¨®n y rendimientos, afecta al 80% de la producci¨®n agraria de Extremadura. Las expropiaciones, contempladas en algunos supuestos, tendr¨¢n que realizarse en base a la ley de Fincas Manifiestamente Mejorables porque la Junta carece de competencias para legislar en este campo.

La ley de Dehesas, que entr¨® en vigor el pasado 5 de junio, es el primer paso dado por la Junta de Extremadura para acometer la reforma agraria. La importancia de esta ley radica en que la explotaci¨®n ganadera extensiva en dehesas ocupa en Extremadura el 50%,del suelo y representa todav¨ªa el 45% de una producci¨®n agraria que ascendi¨® a 141.761 millones de pesetas. La ley, en su exposici¨®n de motivos, no "pretende el simple reparto de tierras como objetivo primario", pero prev¨¦ el cambio de propiedad en aquellos casos extremos en que la tierra "sea incapaz de cumplir el fin que la legitima".El art¨ªculo 20 prev¨¦ expl¨ªcitamente la expropiaci¨®n de uso o forzosa "por inter¨¦s social". En este caso, la falta de jurisdicci¨®n del Gobierno de la comunidad aut¨®noma obligar¨¢ a recurrir a los instrumentos legales de car¨¢cter estatal, como son la ley de Fincas Manifiestamente Mejorables y a la expropiaci¨®n por utilidad p¨²blica.

Una de las principales novedades de esta ley, en opini¨®n de Francisco Amarillo, consejero de Agricultura de Extremadura, "es que fija un m¨¦todo objetivo para poder evaluar la producci¨®n agraria". Las mejoras a exigir en base a la ley de Fincas Manifiestamente Mejorables, por ejemplo, se basan en criterios subjetivos derivados de las inspecciones a las fincas mal explotadas. La ley va dirigida a mejorar los rendimientos de las explotaciones ganaderas en terrenos de m¨¢s de 100 hect¨¢reas, ya que en las dehesas extreme?as es donde se produce la mayor acumulaci¨®n de la tierra de car¨¢cter latifundista.

Impuesto por abandono

Otra de las innovaciones es incluir en el texto de la ley todo el desarrollo reglamentario, para evitar una posterior reclamaci¨®n sobre el desarrollo de la misma. La unidad de medida para cuantificar el aprovechamiento de la explotaci¨®n es la denominada "oveja reproductora tipo", con equivalencias en todas las especies ganaderas. Para medir los ¨ªndices m¨ªnimos de rendimiento se tienen en cuenta tambi¨¦n las caracter¨ªsticas del clima, la calidad del suelo y la vegetaci¨®n de la explotaci¨®n. Las actuaciones del Gobierno aut¨®nomo -en base a un plan de mejoras obligatorias, sanciones o, en ¨²ltima instancia, expropiaciones- se establecen a partir de una desviaci¨®n del 20% sobre los objetivos te¨®ricos marcados.Las explotaciones que no cumplan las indicaciones marcadas por la Consejer¨ªa de Agricultura pasar¨¢n en primar lugar a engrosar un censo de fincas deficientemente calificadas y a soportar un impuesto de 3.000 pesetas, incrementado por el ¨ªndice de desviaci¨®n. La ley de Deheses fija adem¨¢s labores culturales obligatorias, como la conservaci¨®n de los cultivos forestales, la recomendaci¨®n de ciertas podas y la prohibici¨®n de talas de encinas o alcornoques, seg¨²n los casos.

Este primer instrumento para acometer la reformas agraria se ver¨¢ complementado en breve con la ley de Regad¨ªo, sistema de cultivo que representa el 35% de la producci¨®n final agraria. El proyecto de ley, ya elaborado por la Consejer¨ªa de Agricultura, ser¨¢ presentado al Parlamento regional el pr¨®ximo mes de septiembre y est¨¢ sometido ahora a una fase de discusi¨®n para intentar buscar un consenso con las asociaciones profesionales agrarias y fuerzas pol¨ªticas. El texto del proyecto penaliza el abandono del regad¨ªo, salvo excepci¨®n autorizada por la Administraci¨®n, y determina la extensi¨®n de la parcela m¨ªnima para intentar rentabilizar las explotaciones.

La definici¨®n de toda parcela m¨ªnima de regad¨ªo como aquella que proporcione una renta 3,5 veces superior al salario m¨ªnimo interprofesional "intenta favorecer la concentraci¨®n parcelaria en los regad¨ªos", afirma Francisco Amarillo. La productividad media del regad¨ªo extreme?o est¨¢ actualmente entorno a las 100.000 pesetas por hect¨¢rea. Esta relaci¨®n entre la producci¨®n industrial y la agraria tiene tambi¨¦n un tope m¨¢ximo, previsto inicialmente en dos veces y media la extensi¨®n de la parcela m¨ªnima.